La crisis económica provocada por el embargo y la situación general se siente en toda Siria. Frente a esto, el movimiento de mujeres Kongreya Star está constantemente construyendo nuevos proyectos cooperativos en las regiones autónomas del norte del país, a través de los cuales, por un lado, se asegura la subsistencia y, por otro, se contrarresta eficazmente la especulación de precios. Las cooperativas de mujeres intentan satisfacer las necesidades de la sociedad con precios justos.
El Comité Económico de Kongreya Star ha establecido toda una serie de proyectos agrícolas para mujeres en la región de Cizire. Aproximadamente, 275 mujeres trabajan permanentemente en estos proyectos en Derik, Qamishlo, Tirbespiye, Amude, Heseke y Shaddadi. En Amude, ya se ha establecido un mercado en el que se venden verduras a precios razonables, y se están desarrollando proyectos de huertas en Dirbesiye y Tirbespiye.
En Heseke y Rimelan se brindaron cursos de formación sobre producción textil. La ropa producida allí se vende en Qamishlo y Dirbesiye. También hay un curso de carpintería: las mujeres producen muebles y los venden en Qamishlo y Girkê Lege.
Hay proyectos de panadería en Heseke y Til Temir, cría de animales en Tirbespiye y Qamishlo, y cooperativas de panadería en Amude, bajo el nombre “Lara”. Además, se abrieron restaurantes cooperativos en Heseke y Dirbesiye. En estas cooperativas trabajan 400 mujeres de forma permanente. Los precios justos son un objetivo de estos proyectos. Esta forma de permitió que los precios del mercado se redujeran a pesar de los intentos de especulación.
Lema Xelil es una de las líderes de una cooperativa en Tirbespiye y cuenta que las mujeres se han independizado económicamente a través de las cooperativas, pero que con estas experiencias también hacen una contribución importante a la economía de la región. “Los productos de las cooperativas se ponen a disposición de la población a un precio razonable. Por ejemplo, el ajo cuesta 2.000 liras en el mercado y sólo 400 liras en las cooperativas”, agrega.
Armanc Mihemed, del Comité para la Economía de la Mujer en el Norte y el Este de Siria, explica que “nuestras cooperativas están trabajando muy bien. Nuestro objetivo es extender la vida comunitaria a toda la sociedad y fortalecer la economía de la región”.
No las queremos para obtener ganancias, por el contrario, queremos destruir esta mentalidad de círculos de ganancias. Queremos ayudar a estabilizar la economía, que se ha visto debilitada por las sanciones”, resume.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina