En Jinwar, la aldea de mujeres libres en Rojava, la vida sigue creciendo. Sobre la base de una organización comunal y sin patriarcado, construimos la libertad de las mujeres en una profunda conexión con las raíces de la tierra.
Casi todos los días, las mujeres de Jinwar hornean su propio pan tanto para la propia aldea como para los pueblos circundantes.
Según ellas, la vida cobra vida con el trabajo duro de una mujer y su amor.
Además, algunas de las mujeres practican la naturopatía y producen medicina a partir de hierbas y todo lo que la naturaleza tiene para ofrecer.
En el centro de salud Şifa Jin concurren todas las residentes como los pobladores de los alrededores.
FUENTE: Kongra Star Women’s Movement / Edición: Kurdistán América Latina