Después de que Youssef, Mazloum y Mihemed Gulo -los tres pobladores de Qamishlo en Rojava-, fueran asesinados en un ataque con aviones no tripulados turcos en el barrio de Hilêliyê, miles de personas salieron a las calles en el lugar donde fue lanzado el ataque.
La multitud marchó primero hasta la carpa instalada en la plaza Mártir Xebat para recibir a las personas que ofrecían sus condolencias. Un minuto de silencio fue seguido por el discurso de Hesen Ubêd, en representación del Consejo de las Familias de los Mártires del cantón de Cizire.
Ubêd declaró que “la familia Gulo es una de las que sacrificaron sus vidas por Kurdistán. Los planes del Estado turco se han visto frustrados gracias a la lucha y la sangre de nuestros mártires”.
“Prometemos una vez más que continuaremos nuestra lucha tras las huellas de nuestros mártires –remarcó Ubêd-. Liberaremos nuestra tierra de los invasores. Esta es nuestra tierra, y de nadie más”.
Hablando en nombre de la familia de los mártires, Rêzan Gulo enfatizó su determinación de mantener la lucha por la liberación de todo Kurdistán. Agregó que Youssef tenía una lucha activa desde el día en que conoció al líder kurdo Abdullah Öcalan.
“Había dado su palabra de luchar con la filosofía del líder Öcalan y la mantuvo hasta el último momento de su vida. Cayó mártir y volvió a demostrar su lealtad a su país y su tierra. Hizo lo que le había prometido a su pueblo y a los mártires”, aseguró Rêzan.
“Prometemos a nuestros mártires y al mártir Youssef Gulo una vez más. Resistiremos con la filosofía del líder Öcalan hasta nuestro último aliento para lograr sus objetivos”, remarcó.
Esta mañana comenzó la procesión fúnebre para despedir a los mártires de la familia Gulo. Con la llegada de los cuerpos al santuario Mártir Dalil Sarukhan, se inició el solemne funeral con un minuto de silencio.
En todo Qamishlo además se decretó un día de duelo para toda la población.
FUENTE: ANF / ANHA / Edición: Kurdistán América Latina
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