Esta entrevista al comandante del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), Riza Altun, se publicó en dos partes, en 2018, en Roja Cijan (rojaciwan.eu). Recientemente, la Revista Legerin la reprodujo dividida en siete partes. Ahora, en Kurdistán América Latina la publicamos de manera íntegra, según la versión y traducción de la Revista Legerin.
-En muchos lugares del mundo, especialmente en América del Sur y Europa, los movimientos y activistas revolucionarios siguen con creciente interés la lucha del PKK y de Rojava. La mayoría de ellos no pueden conectar las relaciones con la coalición liderada por los Estados Unidos con la identidad socialista y antiimperialista del PKK y las fuerzas de Rojava. En su opinión, ¿no es esto una contradicción? ¿Es una situación temporal debido al cerco político, militar y social y al aislamiento de los kurdos o tiene otra explicación?
-Para comprender la situación política actual, es necesario saber cómo se ha desarrollado. No es resultado de una relación política estratégica previamente planeada, sino más bien una situación política y táctica que se ha ido desarrollado durante la resistencia. Cuando surgió la crisis en Medio Oriente, se produjo una lucha en la que el PKK ha participado durante 40 años.
Nuestra lucha se dirigía principalmente contra el sistema imperialista y capitalista que aparece en un Kurdistán dividido en cuatro partes, en forma de estados colonialistas. Durante exactamente 40 años, el imperialismo y el capitalismo han tratado de apoyar con diferentes métodos a las fuerzas colonialistas en la supresión del movimiento de la libertad (kurdo). La conspiración internacional contra nuestros líderes (se refiere a la cooperación de los servicios secretos de varios estados contra el PKK, con el secuestro de su presidente Abdullah Öcalan -llamado Apo- en 1999) es también una consecuencia de esto. Es un enfoque sistemático para la liquidación de nuestro movimiento, un enfoque del imperialismo y el capitalismo. Los primeros enfoques en el surgimiento de la crisis en el Oriente Medio, se dirigieron nuevamente a excluir al movimiento del proceso, suprimiéndolo y aniquilándolo. Fue una política que se llevó a cabo en el marco de una alianza entre las fuerzas colonialistas e imperialistas. Si miramos específicamente a Siria, lo podemos ver aún mejor. Cuando comenzó el caos en Siria, un gran número de los círculos que aparecieron como la oposición de Siria, mantenían relaciones con el imperialismo internacional, las fuerzas coloniales regionales y los círculos hegemónicos. Mientras estaban en conflicto con el régimen, no tenían la más mínima conexión con los kurdos, que resistían por su propia seguridad.
No había ninguna fuerza de apoyo para los kurdos. Sin embargo, cuando fuerzas posteriores, como Turquía y Arabia Saudí, que agudizaron la crisis siria, atacaron a los kurdos, se desarrolló una resistencia en la línea del Presidente Apo. Cuando surgió esta resistencia, las fuerzas que actuaban en nombre de la oposición siria hicieron todo lo posible por suprimirla junto con el régimen sirio. Cuando organizaciones como el ISIS, el Frente Al Nusra y Ahrar Al Sham atacaron las zonas de población mayoritariamente kurda, con el apoyo del régimen de (Bashar Al) Assad, los kurdos respondieron en la línea del Presidente Apo y el PKK. Comenzó la resistencia. Este es el punto esencial donde comenzaron los conflictos y la resistencia.
La resistencia de Kobanê fue un punto de inflexión
Cuando comenzó el conflicto y la resistencia, fuerzas como Turquía, Irán y Siria apoyaron a los grupos salafíes en su ataque contra los kurdos en Siria. Otras fuerzas, especialmente los Estados Unidos e Israel, también los apoyaron. Los obligaron a actuar por sus propios intereses. Las fuerzas salafistas atacaron a los kurdos con este apoyo. La resistencia de Kobanê fue un punto de inflexión. Hasta entonces, no había una sola fuerza regional e internacional que apoyara la lucha por la libertad de los kurdos. Tampoco había ninguna fuerza que estuviera interesada en una relación táctica. Todos ellos juntos hicieron todo lo posible para liquidar el movimiento. Irán ha tratado de detener esta evolución con el régimen sirio. Los Estados Unidos e Israel, por otro lado, a través de Turquía y Arabia Saudí, han tratado de apoyar a las fuerzas salafistas para suprimir el movimiento. Han tratado de hacerlo con métodos como el programa “Entrenar y Equipar”, o entregas directas de armas y apoyo logístico. Ha habido una resistencia implacable a esto. Se ha librado una resistencia implacable tanto contra las fuerzas del statu quo regional, las fuerzas salafistas y las fuerzas apoyadas por los Estados Unidos, Israel y Turquía. Kobanê fue el punto de inflexión de esta resistencia.
La resistencia de Şhengal ha dado al mundo aire para respirar
Con el ISIS, las fuerzas que luchan por el dominio en el Medio Oriente han seguido una política muy consciente y despiadada. Han seguido exactamente la misma estrategia que Genghis Khan y Timur Lenk para dominar todo el Medio Oriente: violencia y brutalidad ilimitadas. El hecho de que el ISIS haya mostrado en la prensa las cabezas cortadas de cientos de personas no se debe a su ignorancia, sino que es un cálculo estratégico. La estrategia es crear miedo, pánico y devoción. Después de las primeras masacres del ISIS, se observó que incluso antes de que el ISIS se moviera, el miedo se extendía y las ciudades se entregaban sin resistencia.
La primera y única resistencia contra el ISIS fue la de las guerrillas del PKK y los militantes de las YPG y el YPJ, que lucharon en Rojava cuando la población kurda de yezidí fue atacada en Şhengal. Mientras que los Estados Unidos, Rusia y los países de la Unión Europea (UE) observaban el genocidio de la sociedad yezidí, a pesar de sus enormes fuerzas, las guerrillas de las HPG y YJA, y los combatientes de las YPG/YPJ salvaron de la masacre a cientos de miles de yezidíes, cristianos y musulmanes. La resistencia de Şhengal le ha dado literalmente al mundo aire para respirar, y le ha hecho detenerse y reflexionar. La gente se ha liberado un poco de la atmósfera de pánico y miedo, y ha comenzado a cuestionar la situación. La gente ha empezado a preguntarse: ¿por qué los Estados Unidos, la Unión Europea y las demás fuerzas mundiales y regionales no intervienen en esta brutalidad, a pesar de sus muchas posibilidades? ¿O quieren beneficiarse de esta brutalidad? Si bien esta situación puso en tela de juicio la legitimidad de los estados internacionales y regionales mencionados anteriormente, el PKK y su líder se han ganado una gran reputación. El sello de “terrorismo” que el colonialismo y el imperialismo turco había puesto en nuestro movimiento durante 40 años, ha sido borrado. A partir de este punto, nadie podría continuar las relaciones con el ISIS o con organizaciones similares. Especialmente, las fuerzas que se definieron como “estados democráticos” tuvieron que utilizar nuevos métodos para continuar su existencia en la región.
A pesar de ello, las fuerzas regionales continuaron su política con el ISIS y fuerzas similares. Esta vez, intentaron poner el ISIS en Kobanê y derribar Kobanê. El objetivo era liquidar los logros de los kurdos en Rojava, y especialmente los logros de una línea libre en el Medio Oriente. Todo el mundo tiene algún tipo de interés en esto. Tanto el régimen como, indirectamente, las fuerzas que lo apoyaban, Turquía y Arabia Saudí, tenían interés en ello. El ISIS había establecido sus relaciones estratégicas y tácticas a través de la hostilidad kurda. El ataque a Kobanê fue el resultado de esto. Se mostró una seria resistencia contra el ataque a Kobanê, que incluía las cuatro partes del Kurdistán. Especialmente los kurdos del norte, sur y este de Kurdistán han mostrado la sensibilidad necesaria para la resistencia de Kobanê. La larga duración de la resistencia también ha reforzado cada vez más el interés de las sociedades regionales y del público internacional.
La resistencia de Şhengal y Kobanê ha causado remordimientos de conciencia en la comunidad internacional
Con la resistencia kurda en Rojava y Kobanê, se creó una nueva situación. La comunidad internacional y la opinión pública han ejercido una increíble presión sobre los Estados Unidos y otras fuerzas globales para que intervengan. Şhengal y Kobanê han provocado literalmente remordimientos de conciencia en la comunidad internacional. De la misma forma en que, durante la Segunda Guerra Mundial, la alianza entre la Unión Soviética (URSS) y los Estados Unidos contra el fascismo de Hitler fue considerada legítima por ambas partes y por la sociedad, la relación entre la coalición dirigida por los Estados Unidos y las YPG es considerada legítima y necesaria. Al igual que la Unión Soviética y los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, ahora ambos lados han sentido la necesidad de una relación. Así se ha establecido una relación táctica con la coalición liderada por Estados Unidos en la lucha contra el ISIS. La forma en que comenzó esta relación se debe evaluar de esta manera. En lugar de juzgar sólo por las posiciones ideológicas de ambas partes, es más importante ver cómo se ha desarrollado esta relación, y quién actúa en esta relación y con qué objetivo.
Durante 40 años, los Estados Unidos han estado luchando contra el PKK, y el PKK ha estado luchando contra el colonialismo y el sistema imperialista. Pero hay una nueva situación y el caos que existe en el Medio Oriente afecta al sistema mundial. Este caos no sólo se refiere a la lucha de los pueblos oprimidos y los movimientos socialistas y la lucha de las fuerzas imperialistas, están las luchas entre las propias fuerzas imperialistas, las luchas entre las fuerzas imperialistas y regionales-colonialistas, y las luchas reaccionarias locales. Esta lucha ofrece la posibilidad de que todas las fuerzas hagan alianzas tácticas, pero que actúen de acuerdo con sus propios objetivos. Por consiguiente, todos tratan de beneficiarse de las fuerzas y oportunidades de los demás para alcanzar sus propios objetivos. Diferentes posiciones políticas y militares proporcionan la base para ello.
La opción obligatoria de los Estados Unidos
Como las intervenciones políticas y militares de los Estados Unidos en Siria, llevadas a cabo al principio de la crisis en el Medio Oriente con la ayuda de Turquía y Arabia Saudí, no llegaron a nada, se plantearon algunas opciones. La primera opción era dejar Siria, es decir, la región. Abandonar Siria y la región equivalía a alejarse de la hegemonía mundial, y los Estados Unidos no podían hacer esto. La segunda opción era invertir aún más en políticas fallidas a través de Turquía y Arabia Saudí, lo que no habría tenido ninguna otra consecuencia. La tercera opción era la construcción de relaciones con una nueva fuerza que tuviera éxito en la región. Esta era casi la única opción conveniente para los Estados Unidos.
En lugar de repetir su táctica anterior de seguir luchando con Turquía y Arabia Saudí contra la fuerza de la libertad victoriosa, los Estados Unidos vieron una mayor ventaja en cooperar con los éxitos logrados por la resistencia. Esta previsión de atribuirse los logros es una artimaña imperialista. Los Estados Unidos han establecido de forma muy calculada una relación táctica en Kobanê. Ha iniciado una fase con la coalición internacional para apoyar la resistencia de las fuerzas de las YPG. Esta fase ha sido más bien una fase táctica. La lucha por la libertad desarrollada por los kurdos en Rojava es más una lucha basada en la libertad y la igualdad, una lucha y resistencia socialista, persigue la fraternidad y la unidad de los pueblos. Por otro lado, el imperialismo está llevando a cabo una política de hegemonía en el Medio Oriente. Estas dos situaciones estratégicas e ideológicas muy diferentes en el actual Medio Oriente, sólo han iniciado una fase común en Kobanê a nivel táctico. El después puede considerarse como una continuación de esta relación táctica. Esta relación es muy dolorosa. Mientras que para una parte la lucha por la libertad es una lucha para expandir su propio espacio y crear un Medio Oriente libre, con soluciones democráticas, la otra parte ha entrado en la relación para expandir y dominar su propia hegemonía en el Medio Oriente. Esta no es sólo una relación en la que no se apoya uno en el otro, es una relación entre fuerzas que están en constante conflicto entre sí.
-¿No es esta una situación históricamente muy rara, quizás incluso ocurriendo por primera vez? ¿Existe, entonces, una situación en la que los intereses de los pueblos y fuerzas sociales oprimidas se encuentren con los de las fuerzas imperialistas y se pueda crear una reunión táctica con ellos?
-En el Medio Oriente, esto está sucediendo por primera vez, pero hay ejemplos en el mundo. Si miramos la historia de las luchas por la libertad, podemos dar muchos ejemplos. También hay ejemplos recientes. Especialmente, durante la Primera y Segunda Guerra Mundial y la Revolución Soviética, hay muchos ejemplos. Por ejemplo, en la lucha antifascista durante la Segunda Guerra Mundial, entre la Unión Soviética y los Estados Unidos había líneas de frente comunes contra el fascismo. ¿Cómo se puede evaluar ahora a la Unión Soviética? Si miramos las relaciones directas con los Estados Unidos, o las relaciones con Occidente dirigidas por Inglaterra, se puede decir que la Unión Soviética colaboró con el imperialismo. Eso sería un enfoque simplista y dogmático. Hay ejemplos similares durante la Revolución de Octubre. Durante la revolución hubo muchos acuerdos. Hubo acuerdos económicos con el capitalismo y los imperialistas, y acuerdos políticos. Pero si miramos la esencia de estos acuerdos, en ellos no hay ninguna negación del socialismo. Tampoco podemos ver ninguna negación del socialismo en las relaciones desarrolladas por Lenin con diferentes fuerzas capitalistas e imperialistas en el momento de la Revolución de Octubre, ni durante la Segunda Guerra Mundial. Por el contrario, fue necesario establecer relaciones y acuerdos tácticos y estratégicos durante la Revolución de Octubre. La lucha contra el fascismo durante la Segunda Guerra Mundial también hizo imperativa la construcción de un frente antifascista.
-¿Cuánto tiempo durarán estas relaciones?
-Las relaciones terminarán con la aparición de más problemas. No son relaciones estratégicas. La Revolución de Octubre, mientras avanzaba su propia revolución, hizo acuerdos con muchas fuerzas capitalistas, pero estos acuerdos expresaban una situación cíclica, y con el fin de esta situación ya no tenían ningún significado o valor. Lo mismo ocurre con la Segunda Guerra Mundial.
La alianza formada durante la Segunda Guerra Mundial fue la expresión de una actitud antifascista, resultado del encuentro de la defensa de la patria de la Unión Soviética, que fue fuertemente atacada por el fascismo, con otros intereses antifascistas. Durante los ataques del fascismo esta actitud estuvo presente. Después de la derrota del fascismo, todos volvieron a sus respectivas posiciones políticas y siguieron su propia línea ideológico-política.
Hay tres líneas principales en la región
Tal vez no haya muchos ejemplos de esto en el Medio Oriente. Es la primera vez que algo así sucede en el Medio Oriente, es una situación algo especial. Los conflictos y luchas que tienen lugar en todo el mundo son en realidad la Tercera Guerra Mundial. El Medio Oriente es la geografía donde la Tercera Guerra Mundial es más notable. Podemos ver muchas cosas nuevas en el Medio Oriente hoy en día. Podemos ver una red muy complicada de relaciones tácticas y estratégicas, cada una para fortalecer su propia línea, desde el punto de vista de los estados del statu quo, el imperialismo internacional y las fuerzas socialistas revolucionarias.
Porque la realidad de la región es muy compleja. Hay tres líneas principales en la región. Una es la línea imperialista internacional y las fuerzas conectadas con ella. Está representado por los Estados Unidos, Rusia y los países de la UE. La segunda línea es la de las fuerzas regionales del status quo. Están representados por fuerzas como Turquía, Irán y Arabia Saudí. La tercera línea es la línea del socialismo, la democracia y la libertad. Está representado por la izquierda y los movimientos socialistas, liderados por el PKK y los círculos sociales. Estas tres fuerzas fundamentales están en conflicto entre sí y las dos primeras líneas en particular tienen fuertes contradicciones internas. En consecuencia, estas diferentes líneas pueden desarrollar continuamente diferentes relaciones y alianzas según las contradicciones e intereses primarios. Todos están en conflicto entre sí, pero al mismo tiempo abiertos a relaciones y alianzas. Nuestra definición de la Tercera Guerra Mundial se basa en estas realidades. Cuando nos movemos según esta definición de la Tercera Guerra Mundial, surgen muchas relaciones estratégicas y tácticas. Y muchas fuerzas se ven obligadas a entrar en relaciones tácticas que pueden parecer contradictorias para seguir su propia estrategia. Esto es cierto para todos. Esa es la esencia de esta política y de la diplomacia. Esto es de esperar. Por eso puede ser un enfoque muy superficial y estrecho mirar y evaluar sólo la situación política y militar en la superficie.
Esta es una fase práctica
Abordar adecuadamente el asunto es reconocer que existe una crisis profunda y estructural del sistema capitalista mundial. Esta crisis se está produciendo a nivel mundial, pero es más evidente en el Medio Oriente. El conflicto actual en el Medio Oriente tiene una forma tanto política como militar. No es suficiente un enfoque ideológico y político, se debe adoptar al mismo tiempo una posición organizativa y militar, lo que significa luchar continuamente contra lo existente, cambiándolo, transformándolo y creando algo nuevo en su lugar. Es una fase práctica, porque si no se abordan adecuadamente las cuestiones prácticas y no se reconoce la dialéctica del propio desarrollo, se pueden utilizar enfoques dogmáticos que allanen el camino a la propia liquidación. Esto puede llevar a una situación en la que la línea de la libertad no puede expresarse en absoluto. Por lo tanto, esta complejidad debe ser entendida correctamente, debe decidirse muy claramente contra qué y cuándo se va a hacer algo. Se debe hacer una evaluación muy completa de cómo se protege un logro y una posición conquistada, y cómo se utilizan para el establecimiento y la construcción del socialismo. Si no lo vemos de esta manera, no podemos entender la línea de libertad, ni la situación de las fuerzas del statu quo regional o la del imperialismo internacional. Haríamos la mayor injusticia a la lucha y la resistencia dirigida por la sociedad si lo mezcláramos todo y ofreciéramos la apariencia de una gran liberación desde el exterior con sólo enfoques teóricos.
-Estas relaciones son relaciones tácticas, esto es comprensible. La Federación en el norte de Siria y las fuerzas de Rojava tienen relaciones tanto con los Estados Unidos como con Rusia. Se sabe que son grandes fuerzas imperialistas. ¿Es realmente posible entrar en relaciones políticas, militares, económicas con estos imperialistas mientras se protege la identidad socialista de uno?
-La nuestra es una lucha por la libertad que lleva en su conciencia toda la experiencia histórica de los movimientos de liberación del pasado, y actúa en consecuencia. No podemos ser entendidos con una visión socialista real. De la práctica del socialismo real sabemos bien que ninguna lucha por la libertad se puede librar en el camino del socialismo real, es decir, dividir el mundo en diferentes polos y posicionarse en uno de estos frentes. La situación mundial no es la adecuada, ni tampoco es posible librar una lucha por la libertad en la que uno se abstrae dentro del sistema capitalista global y, por tanto, se margina. Se debe abordar de manera holística. En este punto, vivimos en un sistema mundial capitalista, y queremos abrir un espacio de libertad en el sistema capitalista mundial, en la lucha contra el capitalismo, el imperialismo y el colonialismo. No tenemos la posibilidad de posicionarnos dentro de un área libre existente y abrir una nueva área allí. Queremos crear un espacio de libertad en un mundo esclavizado. Pero los espacios que queremos abrir están en manos y bajo el control de otros.
Hay contradicciones muy serias entre los diversos círculos políticos y sociales que existen en la región. En nombre de nuestro ideal socialista, podemos explotar estas contradicciones y conflictos, y así allanar el camino a seguir. No empujar a las fuerzas socialistas a forzar una polarización de fuerzas o a atarse a un polo. Si abordáramos la polarización de los asuntos con un verdadero enfoque socialista, en un momento u otro pondríamos a todas las fuerzas imperialistas y colonialistas en nuestra contra. Además, estas fuerzas no están en un bloque con cada una de las otras, hay muchas contradicciones y conflictos entre ellos. No beneficiarse de estas contradicciones y conflictos en nombre del ideal socialista sería una gran pérdida en términos de ideología socialista. Si abordamos el asunto sólo distinguiendo entre los socialistas, capitalistas e imperialistas, quedarían muy pocos en la zona a los que podríamos llamar camaradas. Es muy difícil dirigir esta enorme lucha sólo con camaradas. Lo que le quitamos al sistema capitalista-imperialista, si es posible, fortalece al movimiento socialista y debilita al otro lado. Por consiguiente, con una organización correcta y una lucha correcta basada en nuestra propia ideología, nuestro enfoque político y nuestra línea, debemos abrir continuamente espacios de libertad. Porque ante nosotros están las fuerzas que gobiernan estas áreas y las fuerzas hegemónicas aliadas con el capitalismo. Debemos abrir un camino en estas áreas.
La línea de la libertad ha tenido un gran impacto en el Medio Oriente
Cuando miramos la realidad del Medio Oriente, en realidad no hay ningún espacio que podamos llamar espacio libre. Toda página se ha perdido, toda la historia se ha perdido. El nivel de comprensión de la sociedad y la mentalidad, han sido tragados dentro del actual sistema mundial capitalista. Los países y la geografía han sido ocupados por la hegemonía colonialista e imperialista. En nombre de la soberanía del Estado, se cerró el camino a la emancipación social. En esas condiciones, los kurdos desarrollan una lucha por la libertad. Queremos crear un espacio de libertad especialmente dentro de una realidad social que es negada por los cuatro estados coloniales y por el imperialismo. Por lo tanto, necesitamos un enfoque extremadamente bien calculado. Decir simplemente “estos son todos imperialistas, colonialistas y capitalistas” y por lo tanto ponerlos a todos en contra nuestra significa aceptar la derrota desde el principio, significa aceptar la liquidación de la lucha por la libertad. Entonces, ¿qué hay que hacer? La realidad militar, política y social de estas zonas es muy fácil de entender: es saber cómo afirmarse dentro de esta realidad de ahora en adelante. Quienes se mueven en este sentido, se encuentran inevitablemente en una situación en la que una multitud de fuerzas se encuentran, se juntan y entran en relaciones tácticas, militares y políticas. Lo importante es no desviarse de la propia línea ideológica, política y liberal, para que todas las relaciones sirvan en última instancia a este propósito. Todos los que luchan por la libertad en el Medio Oriente se ven obligados a enfrentarse y expresarse en esta realidad.
Ahora también hay una lucha por la libertad desarrollada por nosotros. Si miramos la historia de nuestra lucha por la libertad, podemos ver una variedad de dificultades, pero también riqueza, que puede asustar a la gente. Durante más de 40 años, el sistema capitalista e imperialista mundial se ha aliado contra la lucha por el socialismo y la libertad desarrollada por el PKK. Han apoyado e invertido en las fuerzas colonialistas para prevenir y detener el levantamiento de un movimiento de libertad. A pesar de esto, se ha desarrollado una gran lucha solamente con el apoyo de la sociedad. Esta lucha ha sido llevada por el pueblo. Este enfoque emancipador, que cuenta con el apoyo de la sociedad kurda, ha tenido un enorme impacto en el Medio Oriente, y la lucha ha encontrado un nicho en la situación política actual. Aunque el mundo capitalista quiera destruirlo, la experiencia del movimiento basado en la guerrilla, la política democrática y la organización de la sociedad, ha logrado grandes resultados.
Ha surgido un Medio Oriente en el que las fuerzas imperialistas se enfrentan a la bancarrota
Esta resistencia también ha sabido mantenerse viva al recibir el apoyo activo de una amplia gama de movimientos que se describen como liberales o antisistémicos de diversas maneras. Muchos círculos han dudado de esta lucha de 40 años y no han tenido un enfoque de apoyo. Ahora hay un caos en el Medio Oriente, que también está relacionado con los resultados que ha producido esta lucha de 40 años. Este caos ha sacudido el Medio Oriente. Ha surgido un Medio Oriente donde las grandes fuerzas, las internacionales y las imperialistas, se enfrentan al fracaso de sus políticas. Se ha hecho evidente lo débil que es el tan creído capitalismo, el imperialismo o el papel de Israel en el Medio Oriente. El caos en Medio Oriente se ha tragado literalmente a todos y los ha hecho invisibles. Incluso, los estados regionales relacionados con ellos, y su hegemonía y las estructuras del status quo, se han derrumbado. ¿De dónde viene todo esto? Sin duda se puede explicar por la crisis del sistema y las contradicciones históricas, pero eso no es todo.
La crisis del sistema o las contradicciones históricas sólo pueden convertirse en un caos con una cierta cantidad de lucha e intervención. Así, la lucha por la libertad liderada por el PKK durante 40 años ha jugado un papel importante en el surgimiento del caos en Medio Oriente y en el declive del sistema. En esta nueva fase, todos están tratando de reposicionarse en el Medio Oriente. Esto es muy importante y debe ser reconocido. El centro de la crisis capitalista actualmente es el Medio Oriente; o bien el capitalismo en el Medio Oriente se regenera a sí mismo a partir de lo nuevo y extiende su vida por otros cien o mil años, o el caos en el Medio Oriente abrirá un nuevo avance como un área donde la libertad se desarrolle dentro del sistema de la modernidad capitalista. Esa es la verdadera razón por la que todas las potencias mundiales están ahora en el Medio Oriente, librando una guerra. Explicar el asunto sólo con las guerras del petróleo sería un enfoque muy superficial.
En la crisis del sistema capitalista mundial, el Medio Oriente es el escenario de la Tercera Guerra Mundial. Todos están representados aquí. La lucha es ideológica, política y sistémica. En el curso de esta lucha, el imperialismo global se esfuerza por desarrollar una hegemonía mundial postmoderna y un sistema mundial renovado. Los estados del statu quo regional tratan de mantener las ventajas y posibilidades del antiguo sistema del siglo XX. En este caos, los pueblos oprimidos y los círculos sociales se esfuerzan por lograr su propia libertad e igualdad. Este es ahora el caso de Rojava.
-¿Es posible construir una vida socialista en el norte de Siria o incluso en todo el Medio Oriente a pesar de los Estados Unidos, Rusia y los estados europeos?
-Si miramos el Medio Oriente antes de la crisis, no había una línea liberal. No existía tal cosa en Túnez, Libia, Egipto o los estados del Golfo. ¿Quién controlaba el caos? Resultó ser algo más que una lucha en la que la modernidad capitalista quería restablecerse, y un conflicto entre las fuerzas imperialistas y colonialistas. No había ninguna línea y organización que pudiera expresar la libertad. Debido a que la búsqueda de la libertad de las sociedades no estaba organizada, las luchas y esfuerzos se derretían continuamente en sus manos. Pero cuando la crisis llegó a Rojava, surgió una nueva situación debido a la línea de la libertad. Es una nueva situación creada por el PYD (Partido de los Unión Democrática) y las YPG. Por primera vez, ha surgido en el Medio Oriente una línea democrática, liberal y socialista contra la modernidad capitalista. Por eso, desde el principio todos se han unido para sofocar esta línea, para tratar de romper esta lucha que ocurre ahora en el Medio Oriente y el mundo. Al final, se vieron obligados a establecer relaciones con aquellos a los que no podían liquidar.
-¿Qué hacer en esta posición? Por supuesto, los que luchan por la libertad deben primero confiar en sí mismos. Si tienen la necesidad y la creencia en su ideología, socialismo, libertad e igualdad de la sociedad, no deben tener miedo de construir relaciones con quien sea.
-La pregunta que haces es como el destino del Medio Oriente. Si alguien está luchando allí por la libertad y está siguiendo una política de expansión de sus propios intereses, entonces estas fuerzas se ven obligadas a vivir constantemente una fase y una situación de relaciones y contradicciones. Esto se puede dar a veces en forma de compromisos y alianzas, y a veces en forma de disputas. Por ejemplo, los Estados Unidos, que inicialmente no mostraron interés hacia los kurdos, más tarde se vieron obligados a entrar en relaciones tácticas con el YPG.
Pero trataron de hacer todo lo posible con la relación táctica para separarlos de su identidad socialista e integrarlos en el sistema capitalista-imperialista. Esta es una de sus principales preocupaciones en el desarrollo de estas relaciones. Pero los kurdos y la línea liberal tienen sus propias preocupaciones en esta relación. Es importante quién se sube al caballo de quién. También son importantes los resultados que ambas partes obtienen de esta relación, en términos estratégicos y tácticos. La obtención de una posición por parte de los kurdos en Rojava y las fuerzas de la Federación Democrática del Norte de Siria, tiene una importancia estratégica para todas las fuerzas socialistas y antisistémicas. Sin embargo, la presencia de los Estados Unidos tiene un valor cuantitativo sólo para el sistema imperialista. No hay duda de que estas relaciones tácticas son importantes para ellos. Somos conscientes de que estas relaciones seguirán siendo conflictivas. Sin embargo, el movimiento en Rojava tiene confianza en sí mismo y está logrando resultados.
