El miembro del Consejo Ejecutivo de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK) Mustafa Karasu escribió un artículo para el diario Yeni Özgür política, en el que analiza la situación en Siria y las presiones de Turquía para seguir ocupando territorio.
“Ahora se está discutiendo cómo resolver el problema de Idlib en Siria -escribió Karasu-. Siria y Rusia se están preparando para la operación para eliminar a los mercenarios de Idlib; Turquía se opone a esta operación; está intentando posponer la operación y preparar a los mercenarios para la guerra”.
“Por lo tanto, apunta a tener más poder de negociación con Rusia y Siria. Sin dudas, el AKP definitivamente pondrá a los kurdos en la agenda nuevamente en las negociaciones. Porque la preocupación más fundamental del gobierno del AKP es que los kurdos ganen en Siria”, indicó el también comandante del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).
“La eliminación de los mercenarios en Alepo y su traslado a Idlib reveló lo que le sucedería en el futuro. En este sentido, Rusia neutralizará a estos mercenarios junto con Turquía o Turquía se enfrentará a Rusia y Siria”, apuntó.
Karasu señaló que “Turquía no quiere irse de Idlib sin obtener una posición influyente en la política de Siria”. Por el momento, sostuvo el miembro del KCK, “dejar a Idlib pondría a Turquía en una posición más débil”. De hecho, Karasu argumentó que “Turquía está en una posición débil con Rusia en este momento”. “Claramente Turquía en este momento está calculando cuál sería una mejor carta para jugar con Rusia, para no salir tan lastimado”, analizó en el artículo.
Para Karasu, ahora sobre la mesa hay hay varias propuestas, y una involucra negociaciones con Rusia sobre los kurdos. Pero “no son propuestas que Rusia pueda aceptar fácilmente -detalló-. Poner en práctica significaría cortar todas las relaciones entre los kurdos y Rusia y Siria. Esta dirección en las políticas de Rusia y Siria puede llevar al punto donde rompen las relaciones con los kurdos. Los kurdos podrían ser utilizados como una herramienta de chantaje contra Turquía. Esta sería una política muy sucia y fea. Eventualmente, una política tan sucia golpearía a aquellos que lo han usado. Si Rusia hiciera lo que hicieron en Afrin y en Sheba, esta política podría tener consecuencias que no esperaban. Si Rusia y Siria enfrentan a los kurdos con este tipo de enfoque, se convertirán en el lado perdedor”, aseveró Karasu.
A su vez, el mimebor del KCK agregó: “Por supuesto, solo estamos especulando. Como hemos dicho, esta vez no es fácil para Rusia entrar en una negociación tan sucia (…) También debemos enfatizar el hecho de que Idlib no es la solución a los problemas en Siria. Tirar a los mercenarios de Idlib no significa el fin de la guerra en Siria y la solución de los problemas en Siria”.
Los kurdos, manifestó Karasu, “son el poder más dinámico y organizado de Siria, y serán el factor determinante en el futuro de Siria junto con la población del norte. Desde este punto de vista, la situación política en Siria puede ser determinada por los compromisos democráticos que se hagan con los kurdos y el pueblo del norte de Siria.
Karasu finalizó expresando que si “Rusia y Siria quieren actuar conjuntamente con los kurdos con respecto a Idlib, entonces deben acercarse a los kurdos. La forma más precisa y concluyente de deshacerse de los mercenarios en Idlib y lograr la estabilidad y la paz en Siria es entrar en un compromiso democrático con los kurdos y la Federación Democrática del Norte de Siria”.
FUENTE: ANF / Traducción y edición: Kurdistán América Latina
