El gobierno de Turquía destituyó a los co-alcaldes legítimos de los municipios Mardin, Amed y Van, en la región kurda del país.
El ministro del Interior turco informó que autoridades nacionales y fuerzas de seguridad fueron las encargadas de destituir al co-alcalde del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) en Amed, Selçuk Mızraklı; al co-alcalde de Mardin, Ahmet Türk; y a la co-alcaldesa de Van, Bedia Özgökçe Ertan.
Luego de esta intervención, las fuerzas de seguridad sitiaron los edificios de las tres municipalidades.
El co-alcalde Mızraklı declaró que no había recibido ninguna notificación sobre su destitución y expresó: “Nos enfrentamos a una situación ilegal. Nadie que viva en Turquía puede considerar que vive bajo el paraguas de la ley. Esta actitud contra los municipios del HDP debe verse como un ataque contra la oposición democrática. Lo que se usurpa es la voluntad de la gente”.
Luego de la intervención ilegal del gobierno del presidente Recep Tayyip Erdogan, el ministerio del Interior anunció el nombramiento de los gobernadores provinciales para el puesto de los alcaldes derrocados.
Mızraklı relató que “a las seis de esta mañana, la policía ha roto las puertas del ayuntamiento y entrado en el edificio. Estamos presenciando otra situación ilegal. Toda la sociedad ha entrado en una nueva fase en línea con los valores democráticos y legales. Desafortunadamente, ni la Constitución ni las elecciones están siendo respetadas”.
“Todo el mundo que viva en Turquía debe saber que nadie puede sentirse protegido por la ley. Es de la voluntad de la gente de lo que se han apoderado”, alertó Mızraklı.
Por su parte, la diputada del HDP Meral Danış Beştaş advirtió que el operativo ordenado por el gobierno es una nueva muestra la arbitrariedad del partido AKP, que lidera Erdogan.
Beştaş recordó que la voluntad popular se manifestó hace cinco meses en las elecciones en las que se eligió al HDP para dirigir los municipios. “El pueblo le dijo al AKP que se fueran. Además, inmediatamente después de las elecciones, el mundo entero pudo ver como la corrupción fue el factor dominante del gobierno de los fideicomisarios (interventores) durante el periodo anterior y que estos abusaron de los bienes públicos”.
“Necesitamos que todo el mundo respete la decisión del pueblo. No hay poder más grande que la voluntad popular. Todas las estructuras del partido están movilizadas. La decisión a tomar y la hoja de ruta a seguir serán detalladas lo antes posible”, señaló la diputada.
En tanto, la dirección del HDP expresó que “nuestro co-alcaldes, elegidos democráticamente con un 63 por ciento en Diyarbakır (Amed), un 56 por ciento en Mardin y un 53 por ciento en Van, han sido destituidos por el Ministro del Interior bajo una orden falsa e ilegal. La dura operación policial contra miembros de la Asamblea Municipal y las municipalidades sigue en marcha.
Desde el HDP denunciaron que las intervenciones son “un nuevo y evidente golpe político. También muestran una actitud abiertamente hostil contra la voluntad política del pueblo kurdo. El ministro del Interior es el detonante de la toma de derechos y libertades, de las provocaciones, decisiones y prácticas que no dejan la más mínima posibilidad de democracia”.
“Durante el periodo de los fideicomisarios, los recursos de todos los municipios, especialmente de las tres ciudades metropolitanas, fueron agotados quedando solo los escombros. El ministro del Interior y el gobierno han sido el foco de la corrupción y los robos a través de sus fideicomisarios, como puede verse en los informes del Tribunal”, manifestaron en el HDP.
Además, expresaron que el gobierno y el ministerio del Interior intentan cubrir los casos de “corrupción y las irregularidades del pasado periodo”, cuando se impusieron interventores. “A nivel local, la burocracia militar y civil apoyó este esquema de corrupción y a los fideicomisarios.
Hay poca legitimidad democrática en este gobierno. Hoy volvemos a ver la verdadera cara de la alianza del AKP-MHP: usurpación de la voluntad del pueblo, violencia estatal para evitar resultados electorales que no les gustan”, indicaron.
El HDP convocó “a todas las fuerzas democráticas, a todos los ciudadanos con conciencia, a todos los partidos de la oposición, las organizaciones de la sociedad civil, sindicatos y asociaciones democráticas, a unirse solidariamente contra un poder que se apodera de la voluntad de las urnas y las elecciones”.
“El uso de todos los medios legítimos y democráticos de lucha contra este poder es un derecho indiscutible que surge tanto del derecho constitucional como universal”, destacaron.
Desde el HDP explicaron que sólo podemos ganar democracia por medio del sentido común y la lucha determinante de las fuerzas democráticas”. Por eso, llamaron “a quienes, en todos los rincones de Turquía, votaron el 31 de marzo y el 23 de junio, para que perdiera la alianza del AKP-MHP. Hacemos un llamamiento a quienes trabajaron para ganar en democracia. Este no es solo el problema del HDP y el pueblo kurdo. Es un problema de todos los pueblos de Turquía, es el problema común de todas las fuerzas democráticas”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina