En el pueblo de Mealik, en la zona de Ayn Issa, en el norte de Siria, se están produciendo enfrentamientos entre los mercenarios respaldados por el Estado turco y las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS).
Fuentes en el terreno informaron que un gran número de mercenarios murieron en los enfrentamientos con las FDS, que comenzaron el lunes por la noche y duraron unas tres horas.
El Estado turco y sus grupos mercenarios aliados lanzaron un amplio ataque contra los pueblos de Ayn Issa, Xalidiye, Hoşan, Seyda, Mealik, así como contra el campamento de Ayn Issa alrededor de la 1 de la madrugada. Hasta ahora se sabe que ocho civiles resultaron heridos en el ataque y que muchos mercenarios fueron abatidos.
El domingo pasado, las agresiones de las fuerzas de ocupación turcas también se dirigieron contra, además de las inmediaciones de la autopista internacional M4. Durante esa jornada, los ataques con armamento pesado dejaron tres civiles gravemente heridos, incluido un niño de tres años. Los heridos son Mehmud Zêd Zêdan (tres años), Minhel Ehmed El Ebîd (22 años) y Mihêdin Hacî (35 años).
Los ataques cada vez más intensos contra Ayn Issa por parte de Turquía y sus tropas aliadas, conocidas como el “Ejército Nacional Sirio” (ENS), apuntan a una nueva guerra contra el norte de Siria.
Durante el último mes, los bombardeos contra aldeas y asentamientos han aumentado en intensidad desde Ayn Issa hasta Girê Spî (Tal Abyad). Las Fuerzas Democráticas de Siria frustraron varios intentos de los grupos mercenarios de infiltrarse en la región.
Los esfuerzos del Estado turco por ampliar la zona de ocupación ilegal en el norte de Siria están teniendo un efecto particularmente devastador en la vida de la población civil, que una vez más se ve obligada a huir y ahora teme de nuevos bombardeos arbitrarios, secuestros y ejecuciones sumarias cometidas por los yihadistas pro-turcos.
Frente a los intentos de invasión por parte de Turquía, desde las unidades de autodefensa de Ayn Aissa aseguraron que defenderán sus tierras junto al pueblo.
Semanas atrás, Hawar Şengal, miembro de una de las unidades de autodefensa, declaró que los pobladores tienen derecho a defenderse y que no guardarán silencio ante los ataques. “Todos nuestros amigos entrenados viven en esta región. Sus familias y parientes están aquí. Todos nuestros amigos son los hijos de esta tierra. Por tanto, la protección de este territorio es un derecho. Nos entrenamos para hacer frente al enemigo invasor y explotador, para mantenernos firmes y proteger a nuestra gente y nuestra tierra. Tenemos fe y esperanza”, aseguró.
Por su parte, Kemal Ehmed, otro miembro de las unidades de autodefensa, aseveró: “Estamos aquí para proteger a nuestro pueblo y expulsar al Estado turco invasor de nuestras tierras”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina