Las políticas del gobierno turco, encabezado por los partidos AKP y MHP, provocan un colapso económico en el país. El Ejecutivo no puede evitar este colapso a pesar de todas sus intervenciones, tal como demuestran los indicadores del Banco Central de Turquía (BCT).
Al señalar que la prima de riesgo de Turquía es flotante y alta, el director de la entidad, Murat Uysal, afirmó que “el déficit de la cuenta corriente ha aumentado a pesar de una fuerte recuperación de las exportaciones de mercancías junto con la disminución de los ingresos por servicios y el aumento de las importaciones”. Además, informó que “continúan los altos niveles de inflación de alimentos”.
Uysal afirmó que se espera que la inflación sea del 12,1 por ciento a fines de 2020. A su vez, después de descender al 9,4 por ciento a fines de 2021, se espera que gane estabilidad al nivel del 5 por ciento en el mediano plazo.
La expectativa anterior para este año era del 8,9 por ciento y del 6,2 por ciento para el próximo año. Además, dijo que la estimación de la inflación de los alimentos aumentó del 10,5 al 13,5 por ciento en 2020.
El jefe del BCT también admitió que la lira turca (TL, por sus siglas en tuco) se encuentra en un punto extremadamente inútil, y explicó que no tiene un objetivo de tipo de cambio.
El aumento en el tipo de cambio dólar (USD) / TL que comenzó a principios de semana continúa. Después de que Uysal presentara el informe de inflación de 2020, el tipo de cambio aceleró su subida y el dólar superó los 8,32 TL, alcanzando un récord histórico. Mientras que el Euro / TL ha establecido un nuevo récord con 9,77, el gramo de oro subió a 506 liras turcas.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina