La Comisión de Derecho y Derechos Humanos del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) junto a un grupo de abogados, presentaron una denuncia penal contra las autoridades turcas por los ataques, el linchamiento y la tortura sufridos por civiles en las zonas afectadas por los terremotos que sacudieron al país la semana pasada.
En una declaración, desde el HDP –la tercera fuerza política del Parlamento- expresaron: “Nuestra Comisión de Derecho y Derechos Humanos, así como los abogados de nuestro partido, presentaron una querella criminal contra funcionarios públicos y no públicos que cometieron personalmente y/o participaron en los ataques de linchamiento y tortura que se desarrollaron como resultado de la percepción creada por el gobierno mientras la sociedad turca intentaba curar las heridas del terremoto”.
En la denuncia penal se enumeran las acusaciones, como por ejemplo “delito de tortura y acoso”, “abuso de funciones”, “lesiones intencionadas”, “homicidio deliberado”, “injurias” y “privación de libertad”.
En el HDP señalaron que tras el terremoto, el Estado turco violó la legislación nacional e internacional. “En las imágenes publicadas en las redes sociales, personas que presuntamente son agentes del orden torturan a algunos civiles, a los que acusan de haber cometido delitos como robos o saqueos. Vemos que se alaba y se instiga la tortura”.
La agencia de noticias EFE informó ayer que “un detenido como sospechoso de haber cometido pillaje entre las ruinas de los edificios destruidos por los terremotos de hace una semana en Turquía, ha muerto en comisaria después de haber sido supuestamente torturado”.
La gendarmería, un cuerpo policial militarizado, ha declarado que el detenido murió tras golpearse la cabeza al lanzarse él mismo contra una pared. Según la emisora Halt TV, la autopsia revela que el fallecido tenía la nariz rota y murió de una hemorragia cerebral.
En la Comisión del HDP aseguraron que el fallecido, Ahmet Güresçi, fue detenido en Hatay, en el sudeste de Turquía, junto a otra persona el lunes y que ambos fueron torturados mientras estaban bajo custodia. El hermano de Güreşçi, Sabri, también fue detenido y sometido a torturas.
Los padres de los hermanos han presentado una denuncia por tortura y asesinato, en tanto que Sabri Güreşçi identificó a cinco gendarmes que lo torturaron.
Los abogados que representan a la familia indicaron que hasta ayer el propio Sabri y otras cuatro personas seguían bajo custodia de las fuerzas de seguridad.
Los letrados también advirtieron que recibieron amenazas por parte de los uniformados.
Los terremotos que afectaron el sur de Turquía y el norte de Siria dejaron como saldo alrededor de 35.000 personas muertas. En total, se calcula que más de 13 millones de pobladores fueron afectados por los sismos. El ministerio de Medio Ambiente de Turquía detalló que 153.506 viviendas particulares de 33.143 edificios han resultado “seriamente dañadas” y deben ser “demolidas”
FUENTE: ANF / EFE / Edición: Kurdistán América Latina
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