A tres semanas de las elecciones, el gobierno de Recep Tayyip Erdogan ordenó la detención de más de 100 pobladores kurdos, en una supuesta operación “antiterrorista” contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Las asociaciones pro-kurdas acusan al Ejecutivo de querer manipular los comicios.
La policía turca ha llevado a cabo detenciones simultáneas esta madrugada en 21 provincias del país, incluida Diyarbakir, en el sureste, capital del Kurdistán turco. Según el Colegio de Abogados de Diyarbakir, la escala de los arrestos no tiene precedente.
La asociación advirtió que “el total de detenciones podría llegar a 150”, incluyendo al menos “20 abogados, cinco periodistas, tres actores de teatro y un político”.
El presidente del Colegio de Abogados de Diyarbakir, Nahit Eren, también criticó que se trata de un “intento de intimidar a los electores kurdos” en vista de las reñidas elecciones del 14 de mayo. “No podemos decir que esta es una operación independiente desconectada de la agenda política del país. La operación parece ser una intimidación de los votantes kurdos”, dijo en declaraciones a la agencia France Press.
El gobierno turco reiteró la acusación que siempre utiliza para perseguir a sus opositores: los señaló como vinculados al PKK.
Desde el Partido Democrático de los Pueblos (HDP), denunciaron la intención del “régimen” de influenciar los resultados de los comicios, ya que entre los detenidos se hallan “abogados que podrían vigilar la seguridad electoral, periodistas independientes que pueden denunciar fraude electoral, directores de campaña del Partido de la Izquierda Verde, y propietarios de imprentas que colaboran con campañas electorales”.
El co-presidente adjunto del HDP, Tayyip Temel, declaró que “en vísperas de las elecciones, (Erdogan) volvió a aferrarse a las operaciones de detención por miedo a perder el poder. Por la mañana, decenas de nuestros amigos y amigas, entre ellos miembros del partido, periodistas, artistas y abogados, han sido detenidos en Amed… ¡No podrá evitar perder!”.
Por su parte, el vicepresidente del Colegio de Abogados de Diyarbakir, Mehdi Özdemir, expresó que “la operación continúa. Las detenciones continúan. Continúan los registros en los despachos de muchos de nuestros amigos y amigas abogadas. Hasta ahora, no se ha dado ninguna razón. Se trata de una operación dirigida contra distintos grupos. Hay artistas, políticos, representantes de la sociedad civil y abogados entre los detenidos las personas detenidas”.
En tanto, en la Asociación de Abogados por la Libertad (ÖHD) se afirmó que “como parte de una investigación llevada a cabo en Diyarbakır esta mañana, las casas de muchos de nuestros miembros han sido allanadas y nuestros miembros detenidos. Continúan los registros en el edificio de nuestra asociación”.
A esto, agregaron: “¡No nos callamos ante las operaciones políticas llevadas a cabo contra nuestra asociación y nuestros miembros durante el proceso electoral! Hemos sabido que también han sido detenidos periodistas, artistas, políticos y ciudadanos de la provincia de Urfa. ¡La defensa no se callará! Estaremos al lado de nuestros miembros, colegas y clientes”.
Las elecciones del 14 de mayo en Turquía podrían desbancar al presidente Erdogan del poder, donde lleva instalado dos décadas.
La oposición, encabezada por Kemal Kiliçdaroglu, se presenta en un frente único formado por seis partidos, y el apoyo, o no, del HDP -que es la tercera fuerza política del país y que le ha prometido su voto- será determinante para decidir el próximo presidente.
La figura principal y ex co-presidente del HDP, Selahattin Demirtas, está encarcelado desde 2016 acusado de “propaganda terrorista”. Además, el partido está bajo amenaza de cierre por Parte del Ejecutivo y el Poder Judicial.
FUENTE: La Vanguardia / ANF / Edición: Kurdistán América Latina
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