Un tribunal en Turquía condenó el miércoles 17 de julio a nueve personas por el asesinato del periodista de origen armenio Hrant Dink, ocurrido en 2007. Erhan Tuncel fue condenado a 99 años y 6 meses, Yasin Hayal a siete años y 6 meses y Ogyun Samast, sospechoso de asesinar a Dink (anteriormente condenado a 22 años y 10 meses, fue sentenciado a dos años más y 6 meses por unirse a un grupo armado). Otros seis sospechosos también recibieron penas de prisión.
“Los condenados por el caso de Hrant Dink son los líderes de su asesinato. Como amigos de Hrant, desde hace ya 12 años pedimos que sean castigados quienes pidieron su muerte. Pero están siendo defendidos desde hace 12 años”, opinó el diputado de origen armenio Garo Paylan al conocerse el veredicto.
Hrant Dink era editor del periódico bilingüe Agos, desde donde denunciaba, entre otras cosas, la situación de las minorías en Turquía y criticaba la política estatal de negacionismo del Genocidio Armenio.
Durante su vida, sufrió el hostigamiento estatal y fue procesado por el artículo 301 del Código Penal turco, todavía vigente, usado para perseguir a quienes “denigren la identidad turca”. La persecución de Dink por parte de las autoridades de Turquía fueron las que generaron las condiciones para que el 19 de enero de 2007 Dink fuera asesinado por Ogün Samast, un joven de 17 años, en Estambul, a la salida de su periódico.
El 25 de julio de 2011, Samast fue condenado a 22 años y 10 meses de prisión por asesinato premeditado y posesión ilegal de un arma de fuego por el Tribunal Penal Juvenil de Estambul. El ultranacionalista Yasin Hayal, por su parte, fue condenado a cadena perpetua por haber ordenado el asesinato.
En julio de 2014, el Tribunal Supremo de Turquía dictaminó que no se había investigado correctamente su asesinato, lo que allanó el camino para nuevos juicios a policías y otras autoridades públicas. En enero de 2017, Ali Fuat Yılmazer, ex jefe de la división de inteligencia policial de Turquía, declaró que el homicidio no se había prevenido “deliberadamente” y que las autoridades de seguridad en Estambul y Trabzon eran responsables.
Al funeral de Dink asistieron miles de personas bajo la consigna “todos somos armenios, todos somos Hrant Dink”, algo inédito hasta el momento en la sociedad turca. El periodista e historiador argentino Osvaldo Bayer bautizó a Dink como “el Rodolfo Walsh armenio”.
FUENTE: Diario Armenia