La autoproclamada República de Nagorno-Karabaj, conocida como Artsaj por los armenios, dejará de existir en enero de 2024, tras su derrota ante Azerbaiyán, anunció el jueves pasado Samvel Shahramanyan, líder de Artsaj.
Shahramanyan explicó que esta decisión se tomó como parte de un acuerdo entre Artsaj y las autoridades azerbaiyanas, que contó con la mediación del contingente de paz ruso. El acuerdo se centró principalmente en garantizar la seguridad y los intereses vitales del pueblo de Artsaj e incluyó disposiciones para el paso libre, voluntario y sin restricciones de los residentes, incluidos los militares armados, a través del corredor de Lachin.
Los armenios de Nagorno-Karabaj habían defendido el pequeño Estado autónomo durante tres décadas.
Se estima que 70.500 armenios habían huido de la región hasta el jueves después de que Azerbaiyán lanzara una ofensiva relámpago el 20 de septiembre. La ofensiva finalmente condujo al control de Azerbaiyán sobre Nagorno-Karabaj.
Para Azerbaiyán y su presidente, Ilham Aliyev, el resultado representa el restablecimiento exitoso de la soberanía sobre una región reconocida internacionalmente como parte de su territorio. Sin embargo, para los armenios significa una dolorosa derrota y una tragedia nacional.
El primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, acusó a Azerbaiyán de limpieza étnica y afirmó: “El análisis de la situación muestra que en los próximos días no quedarán armenios en Nagorno-Karabaj”.
Azerbaiyán ha negado estas acusaciones, afirmando que no está obligando a la gente a irse y prometiendo reintegrar pacíficamente la región de Karabaj garantizando al mismo tiempo los derechos cívicos de las personas de etnia armenia.
Sin embargo, los armenios de Karabaj siguen siendo escépticos ante estas garantías, dada la historia de violencia entre las dos partes, incluidas dos guerras desde la disolución de la Unión Soviética (URSS). Temiendo por su seguridad, muchos han huido en masa a través de Azerbaiyán por la carretera montañosa que conecta Karabaj con Armenia.
Nagorno-Karabaj está situado geográficamente dentro del territorio de Azerbaiyán; sin embargo, ha funcionado de forma autónoma durante décadas, manteniendo su propio gobierno.
El conflicto en Nagorno-Karabaj alcanzó un punto de inflexión después de la segunda guerra de Nagorno-Karabaj en 2020. En diciembre de 2022, Azerbaiyán impuso un bloqueo a la República de Artsaj, aislando a sus residentes armenios de las interacciones externas debido al cierre estratégico del corredor de Lachin.
Turquía, un firme partidario de Azerbaiyán durante todo el conflicto, ha seguido respaldando las acciones de Bakú en la región. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, enfatizó la postura de Turquía durante su discurso ante el 78º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) la semana pasada, afirmando que Karabaj pertenece legítimamente a Azerbaiyán y que no se aceptaría cualquier intento de imponer un estatus diferente.
FUENTE: Medya News / Traducción y edición: Kurdistán América Latina
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