La Oficina de Abogados de Asrın publicó un informe para llamar la atención sobre el aislamiento agravado impuesto sobre el líder kurdo Abdullah Öcalan.
El informe se anunció ayer en una reunión celebrada en las oficinas de Estambul de la Asociación de Derechos Humanos (İnsan Hakları Derneği – İHD).
El informe refiere al Tribunal Constitucional y a los llamamientos del TEDH y al enfoque del CPT (Comité para la Prevención de la Tortura). También hace hincapié en que el contacto más ínfimo con Öcalan cambia para mejor la atmósfera en el país.
Los abogados llamaron al público a “ser conscientes y mostrar su protesta democrática para que el sistema de Imrali pueda ser eliminado”.
Öcalan está encarcelado desde hace 17 años en la isla-prisión de Imrali, en el mar de Marmara, luego de ser secuestrado por los servicios de inteligencia de Estados Unidos, Turquía e Israel.
Desde la última visita del abogado de Öclan el 27 de julio de 2011, los llamamientos constantes para que sus defensores legales lo visiten no han dado ningún resultado. En el último año, todos los llamamientos de visitas de los abogados, presentados dos veces a la semana -los miércoles y viernes-, han sido rechazados. Todas estas apelaciones hasta el 15 de julio de 2016 fueron rechazadas con excusas extremadamente increíbles como “mal tiempo” o “mal funcionamiento del barco”.
En el informe se destaca que “es inaceptable usurpar los derechos y libertades más fundamentales de los presos que se encuentran en una cárcel aislada como es la de isla de Imrali, durante un estado de emergencia que abarca un período de tiempo imprevisible e incompleto”.
Junto con los abogados y la familia de Öcalan, un comité internacional, compuesto por diputados del Parlamento Europeo, sindicalistas, académicos y activistas de derechos humanos de varios países, solicitó también una cita del Ministerio de Justicia para visitar la prisión de Imrali el 17-18-19 de febrero de este año. El pedido quedó sin respuesta.
Como la prohibición a sus abogados entró en el séptimo año, el parlamentario del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Berdan Öztürk preguntó por escrito sobre esta situación al Ministerio de Justicia, quien respondió lo siguiente en enero de 2017: “El convicto en cuestión es capaz de reunirse con sus abogados como parte de su derecho a la asistencia jurídica y el derecho a la defensa, al igual que otros presos y detenidos, pero los malos funcionamientos ocasionales en el buque o las malas condiciones meteorológicas dificultan el acceso a la isla donde está la cárcel que alberga al convicto, por lo que puede haber obstáculos para reunirse con sus abogados”.
En el informe presentado se advirtió que “esta respuesta expone el aislamiento y expone el hecho de que se intenta ocultar la realidad de Imrali y se engaña al público”.
Durante el aislamiento absoluto al que es sometido Öcalan, los abogados han realizado con regularidad las visitas necesarias y dado la información necesaria al Comité para la Prevención de la Tortura, órgano del Consejo de Europa con autoridad para visitar las cárceles de los Estados miembros (incluido Turquía). El CPT ha visitado recientemente la prisión de Imrali, del 28 al 29 de abril de 2016, pero, contrariamente a sus seis visitas anteriores, todavía no han publicado su informe que incluya los hallazgos y sugerencias aunque haya pasado 15 meses. Hasta ahora, Turquía no ha aprobado el informe del CPT.
En el informe presentado, se estimó que “es inconcebible que el CPT, habiendo identificado muchas violaciones de los derechos en la prisión de Imrali y ofrecido muchas soluciones para superarlas en las visitas e informes pasados, se mantenga silencioso hoy en día ante un total apagón de información”.
A esto se agregó: “En lo que respecta a la salud y la seguridad de los reclusos en la prisión de Imrali, aumentan para mal la situación tras el intento de golpe de Estado del 15 de julio y no se puede obtener información. El CPT visitó muchos centros de detención en Turquía durante su viaje del 29 de agosto al 6 de septiembre de 2016, y también en 2017, y no visita la prisión de Imrali, lo que hace suponer que hay un consenso tácito sobre el asunto”.
En la conclusión del informe se explicó que “los acontecimientos experimentados en todo el país durante el proceso de Imrali, desde 1999 hasta nuestros días, han demostrado claramente que cada vez que las políticas de seguridad han surgido en el enfoque hacia la cuestión kurda, el aislamiento en la prisión de Imrali se ha profundizado”.
“Hoy en día hay inconfundibles paralelos entre las condiciones en que se encuentra el país y el absoluto aislamiento en Imrali. Por un lado, el país atraviesa un caos y un conflicto profundo, y por el otro hay un apagón total de las comunicaciones para Imrali, y se evita todo contacto”, alertaron.
A su vez, manifestaron que “es un hecho claro que, incluso el contacto más ínfimo con el Abdullah Öcalan, creará una atmósfera muy positiva en toda la sociedad. Öcalan, insistiendo en sus esfuerzos por la paz, incluso durante su última visita de su hermano el 11 de septiembre de 2016, mostró una vez más que incluso bajo condiciones de aislamiento absoluto, ha hecho de la solución democrática y pacífica de la cuestión kurda su razón de ser”.
Según el informe, el sistema aplicado en Imrali “es inaceptable en todos los sentidos humanos, legales y políticos” y “se ha construido con el fracaso de la ley”, pero “puede ser desmantelado”.
FUENTE: ANF/Edición: Kurdistán América Latina