La portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Morgan Ortagus, criticó el miércoles a Turquía por suspender a los alcaldes kurdos de sus cargos en las ciudades de Diyarbakir (Amed), Van y Mardin.
“En general -dijo la funcionaria-, en cualquier parte del mundo siempre es preocupante cuando se ve la remoción de autoridades electas y luego su reemplazo por oficiales no electos”.
Ortagus añadió: “Es obviamente preocupante. Así que lo que esperamos es ver que Turquía resuelva este asunto de una manera que sea coherente con su compromiso con la democracia”.
Cuando se le preguntó si las nuevas negociaciones entre el gobierno turco y los kurdos podrían ser una mejor alternativa, Ortagus respondió: “Nosotros, por supuesto, siempre alentamos un enfoque amplio en el compromiso de Turquía con las comunidades kurdas”.
En medio de las fuertes protestas en el Kurdistán turco en contra de las medidas adoptadas por el gobierno del presidente Recep Tayyip Erdogan, desde diferentes partes del mundo se pronunciaron organizaciones y personalidades, que rechazaron las políticas represivas del Estado turco.
Ayer, el líder del Partido Laborista de Gran Bretaña, Jeremy Corbyn, rechazó la represión desatada por el gobierno turco contra los alcaldes, diputados y seguidores del Partido Democrático del Pueblo (HDP).
En su cuenta de Twitter, Corbyn escribió: “El arresto de líderes políticos y activistas del Partido Popular Democrático -HDP- es inaceptable”.
Seguido a esto, el dirigente laborista expresó: “Turquía debe respetar los derechos humanos, el estado de derecho y no socavar su democracia”.
Por su parte, este jueves se conoció que cuatro organizaciones asirio-siríacas en Suecia emitieron un comunicado conjunto condenando los ataques del Estado turco contra los kurdos y la usurpación de sus municipalidades.
En la declaración, expresaron que “está claro que el Estado de Turquía busca con estas prácticas arbitrarias silenciar a las fuerzas democráticas y ataca a las minorías que luchan por sus derechos”.
Las organizaciones aseguraron que las represalias contra las fuerzas democráticas y la negación de las minorías no-turcas está en conflicto con los principios fundamentales del estado de derecho. “Como tal, condenamos la expulsión de los representantes electos y los arrestos”, apuntaron.
El comunicado está firmado por la Organización Democrática Asiria de Suecia (ADO), el Partido por la Libertad de Mesopotamia (GHM), el Congreso Popular de Mesopotamia y la Asociación de Solidaridad con Mesopotamia.
En tanto, el movimiento kurdo juvenil Komalen Ciwan denunciaron que “el fascismo no es ya el problema de los pueblos del Kurdistán, ahora es el problema de todos los pueblos de Turquía”.
En un comunicado, alertaron sobre la “profunda animosidad” del gobierno turco “contra el pueblo kurdo”. “El nombramiento de fideicomisarios (interventores) que no tienen conexión alguna con el Kurdistán es una reminiscencia de la Edad Media. Quieren mantener su autoridad central a través de estos gobernadores ocupantes, pero los pueblos del Kurdistán no los reconocerán”.
Desde Komalen Ciwan expresaron que “los jóvenes, las mujeres y todos han de resistir estos ataques de invasión de la manera más radical. Nosotros, como jóvenes, no nos preocupamos solo por unos pocos municipios secuestrados por el fascismo. Incluso sin municipios, nuestra gente puede continuar con su vida. Pueden gobernarse a sí mismos. Pero los municipios son un símbolo para la gente. Son la voluntad de nuestros pueblos. La voluntad de los pueblos se manifiesta en estos municipios. Nosotros, como el Movimiento Juvenil del Kurdistán, hacemos un llamamiento a todo el mundo para defender la voluntad de nuestros pueblos”.
A su vez, advirtieron que “el silencio contra este golpe que comenzó en el Kurdistán significa su aprobación” y el respaldo a “los golpes de Estado que se implementan en Turquía”. “Todas las organizaciones juveniles y de mujeres deben pronunciarse en contra del golpe de Estado dondequiera que se encuentren y actuar allí donde estén -indicaron-. Cualquiera que sea el punto de vista político que tengan, las organizaciones juveniles deben adoptar una postura común contra las prácticas fascistas. Es una necesidad de toda organización socialista, de toda organización antifascista. No hablar contra el fascismo fortalece al fascismo. El fascismo se fortalece a medida que los reflejos de la sociedad se debilitan. El fascismo ataca más ante el silencio. Un golpe contra el fascismo del AKP-MHP solo llegar de la juventud organizada y unida”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina