El gobierno de Alemania aún no ha encontrado una solución para sus ciudadanos capturados vivos en operaciones contra el Estados Islámico (ISIS) por parte de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG/YPJ) y las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS).
Los ciudadanos alemanes de ISIS se destacaron después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidiera a Berlín y otras administraciones europeas que “retiren a (sus) ciudadanos y los sometan a juicio”, ya que son un grupo numeroso.
Se estima que hay al menos 200 ciudadanos alemanes en poder de las YPG/YPJ, la mayoría mujeres y niños. El ministro del Interior, Horst Seehofer, dijo recientemente que están realizando esfuerzos meticulosos al respecto. En el programa “Bericht Aus Berlin”, de la televisión ARD, afirmó que el Estado alemán “necesita obtener información detallada sobre estas personas”.
Seehofer dio a entender que les preocupa que los miembros de ISIS arriesguen la seguridad nacional de Alemania después de regresar al país. “Debemos investigar a cada uno de ellos en detalle y saber qué hicieron mientras estaban en las filas de ISIS. De esa manera podemos ponerlos a prueba. De lo contrario, no podemos simplemente devolverlos. Porque estas personas han vivido bajo varios alias”, explicó.
El ministro indicó que está en contra de que los miembros de ISIS sean devueltos a Alemania en masa, pero varios expertos argumentan que la administración de Berlín no debe renunciar a esta responsabilidad.
Guido Steinberg, un experto en Medio Oriente de la Fundación de Ciencia y Política, señaló que “al igual que Alemania deportan terroristas extranjeros o criminales a Túnez, Libia o Rusia, deben recuperar a sus propios ciudadanos de otros países”.
El gobierno encabezado por Angela Merkel a menudo argumenta que “no pueden verificar la identidad de los miembros de ISIS capturados vivos”, pero eso no refleja la verdad. Los oficiales del servicio de inteligencia extranjero de Alemania (BND) han visitado las prisiones y los campos de refugiados en Rojava y el norte de Siria, donde los miembros de ISIS están detenidos y determinaron quién era ciudadano alemán y quién no.
En febrero, Trump dijo que “Estados Unidos quiere que el Reino Unido, Francia, Alemania y otros aliados europeos recuperen a los más de 800 combatientes de ISIS capturados en Siria para ser juzgados. No hay alternativa, ya que de lo contrario nos veríamos obligados a liberarlos”. Alemania y el Reino Unido respondieron negativamente a la demanda de Trump.
Algunos políticos y expertos alemanes propusieron una prisión similar a cárcel de Guantánmo que regentea Estados Unidos donde alojar a los integrantes de ISIS. Por su parte, Austria tomó medidas para que los miembros de ISIS en poder de las YPG/YPJ fueran juzgados en un tribunal internacional de crímenes de guerra. El ministro del Interior austriaco apeló a la Comisión de la Unión Europea (UE) para conformar el tribunal, pero la UE todavía no ha respondido a la demanda de Viena.
Más de 2.800 miembros de ISIS han sido capturados en las operaciones de las unidades especiales de las YPG/YPJ contra el ISIS en el norte de Siria. 800 de ellos son ciudadanos de 46 países diferentes. Solo Francia, Indonesia, Rusia, Marruecos y Sudán han solicitado oficialmente al autogobierno de Rojava el retorno de sus ciudadanos capturados vivos.
En tanto, el canciller francés Jean-Yves Le Drian declaró que están “investigando un mecanismo judicial internacional” para juzgar a miembros extranjeros de ISIS en poder de las FDS.
En declaraciones al diario Le Parisien, Le Drian confirmó que estudian la creación de “un mecanismo legal especial”, que podría inspirarse en los antiguos mecanismos internacionales a gran escala establecidos para Kosovo o el continente africano.
El ministro francés rechazó los paralelos con el tribunal de Nuremberg establecido para los juicios a los nazis después de 1945. “Esa sería una referencia histórica extremadamente pesada”, argumentó el funcionario.
La Administración Autónoma Siria del Norte y del Este ya había propuesto que se formara un tribunal internacional para juzgar a los mercenarios extremistas en la región.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina