La internacionalista de las Unidades de Protección de las Mujeres (YPJ) Berçem Slava habló con la agencia de noticias ANF sobre su experiencia en Rojava. “Me llamo Berçem Slava, soy de la parte oriental de Europa. Como jóvenes que vivimos bajo el capitalismo, bajo el Estado-nación de Europa, nos dimos cuenta de cómo este sistema es opresivo”, aseguró.
Slava señaló que fue durante la guerra en la ciudad de Kobanê cuando “oímos hablar por primera vez de la resistencia que tuvo lugar y de la revolución, del nuevo sistema que estaba empezando a construirse aquí, de la forma en que se organiza la sociedad aquí”.
“Para nosotras, esto fue algo realmente interesante porque también nos dimos cuenta de lo mucho que nos oprime el Estado, así que fue algo sobre lo que empezamos a investigar –explicó-. Y más tarde, descubrimos que las mujeres también tenían un lugar importante aquí. Vemos esto como un lugar en el mundo donde la gente empezó a organizarse sin un Estado y donde la gente toma su sociedad, su vida, en sus manos y quiere organizarse. Así que, de alguna manera, sentimos el deber de venir, de conocer”.
Slava añadió: “No veníamos como individuos, veníamos ya como un grupo de personas. La gente que viene junta quiere apoyar la revolución y aprender sobre ella. Así que venir aquí fue como una especie de sueño hecho realidad”.
“En nuestros países nos dicen que el sistema en el que vivimos es la única solución –contó la internacionalista-. No hay cambio posible. Venir aquí fue la prueba de que organizarse de otra manera es posible. Que una vida diferente es posible, una vida igualitaria es posible, el papel de la mujer puede ser realmente mucho más progresista de lo que nos enseñan en cualquier otro lugar”.
Al referirse a este último tema, remarcó que “la mujer puede tener un papel protagonista en la sociedad, en el ámbito público. Por ejemplo, creo que uno de los puntos más sorprendentes e importantes es cómo las mujeres participan realmente en todos los aspectos de la sociedad: el militar, el social y el político. El sistema de hevserokatî, el sistema de copresidencia, garantiza que las mujeres tengan un lugar en él”.
Slava habló también sobre los progresos realizados en Rojava. “Al mirar la historia, la autodefensa es un punto esencial. Para la sociedad y especialmente para las mujeres –profundizó-. Después de la revolución, hubo un gran paso hacia la liberación de la mujer en la forma en que las mujeres pudieron participar a través del nuevo sistema. Pudieron empezar a educarse en lo que significa defender a su país. Pudieron aprender a leer y tener más acceso a la educación, y tener más acceso a la educación ideológica también. Y sin embargo, son capaces, en una situación de guerra, de organizarse, de desarrollarse y de convertirse en miembros de las YPJ”.
La internacionalista llamó “a todos para que estén más en contacto con la revolución, para que investiguen, para que entiendan la ideología y la filosofía. Abdullah Öcalan es el líder del pueblo kurdo y también es un filósofo. Abdullah Öcalan, a través de sus escritos, fue capaz de ofrecer alternativas que pueden ser realmente útiles en todo el mundo”.
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FUENTE: Binefs Sewq / ANF / Edición: Kurdistán América Latina
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