Dengbêj, el género musical tradicional kurdo para contar historias mediante el canto, es uno de los elementos más importantes de la resistencia cultural en Kurdistán para detener las políticas de asimilación y negación, por un lado, y también un método vívido de recordar la historia kurda y que no sea olvidada.
Aunque las fuentes suelen incluir principalmente los nombres de los dengbêjs masculinos, las mujeres son algunas de las guardianas más importantes de esta cultura. En la actualidad, Helin Kılıçarslan continúa la tradición del dengbêj. Helin también es instructora en Ma Music en Diyarbakır (Amed), y le contó a la Agencia de Noticias Mesopotamia (MA) cómo comenzó su viaje musical.
“La música siempre ha estado en mi vida desde que era pequeña”, recuerda.
“Cuando fuimos a Estambul, mi padre me llevó al Centro Cultural Mesopotámico (MKM), donde comencé a aprender baglama (un instrumento de cuerda pequeño pero de cuello largo con algunas similitudes con una mandolina)”.
Helin quedó muy impresionada por la dengbêj Gazin, una famosa mujer que interpreta historias sobre la opresión que los kurdos han experimentado a lo largo de la historia.
“Ella mencionó nuestra aldea, que fue incendiada por el Estado (turco), y me impresionó mucho su estilo”, cuenta Helin, que participa del grupo musical Jin Ma.
“Hacemos nuestros propios arreglos y cantamos nuestras propias canciones”, afirma, y agrega que los músicos jóvenes deben escuchar y cantar las versiones originales de las canciones para reconocer su cultura.
FUENTE: MA / Medya News / Traducción y edición: Kurdistán América Latina
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