El Consejo Militar de Manbij (CMM) emitió un comunicado llamando la atención sobre las amenazas del Estado turco contra la ciudad, ubicada en el norte de Siria y liberada junto a las Unidades de Protección del Pueblo (YPG) hace dos años, luego de derrotar al Estados Islámico (ISIS).
La postura del CMM se conoció días después de que Washington y Ankara sellaran un acuerdo para “liberar” Manbij de fuerzas kurdas, en un nuevo plan para desplazar a la población y reemplazarla por personas de otros lugares, como ocurre actualmente en la región de Afrin.
En la declaración se explicó que el 1 de junio de 2016 el CMM lanzó una campaña militar contra ISIS para liberar la ciudad y las aldeas a su alrededor, para lo cual solicitaron apoyo a las YPG y a la Coalición Internacional, encabezada por Estados Unidos.
“Sobre esta base, celebramos una reunión en la base de İncirlik, en Turquía, a la cual acudieron representantes de Turquía y Estados Unidos, así como una delegación del Consejo Militar de Manbij que incluía al comandante Adnan Abu Amjad, ahora mártir”, se recordó en el texto.
“La batalla de Manbij fue discutida durante la reunión y un acuerdo fue alcanzado con la participación de Turquía. La campaña militar fue por tanto lanzada y duró más de dos meses. Como consecuencia de ella, el Consejo Militar de Manbij y las YPG, con el apoyo de la Coalición Internacional, liberaron la ciudad el 15 de agosto de 2016. Después de que la zona fuese asegurada miles de residentes volvieron”, señaló el CMM.
Según lo difundido en el comunicado, el 16 de noviembre de 2016, el CMM asumió la administración militar y la seguridad de Manbij. “Durante este proceso, las YPG anunciaron que se retirarían de la ciudad en una declaración oficial. En este sentido se produjo la consecuente ceremonia militar”, indicaron.
“El Consejo Militar de Manbij continuó con sus esfuerzos para defender la ciudad y su organización administrativa –se aseveró en la declaración-. Sobre esta base, un grupo de las YPG se quedó en Manbij para ayudar en cuestiones de entrenamiento militar a petición nuestra. Se trataba de un grupo asesor para el Consejo Militar de Manbij sobre cuestiones relacionadas con el entrenamiento militar. Este trabajo fue hecho en coordinación y con el conocimiento de la Coalición Internacional. Hoy, después de casi dos años, el CMM es capaz de desarrollar estas tareas de entrenamiento y defensa por sí mismo. Por lo tanto, en estos momentos se ha alcanzado un nuevo acuerdo que contempla la retirada del grupo de asesores de las YPG de Manbij”.
El CMM agradeció a las YPG por su apoyo y asesoría militar, como también a la Coalición Internacional, ya que “la resistencia de todas las partes en la liberación de nuestra ciudad del ISIS ha sido muy valiosa”.
“Como CMM, afirmamos que podemos asegurar Manbij y su frontera, también contra peligros externos y amenazas. Queremos recordarle esto al Estado turco que está desestabilizando la paz en la región con las políticas que implementa y trata de poner en práctica. El Estado turco impone sus políticas sobre el pueblo y quiere desestabilizar el Norte de Siria en general. En Jarablus, Al Bab, Azaz y Afrin están teniendo lugar conflictos, secuestros, arrestos y en general una situación de inseguridad y conflicto. El establecimiento de un ambiente seguro en el que los miles de desplazados puedan vivir y volver a las aldeas de Manbij es beneficioso para Turquía”, aseguró el CMM.
En la declaración se describió que “el crecimiento del número de refugiados desplazados por los conflictos que producen los grupos armados apoyados por Turquía en Jarablus y Al Bab, se ha convertido en una carga para nosotros. Además, los intentos por cambiar la demografía de Afrin y Al Bab continúan y la situación ha sido documentada por la propia ONU”.
En tanto, se explicó que “esto es indicativo del final del régimen del partido gobernante en Turquía que trata de eliminar la paz y cambiar la demografía en la región. Por ello, docenas de grupos mercenarios afiliados al Estado turco han bloqueado carreteras e imponen impuestos ilegítimos sobre el pueblo. Secuestran a niños, mujeres y jóvenes y tratan de asolar la región. No permiten que la población civil vuelva a sus aldeas y tierras. El Estado turco no ha traído más que destrucción a la región. Esta situación ha sido demostrada y documentada por la realidad que se vive en Al Bab, Jarablus, Azaz y Afrin diariamente, dejando claro la situación de conflictividad que vive la región”.
Por último, el CMM manifestó que “a pesar de todas las amenazas a las que nos enfrentamos, Manbij está llevando una vida en paz y segura desde que fue liberada”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina