Los desplazados, que huyen de las prácticas del Ejército turco, dijeron que esa fuerza ocupa la ciudad de Jarablus, donde izaron la bandera turca.
El Cantón de Afrin, en el norte de Siria (Rojava), es testigo de otra oleada de desplazados provenientes de la zona de Shahba, al igual que del pueblo de Ka‘eba, Jarablus y Bab, que huyen de los mercenarios de ISIS y del Ejército turco.
Unas 2.500 personas han sido desplazadas en los últimos días, a los que se suman pobladores de las ciudades de Deir al-Zor y Raqqa.
Los desplazados confirmaron que mercenarios ISIS convirtieron sus vidas en un infierno, denunciando que no pueden salir de sus casas por temor al abuso de sus familias o una matanza.
Los desplazados que huyen de la ciudad de Jarablus dijeron a ANHA que el ejército turco presiona a los residentes para que huyan de la localidad.
En este contexto, Aydin Judi miembro de las fuerzas Asayish, indicó que cuando los desplazados llegan a Afrin “nosotros damos dinero a quien no tenga y llevamos a todas las familias a donde quieren”.
FUENTE: ANHA/Edición: Kurdistán América Latina
