En la jornada de ayer, durante el segundo día de la 36ª Sesión de Derechos Humanos del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU), representantes de diferentes países denunciaron las violaciones a los derechos humanos cometidas por el Estado turco contra sus pobladores.
La sesión de la ONU se da en el marco de los debates sobre el informe anual de derechos humanos presentado el lunes por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein.
El representante de Reino Unido en la sesión remarcó la existencia en Turquía de una fuerte opresión gubernamental que va en aumento, particularmente recortando las libertades de pensamiento y expresión. Al mismo tiempo, el funcionario llamó al gobierno turco a poner poner fin con urgencia al estado de emergencia que rige en el país y que le permite al Ejecutivo cometer violaciones a los derechos básicos de los ciudadanos y las ciudadanas.
En tanto, el representante de Islandia subrayó que en Turquía faltan medios de comunicación independientes en Turquía. Esto se debe a las presiones por parte del gobierno, señaló. A su vez, alertó que el Poder Judicial ha perdido su neutralidad, también por las presiones gubernamentales.
La representación de Islandia además demandó al Estado turco que comience a respetar el estado de derecho de forma inmediata y exigió la indemnización de los daños sufridos por los individuos, bajo el disfraz de la lucha antiterrorista.
Por su parte, el representante de Australia criticó al gobierno turco, encabezado por el partido AKP, por sostener prácticas antidemocráticas. “Nos enfrentamos a un régimen opresivo en Turquía”, remarcó el funcionario. Además, advirtió sobre los ataques contra la sociedad civil y la prensa bajo el disfraz de esfuerzos antiterroristas, situación que calificó como inaceptable.
En el caso de Armenia, su representante en la ONU declaró: “Estamos muy preocupados por el nivel de las violaciones de los derechos humanos en Turquía”. El funcionario armenio demandó a las potencias internacionales que prevengan “las violaciones a los derechos humanos a gran escala por parte de algunos países de la región”.
Luego de las palabras de los funcionarios, diversas ONG internacionales se pronunciaron durante la sesión. Alertaron que una parte significativa de la población, los periodistas y defensores de los derechos humanos en particular, están enfrentando una inmensa presión en Turquía. A esta denuncia agregaron que el gobierno debe poner fin a las prácticas antidemocráticas que han implementado durante mucho tiempo. A su vez, afirmaron que las leyes de seguridad no pueden ser motivo para negar derechos humanos fundamentales y pidieron a Turquía que respete el derecho internacional.
FUENTE: ANF/Edición: Kurdistán América Latina