Besê Hozat, co-presidenta del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK), fue entrevistada Medya Haber TV. La comandanta habló sobre la situación en el sur de Kurdistán (Bashur, norte de Irak) y denunció los ataques permanentes de Turquía contra el pueblo kurdo.
Hozat criticó la política del Partido Democrático de Kurdistán (PDK), que administra el Gobierno Regional (GRK) en Bashur. La dirigente denunció que el clan Barzani, en el poder desde 2003, envía a sus propias unidades armadas a las áreas de la guerrilla en las montañas de Qandil.
Para la co-presidenta de la KCK, “Turquía está librando una guerra de exterminio. La posición actual del PDK debe evaluarse en este contexto. Turquía quiere destruir todos los logros kurdos. A través del genocidio kurdo, quiere establecer un nuevo régimen como una síntesis turco-islámica. Su objetivo para 2023 es establecer un régimen de fanatismo religioso, con nacionalismo y racismo”.
“Con este objetivo, entre otros, se está llevando a cabo un ataque de ocupación en Bashur –agregó Hozat-. Cientos de personas de la población civil ya han perdido la vida. Se están construyendo bases militares en todos los lugares a los que llega el Estado turco. Paso a paso, toda la región quiere ser ocupada hasta la anexión de Kirkuk y del sur de Kurdistán”.
La también comandanta del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) advirtió que “este ataque se lleva a cabo con el apoyo del PDK”, algo que “significará su propio fin”. “Turquía está gobernada por un régimen asesino y colonialista –explicó Hozat-. Lo que el PDK espera de esto debe entenderse exactamente. Más recientemente, la UPK (Unión Patriótica de Kurdistán) ha comentado sobre los desarrollos. Sedi Pire explicó que el Estado turco ha ocupado Behdinan y la UPK no sabe qué ha acordado el PDK con el gobierno del AKP/MHP de Turquía. La UPK ve el peligro de una ocupación del sur de Kurdistán. Goran y otras organizaciones también han expresado su preocupación y cuestionan lo que está sucediendo”.
Hozat puntualizó que en la región de Gare, los Peshmerga –las fuerzas militares del PDK- “no quieren ir allí, no quieren participar en los ataques de ocupación en las Zonas de Defensa de Medya”, donde se encuentran las bases de la insurgencia del PKK.
“Ni la población ni los Peshmerga quieren eso. Por esta razón, las unidades de Zerevan están estacionadas en Gare. Esta es una unidad especial. Las unidades Peshmerga que fueron enviadas previamente a las Zonas de Defensa de Medya serán retiradas, en su lugar se desplegarán las unidades Zerevan –analizó la dirigente-. Los Zerevan son unidades especiales de la familia Barzani. El PDK sabe que los Peshmerga no quieren ir a esta guerra. Por tanto, existe un plan especial del PDK y Turquía. Las unidades de Zerevan están estacionadas donde el Estado turco no puede invadir. Se despliegan entre las zonas de la guerrilla para romper la conexión de una zona a otra. Las rutas de conexión deben bloquearse. Las guerrillas están destinadas a ser empujadas a un lugar para que el Estado turco pueda aplastarlas”.
Hozat alertó que “lo que está sucediendo en este momento es la preparación para la guerra. La situación actual es extremadamente peligrosa. Por el momento, el PDK da la impresión de que quiere llevar a cabo un ataque integral junto con el Estado turco. Eso es lo que indican los preparativos. Una declaración de guerra conjunta con Turquía es un plan muy peligroso, que significa el fin del PDK y la destrucción de todos los logros en el sur y otras partes de Kurdistán”.
“Con la implementación de este plan, el sur de Kurdistán perderá su estatus de región autónoma –afirmó-. El PDK debe abstenerse de esta peligrosa política, porque hará que todos los kurdos pierdan su estatus. Una vez que las fuerzas kurdas en resistencia sean aplastadas, los kurdos colaboradores también se verán afectados. El pueblo kurdo no debería tener que volver a experimentar semejante tragedia”.
FUENTE: Medya Haber TV / ANF / Edición: Kurdistán América Latina