El domingo se realizó una manifestación en Shengal (Sinjar, norte de Irak) contra el acuerdo sobre el futuro de la zona de mayoría yezidí, concertado entre los gobiernos del Irak y de la Región Autónoma del Kurdistán del Sur (GRK). Además de los yazidíes, participaron en la protesta habitantes suníes, chiítas y árabes de la región, así como líderes religiosos, políticos y representantes de la sociedad civil.
Hasta ahora, se conoce poca información sobre el acuerdo celebrado el viernes entre Bagdad y Hewlêr (Erbil). Según los informes de los medios de comunicación, aborda cuestiones de política administrativa y de seguridad, así como la provisión de infraestructura estatal. Según Bagdad, Hewlêr es ahora responsable de la administración de la región y la seguridad es responsabilidad del gobierno central iraquí. Aunque varias unidades de combate están a punto de ser disueltas, no está claro qué sucederá con las Unidades de Defensa de Shengal (YBŞ), las fuerzas de autodefensa que rechazaron las avanzadas del Estado Islámico (ISIS).
El Consejo Autónomo Democrático de Shengal (CADS) tampoco tiene información sobre el contenido del acuerdo, porque la institución no participó ni en las conversaciones preliminares ni en el propio acuerdo. Tampoco se incluyó a los habitantes de la región en el proceso de adopción de decisiones. Por esta razón, las organizaciones yezidíes están indignadas porque el acuerdo parece estar en consonancia con los objetivos geoestratégicos del gobierno turco, un aliado principal del GRK.
Exactamente esto fue subrayado durante la manifestación en Shengal. En un discurso, el activista Ziman Rihan Hesen subrayó que las comunidades de Shengal no están dispuestas a aceptar decisiones y acuerdos de fuerzas que han perdido su legitimidad debido a su contribución al genocidio de agosto de 2014. De esta manera, se refirió a los Peshmergas, las tropas del GRK que abandonaron la región cuando ISIS comenzó sus ataques contra los yezidíes.
“A nuestros ojos, este acuerdo es ilegítimo. Todos los presentes reafirmamos nuestra voluntad de contribuir al retorno de todos los yezidíes desplazados o fugitivos, así como a la reconstrucción de nuestra región y a la solución de todos los problemas. Esta ha sido nuestra voluntad desde el principio”, aseguró Hesen.
El activista remarcó: “No aceptamos este acuerdo. Exigimos que los pueblos de Shengal participen en todas las decisiones que afecten a la administración de la región. También exigimos la creación de un comité compuesto por todos los componentes de Shengal y que participe en las negociaciones”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina