Al cumplirse el sexto año del inicio de la Revolución de Rojava (norte de Siria) las principales organizaciones políticas y de autodefensa de la región se manifestaron sobre el profundo proceso de cambio social y los desafíos de los pueblos que habitan la zona.
Desde las Unidades de Protección del Pueblo (YPG) expresaron que “todos los logros, la victoria sobre el terror y la construcción de organizaciones democráticas y de la sociedad civil, pueden lograrse gracias a la resistencia de estos héroes y heroínas (los mártires)”.
“Sin lugar a dudas, la revolución de Rojava ha demostrado ser pionera de la revolución siria y lo ha demostrado de la manera correcta. En muchas regiones del país, los intereses de las fuerzas extranjeras fueron tomados como base ignorando el orden interno. Como resultado, la revolución siria se salió de su camino y provocó que el país se hundiera en la oscuridad y el terror”, advirtieron desde las YPG.
Las Unidades de Protección del Pueblo recordaron que “la revolución de Rojava comenzó frente al sufrimiento que el pueblo kurdo ha tenido que soportar, exigiendo libertad y construyendo una sociedad igualitaria y democrática”.
“El modelo de autonomía democrática es un ejemplo sorprendente de una revolución que es portadora de esperanza para un pueblo en busca de su libertad. El modelo fue construido en todas las regiones que fueron liberadas de las fuerzas reaccionarias y sirve como ejemplo para Siria, que está dividida por la guerra civil”, destacaron.
En tanto, las Unidades de Protección de las Mujeres (YPJ) también recordaron a sus mártires que “cayeron en defensa de la ética humana y social”. “La revolución de Rojava comenzó bajo el liderazgo de las mujeres y cada día es más fuerte. La lucha de las mujeres kurdas tiene indudablemente una tradición histórica”, indicaron.
“La revolución de Rojava, dirigida por mujeres kurdas, se ha expandido con la participación de árabes, siríacas, turcomanas y otros pueblos y religiones, convirtiéndose en una inspiración para la libertad de las mujeres de todo el mundo”, enfatizaron desde la organización.
“Con la revolución, las mujeres han ganado un lugar y han demostrado su poder, no solo en el sentido militar sino también en las esferas política, ideológica, filosófica y de todos los demás ámbitos de la vida. Es por eso que la revolución de Rojava es una revolución de las mujeres”, sentenciaron.
Por su parte, la Asamblea General del Partido de la Unión Democrática (PYD) remarcó en un comunicado que en el norte de Siria “había necesidad de una nueva revolución que expresara una vida libre y pacífica como resultado de la crisis de los sistemas soberanos en Oriente Medio”.
“La revolución de Rojava del 19 de julio fue la respuesta a esta necesidad. La chispa revolucionaria que comenzó en Kobanê se extendió por todo Rojava y el norte de Siria, y esta chispa sigue ardiendo por la construcción de una sociedad política moral”, agregaron.
“La revolución se basó en la política democrática y en una tercera vía. Fue en este contexto que se estableció la Administración Autónoma Democrática, liderada por mujeres y jóvenes”, explicaron desde el PYD.
El Partido de la Unión Democrática analizó que también “se desarrolló una revolución en lo que se refiere a la autodefensa. Por ello las fuerzas de autodefensa, YPJ e YPG fueron establecidas: para responder a los ataques. La liberación de Kobane, Raqqa y otras regiones del terror mundial del Daesh no solo fue una victoria en el norte de Siria, sino en el mundo entero. La revolución del 19 de julio inició un nuevo proceso para todos los pueblos de Medio Oriente”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina