Mártires internacionalistas de la Revolución de Rojava: Emir Qubadi

Emir Qubadi, de Irán, fue uno de los que participaron en la lucha por la victoria en la ciudad de la resistencia de Kobane. Rojvan Kobane era su nombre de guerra. Qubadi nació en 1991 en la ciudad de Mashhad, en la provincia de Jorasán, al noreste de Irán. Posteriormente, se trasladó a Rusia. Cuando el líder kurdo Abdullah Öcalan, a quien describió como “el gran líder mundial”, dijo que “toda la humanidad debe defender Kobane”, decidió ir a la ciudad kurda. Partió de Rusia en octubre de 2014 y, cuando arribó a Rojava, dijo: “Me uno a las YPG (Unidades de Protección del Pueblo) para defender la dignidad de los pueblos de Kobane y del mundo. Aquí se está derramando la sangre de gente honorable”.

Participación en la lucha

Qubadi acudió a Kobane durante los ataques más intensos. Luchó junto a combatientes kurdos y árabes en las calles de la resistencia. Al principio, no hablaba el mismo idioma que sus camaradas, pero los impresionó con su postura, su firmeza y su moral. En poco tiempo, estableció relaciones francas con todos sus compañeros del frente y contribuyó a la vida colectiva. No tardó en dominar la lengua kurda. Estaba tan entregado a sus camaradas, que en un mes mejoró sus conocimientos lingüísticos para estrechar aún más las relaciones con ellos. Participó en la lucha con gran entusiasmo y esfuerzo, desafiando todas las dificultades.

Rescataba a sus camaradas heridos

Qubadi fue uno de los primeros combatientes de la lucha internacionalista que comenzó en Kobane. Fue el primer internacionalista persa que murió en las filas de la resistencia. Como iraní, no reconocía la persecución y la dictadura del régimen iraní, y fue a Kobane en un acto de protesta. Resistió en el espíritu de la lucha revolucionaria internacional. Tenía 23 años.

Qubadi fue martirizado el 22 de diciembre de 2014 mientras rescataba a sus compañeros heridos durante una operación militar para liberar el centro de cultura y arte del centro de Kobane. Antes de caer, había dicho: “Mi momento más feliz en la batalla de Kobane fue salvar a un compañero herido”. Estaba dispuesto a sacrificar su vida por sus camaradas.

Instó a todo el pueblo iraní a unirse a la lucha revolucionaria

En un vídeo que grabó mientras luchaba en las posiciones de la resistencia en Kobane, instó a todos los pueblos de Irán a unirse a la lucha revolucionaria kurda. Dijo que los kurdos y los persas son hermanos y hermanas, y tienen una historia común de 3.000 años. En una entrevista concedida a la Agencia de Noticias Fırat (ANF), el 18 de diciembre de 2014, cuatro días antes de ser martirizado, dijo: “No vinimos solo por la batalla. Vinimos por una ideología superior, una ideología que insiste en la humanidad. Estoy aquí hasta que Kobane sea liberada”.

Inspirado por la filosofía de Öcalan

Sus camaradas, junto a los que luchó en Kobane, lo describen de la siguiente manera: “Era un hombre con ideas sofisticadas y una fuerte perspectiva ideológica para la hermandad de los pueblos y la libertad de los pueblos de Oriente Medio. Fue un camarada que participó en la lucha en condiciones difíciles con gran entusiasmo y esfuerzo. Siempre estaba muy dispuesto a cumplir con sus deberes. Participó en esta resistencia por la libertad de todos los pueblos oprimidos y demostró una gran voluntad en poco tiempo. Leía los libros de Öcalan y trataba de aplicar sus ideas a la vida real. Era un buen seguidor de la filosofía de Öcalan al ofrecer una solución y voluntad en cualquier condición”.

FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina

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