El Centro Cultural Tierra Violeta, ubicado en el centro de la ciudad de Buenos Aires, quedó demasiado pequeño para las más de cien mujeres y hombres que el martes por la tarde se acercaron para conocer las vidas de las militantes kurdas Sakine Cansiz (Sara), Fidan Dogan (Rojbin) y Leyla Saylemez (Ronahi), asesinadas en París en 2013, en un hecho considerado como un crimen político por el Movimiento de Liberación de Kurdistán.
La actividad para denunciar estos asesinatos estuvo enmarcada en la audiencia del Tribunal Ético Feminista de Juicio a la Justicia Patriarcal, impulsado en Argentina por diferentes organizaciones de mujeres y feministas.
Las historias de Sara, Rojbin y Ronahi fueron relatadas en un documental, que además reveló en detalle sus asesinatos, la responsabilidad de los servicios de inteligencia turcos y la complicidad del Estado francés para que todavía hoy se mantengan impunes.
Seguido a esto, Melike Yasar, representante en América Latina del Movimiento de Mujeres de Kurdistán (MMK), explicó que Sara, Rojbin y Ronahi formaban parte de la “vanguardia de Kurdistán”. Yasar explicó que un día antes de la masiva marcha de este año para pedir justicia por las militantes kurdas, el actual presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, llegó a Francia para firmar acuerdos para la venta de armas y sellar la impunidad de esos crímenes políticos. Desde los asesinatos de las tres militantes, “el pueblo kurdo nunca dejó las calles”, aseguró Yasar.
Por estos días, en toda Europa y en Kurdistán se realizaron movilizaciones y actividades para reclamar justicia por Sara, Rojbin y Ronahi, en una nueva demostración de fuerza del movimiento kurdo a nivel mundial.
A través de una videoconferencia, también habló Nursel Kilic, del Movimiento de Mujeres de Kurdistán, que envío un fuerte saludo a quienes estaban presentes en la actividad. Kilic agradeció en especial la presencia de Nora Cortiñas, integrante de Madres de Plaza de Mayo -Línea Fundadora-.
“Las compañeras fueron asesinadas por cuestiones políticas”, expresó Kilic, que agregó que la lucha de Sakine Canzis, una de las fundadoras del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), “nos permitió contactarnos con las compañeras de Europa y América Latina”. Para Kilic, la sostenida militancia que desarrolló Canzis abrió una “perspectiva política” para las mujeres de Kurdistán y “trazó muchas luchas, sobre todo contra los femicidios”. Además, señaló que la fundadora del PKK fue la principal cuestionadora del sistema patriarcal. “Fue asesinada no sólo por ser kurda, sino por luchar contra el imperialismo y el patriarcado”, afirmó Kilic. “Sakine era una referente de la resistencia kurda que luchó durante diez años contra las torturas cuando estuvo presa en la cárcel de Diyarbakir. Su referencia y resistencia permitieron la lucha popular”, manifestó la integrante del MMK.
A su vez, Fidan Dogan “era un símbolo que llevaba la lucha kurda a todos los ámbitos de Europa” y Leyla Saylemez “fue la representante de una nueva generación y al asesinarla quisieron matar el futuro de la lucha por Kurdistán”, detalló Kilic.
Por su parte, Nora Cortiñas recordó su viaje a Kurdistán y el encuentro con las Madres de los Sábados. También se refirió al documental “Pañuelos para la historia”, realizado por Alejandro Haddad y Nicolás Valentini, con quienes viajó a Diyarbakir y conoció de cerca la historia y resistencia del pueblo kurdo. “Conocí que el dolor de las madres de Kurdistán era nuestro dolor”, resumió Nora. “Aunque no hablábamos el mismo idioma, por los gestos y expresiones nos dábamos cuenta lo que estábamos diciendo”, expresó Cortiñas. “Los kurdos tienen que vencer, conseguir su patria, su independencia y libertad, y lo van a lograr”, aseveró. Luego le pidió a la periodista Liliana Daunes que leyera dos poemas escritos por Alejandro Haddad, de su libro “Gulê Gulîstan”.
Antes de cerrar el acto, también hablaron la legisladora de la ciudad de Buenos Aires, Laura Marrone, que denunció la situación de explotación que sufren las trabajadoras y los trabajadores en Turquía; la médica psiquiátrica Lucila Edelman, que criticó la represión del Estado turco contra el pueblo kurdo; Claudia Korol, integrante de Feministas de Abya Yala, que denunció la persecución contra el Movimiento de Mujeres de Kurdistán; Laura Zuñiga Cáceres, hija de la lidereza hondureña Berta Cáceres, quien recordó que el asesinato de su madre y de las tres militantes kurdas tienen el mismo trasfondo político. También hablaron y participaron Diana Kordon, del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia; Diana Maffia, directora de Tierra Violeta y académica feminista; Beverly Keen, del Servicio Paz y Justicia; Gabriela Vargas de la Asociación de Ex Detenidos y Detenidas y de Memoria, Verdad y Justicia; Celina Rodríguez, del Frente Popular Darío Santillán -Corriente Nacional-, además de representantes de organizaciones política y feministas en Argentina, Colombia y México.
FUENTE: Leandro Albani/Kurdistán América Latina