Haji Karim, un carpintero de 77 años afincado en Erbil, la capital del Kurdistán iraquí (Bashur), todavía mantiene una práctica que heredó de su padre hace mucho tiempo, y protege una profesión oscurecida por los tiempos modernos.
A pesar de su vejez, Haji Karim continúa trabajando para garantizar el brillo duradero del tallado en madera en el famoso mercado Qaysary. Desde que tiene 25 años se dedica a este oficio y no piensa dejarlo.
En su pequeña tienda, Haji Karim recibe a muchos visitantes diarios que desean ver sus vibrantes obras. En su lugar de trabajo se exhiben muchos artículos para el hogar.
Haji Karim señaló que cada pieza que crea tiene una historia, y las cuenta a quienes visitan su tienda. “Amo mucho mi trabajo, y hasta el último aliento de mi vida, seguiré haciéndolo”, aseguró.
FUENTE: Hiwa Shilani / Kurdistan24 / Traducción y edición: Kurdistán América Latina