El gobierno de Estados Unidos ofreció el martes pasado una recompensa a cambio de información sobre tres líderes históricos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), organización a la que Washington y Ankara consideran terrorista.
De esta manera, la administración de Donald Trump ha dado luz verde a una recompensa de cinco millones de dólares por información que “pueda llevar a la identificación o localización” de Murat Karayilan, hasta cuatro millones por la de Cemil Bayik y otros tres millones por la de Duran Kalkan, todos ellos comandantes de la organización, que además participaron en su fundación en 1978 en el Kurdistán turco.
La decisión de Washington fue anunciada por la embajada de Estados Unidos en Ankara, y podría suponer un incremento de las relaciones entre el gobierno estadounidense y Turquía, su aliado dentro de la OTAN.
Ante este anunció, la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK) emitió un comunicado en el que advirtieron que la orden emitida por Estados Unidos está basada en “excusas sin fundamento”.
“Este enfoque hostil contra nuestro Movimiento por la Libertad y las decisiones que se tomaron, no tienen justificación ni política, en la sociedad, la ética, la conciencia o la ley universal”, expresó la organización principal del Movimiento de Liberación de Kurdistán (MLK).
Para el KCK, la decisión de Washington es “completamente ideológica y política”, que tiene como objetivo atacar a “todos los kurdos que luchan por la libertad y la democracia”.
En la declaración también se denunció a los estados que “implementan el genocidio” contra el pueblo kurdo y mantienen en prisión al líder kurdo Abdullah Öcalan. A su vez, se expresó que con medidas de este tipo se intenta “disolver” al MLK.
Para el KCK, las medidas tomadas por Estados Unidos son la continuidad del “complot” contra Öcalan, puesto en marcha en 1998 y que finalizó con su encarcelamiento en la isla-prisión de Imrali, en Turquía, el 15 de febrero de 1999.
“Existe una conexión directa entre esta decisión y la conspiración de 1999, frustrada en su mayor parte por el gran poder del pensamiento de Öcalan y nuestra lucha por la libertad, liderada por el PKK”, estimaron desde el KCK.
En el comunicado también se analizó que la lucha del pueblo kurdo tiene un profundo efecto en Medio Oriente y abrió “un nuevo horizonte para los pueblos del mundo en su lucha por la libertad y la democracia”.
El KCK apuntó que la propuesta realizada por Öcalan sobre la construcción de una nación democrática, basada en el confederalismo democrático, es una “alternativa al Estado” que permite “la solución de problemas políticos, sociales y económicos”.
Frente al avance del pueblo kurdo en Medio Oriente, que en los últimos años ha conquistado derechos y organizado a la sociedad en libertad y democrática, el KCK advirtió que la decisión estadounidense “constituye un ataque hostil” e “inmoral” contra los kurdos.
“La lucha de los kurdos por la libertad se desarrolla en todas partes y han estado muy cerca de lograr una vida libre y democrática. Este complot contra el PKK significa apoyar la hegemonía de las potencias colonialistas genocidas sobre los kurdos, mediante el rechazo de nuestro movimiento por la libertad”, alertó el KCK.
La organización además recordó que en los últimos 40 años, “el PKK ha tenido un papel determinante” y que “es imposible hacer un análisis sin considerar el papel del PKK en todos los desarrollos nacionales, políticos y sociales en todas las partes del Kurdistán”.
En el comunicado se remarcó que el PKK evitó que el Estado Islámico (ISIS) cometiera un genocidio en Shengal, en el norte de Irak, contra el pueblo yezidí, que tiene unas de las fe y la cultura más antiguas de la humanidad.
A su vez, se recordó que los guerrilleros y las guerrilleras del PKK, que forman parte de las organizaciones HPG y YJA Star, impidieron que ISIS ingresara en Hewler, Kirkuk y Sulaymaniyah, en el Kurdistán iraquí.
En tanto, se destacó que las HPG-YJA Star lucharon valientemente junto a los combatientes de las YPG/YPJ, las milicias kurdas en el norte de Siria, “que tuvieron un gran papel en la victoria de la resistencia de Kobanê, apoyada por todos los pueblos del mundo y las fuerzas de la democracia”.
El KCK dijo que los milicianos y las milicianas de las YPG/YPJ luchan bajo las ideas y propuestas de Öcalan, y fueron recibidos por el gobierno de Francia y hasta por funcionarios de Estados Unidos.
“A lo largo de estos años, aquellos cuya relación con ISIS fue más cuestionada y discutida han sido Recep Tayyip Erdogan y su gobierno”, estimaron. Desde el KCK agregaron que al ofrecer recompensas por los líderes del PKK, Estados Unidos “apoya las políticas anti-kurdas y anti-democracia de Erdogan”. “A los que luchan contra ISIS se los intenta disolver y los que tienen una relación con ISIS están siendo recompensados”, remarcaron desde el KCK.
Para el KCK, los pueblos del mundo y las fuerzas democráticas tienen en claro la lucha por la libertad encabezada por Abdullah Öcalan y el PKK. “Estados Unidos no pueden anular esta realidad con motivos ideológicos y políticos y excusas injustificadas. La administración de Estados Unidos no puede hacer que el pueblo estadounidense, de quien obtienen su legitimidad, crea estas mentiras. Este enfoque y decisión de Estados Unidos se ha tomado sobre intereses políticos y financieros, y los ha convertido en cómplices de las potencias genocidas y colonialistas”, denunciaron desde el KCK.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina