El cantón Cizîre (Jazira, en el norte de Siria) estuvo densamente arbolado en la antigüedad. Sin embargo, a partir de la construcción del ferrocarril de Konya a Bagdad, se han ido quemando más y más árboles. Hoy en día, el cantón se dedica principalmente a cultivar la tierra. Sólo son visibles algunos ejemplares solitarios de árboles. Bajo el régimen sirio era ilegal plantar árboles, por lo que no había reforestación. Por ello, el nivel del agua subterránea disminuye constantemente.
“El Estado ni siquiera te permitía arreglar tu propio tejado, siempre tenías que pagar una gran cantidad de dinero. En la década de 1970, toda la tierra fue entregada a los árabes. Todo lo que podías hacer era trabajar como asalariado en tu propia tierra. Por eso mucha gente dejó Rojava para ir a Damasco”, nos cuenta Cemal, que trabaja en el vivero Roj cerca de Dêrik.
“Este vivero fue fundado inmediatamente después de la revolución”, explica. Muestra los árboles que cultivan en el lugar. Hay principalmente olivos, granados, higueras, avellanas y muchos árboles frutales diferentes, así como cipreses.
“Los árboles que cultivamos aquí son especímenes que nacen de forma natural en este área. Muchos viveros comerciales cultivan muchas plantas, lo que es hermoso, pero no es compatible con las condiciones climáticas locales”, explica Cemal. “Nuestro objetivo es hacer que la región vuelva a ser habitable y verde. Producimos de manera muy favorable, porque no nos preocupamos por el beneficio”, agrega.
Desde el principio, toda la familia de Cemal se sumó a la revolución.
“No puedes quedarte en casa sin hacer nada si otros sangran por tu país. Mi hermano mayor ya se unió a la guerrilla en 1988. Cayó en 1994 en Zagros. Su nombre era Sadun Çira. Toda mi familia apoyó la revolución desde el principio. Mis hermanas trabajaban en consejos y estructuras comunales. Nadie salió del país”, explica con orgullo.
Cemal se unió a las YPG (Unidades de Protección del Pueblo) cuando comenzó la revolución y fue gravemente herido en la batalla contra el Frente Al-Nusra. “Así que mis amigos me enviaron aquí, a la guardería”, dice.
Ahora explica a los activistas de Make Rojava Green Again cómo preparar y plantar los esquejes de olivos. También estos árboles ayudarán a que Rojava vuelva a ser verde.
FUENTE: Rojava Azadi Madrid