El Congreso Nacional de Kurdistán (KNK) organizó el 14 de mayo pasado el Encuentro de Diálogo Árabe-Kurdo en Bruselas, Bélgica, con la participación de políticos, académicos, intelectuales, escritores, periodistas y defensores de los derechos humanos de Medio Oriente y el Norte de África. Los y las participantes llegaron a la capital belga desde Siria, Irak, Sudán, Marruecos, Sahara Occidental, Rojava (norte de Siria) y Bakur (norte de Irak).
En la reunión, se debatió sobre la crisis mundial, su reflejo en la región, la situación de los países en Medio Oriente y el norte de África, las políticas de los estados occidentales en la zona y las políticas expansionistas de Turquía e Irán.
Los y las participantes llamaron la atención sobre el hecho de que las sociedades de Medio Oriente y África sufren prácticas antidemocráticas, represión, atrocidades y hambre a causa de las políticas de los estados hegemónicos.
También se llamó la atención sobre los ataques de ocupación de Turquía contra el noreste de Siria y el sur del Kurdistán, y el deseo de Turquía de ocupar todo Medio Oriente con ambiciones otomanas.
Además, se hizo hincapié en el hecho de que el cambio demográfico ejecutado por Turquía en Afrin, Girê Spî y Serêkaniye constituye un genocidio y un crimen contra la humanidad, y que los pueblos de Medio Oriente y África se encuentran bajo la amenaza de un nuevo genocidio impulsado por Ankara.
El último tema abordado en la reunión se centró en las políticas de los estados hegemónicos y regionales, y en las formas de crear una base común para una solución a la crisis que se agrava, y de establecer mecanismos de acción conjunta.
Acordando que la solución podría alcanzarse a través de una democracia orientada a la sociedad, los y las participantes debatieron la democratización del individuo y la sociedad, y la cuestión de la mujer.
Los y las asistentes señalaron que sólo se puede hacer frente a los regímenes dictatoriales del statu quo con una lucha por la democracia orientada a la sociedad y el proyecto de nación democrática.
En tanto, señalaron que la lucha conjunta basada en la perspectiva de la nación democrática es la única solución al nacionalismo, el fundamentalismo y el sectarismo que impulsan las potencias dominantes para dividir a los pueblos.
En el debate se señaló el hecho de que, además de los árabes y los kurdos que pueblan densamente la región, los asirios, sirios, durzis, turcomanos, chechenos y otros pueblos comparten el mismo destino y los mismos desafíos.
Por lo tanto, una alianza que se forme entre los pueblos árabe y kurdo, en primer lugar, sería el paso más importante para una unidad de los pueblos de la región, subrayaron los y las participantes.
Como ejemplo, se nombró a la alianza kurdo-árabe, impulsada estratégicamente por el Movimiento por la Libertad de Kurdistán, y que alcanzó un nivel importante en el noreste de Siria.
En la declaración final de la reunión se expresó: “Consideramos esta reunión como un primer paso para establecer los problemas y hacerlos visibles, y establecer una lucha conjunta y plataformas de acción. Las discusiones mantenidas en la reunión revelaron una perspectiva de hoja de ruta para el trabajo a seguir. Se acordó continuar y ampliar las reuniones de diálogo árabe-kurdo con la más amplia participación y actitud flexible”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
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