Se ha creado un área de libertad en un pequeño trozo de tierra que llamamos Rojava
Hoy en día está activa en Siria una coalición internacional, representada por los Estados Unidos. Detrás de esta coalición están todas las fuerzas del capitalismo. Otro frente de este sistema es Rusia, detrás del cual también hay una multitud de fuerzas. Si tomamos, de un lado, la OTAN, y del otro Eurasia, todas las fuerzas capitalistas e imperialistas hegemónicas del mundo tienen su representación central en la persona de Rusia y los Estados Unidos. Al mismo tiempo, los estados regionales están en relaciones y contradicciones entre estos dos polos. Por un lado, están tratando de imponer el sistema mundial capitalista-imperialista, pero por otro lado, están compitiendo entre sí para desarrollar su propia hegemonía dentro de la hegemonía absoluta.
En esta situación hemos abierto un espacio de libertad, un espacio democrático-comunitario en un pequeño punto de la tierra, que llamamos Rojava. Es la primera vez que en el Medio Oriente hablamos de tal espacio de libertad. Hay una fuerza que se expresa social, política y económicamente en este pedazo de tierra. Esta fuerza tiene toda la fuerza material y moral de la sociedad que está detrás de ella, y lucha a su manera. Al mismo tiempo, quiere afirmarse contra todo el poder del sistema capitalista, con una resistencia ideológica, política y económica. Debemos pensar en lo que esta libertad puede significar. Existe el enfoque imperialista y capitalista que quiere destruir este espacio. Hay una cierta cantidad de carga que va con ello.
También hay una línea de resistencia liberal que quiere expandir este espacio aún más. Aquí tenemos que entender bien la contradicción y el conflicto. Sin entender esta contradicción y conflicto, no podemos entender todo el asunto. Las contradicciones y conflictos aquí, las relaciones de las YPG con Rusia y los Estados Unidos deben ser evaluadas muy bien. Si nos fijamos en cómo se llevan a cabo estas relaciones en un día, es posible entender el problema.
-Usted habló de los enfoques estratégicos de las fuerzas. ¿Qué enfoque estratégico tiene Rusia?
-En el enfoque estratégico de Rusia vemos el intento de intervenir en la región como una fuerza regional. ¿Qué fuerzas lo apoyan? Irán, Turquía, Irak y Siria. Rusia quiere influenciar de alguna manera a los otros estados del Medio Oriente y así constituir una fuerza. ¿Cuál es su objetivo estratégico básico? Quiere que el régimen de Siria se convierta en un Estado-nacional y así volver a ser una fuerza hegemónica. No vemos aquí ningún enfoque que pueda asociarse con la democracia, la igualdad, la libertad o una solución democrática a los problemas verdaderamente fundamental.
Mientras se aplica este enfoque, Rusia construye un concepto en las contradicciones cotidianas con las fuerzas aliadas. Está llevando a cabo una política de integración del espacio libre liderado por los kurdos en el actual régimen o Estado-nación. Su poder militar, político y diplomático lo protege sobre esta base. Pero, por otro lado, los que luchan por la libertad tratan de aprovechar la situación de esta fuerza y abrirse camino entre las contradicciones, y por tanto, es muy doloroso. Rusia está tratando de asumir la lucha por la libertad e integrarla en el régimen a través de las relaciones con los turcos, los iraníes y las fuerzas del régimen. A pesar de todo esto, el movimiento por la libertad intenta sacar provecho de las rupturas de estas relaciones y continuar su camino político, militar, económico y diplomático.
-Mientras hablamos del enfoque estratégico de Rusia, también quisiera hacer una pregunta con respecto a los Estados Unidos. ¿Qué enfoque estratégico están adoptando los Estados Unidos?
-Lo mismo se aplica a los Estados Unidos. ¿Están muy contentos con la línea liberal del PYD? No creo que los Estados Unidos estén muy contentos con la creación de una estructura cantonal, la preferencia por un sistema de autogobierno y los esfuerzos por crear una sociedad socialmente libre. Pasan por alto esta situación económica y quieren lograr el éxito militar a través de relaciones tácticas. Pero en contraste con esto, están desarrollando sus relaciones de Estado sobre una base estratégica a largo plazo. Así que, si el carácter antiimperialista no se ve en las relaciones tácticas, en lugar de eso el sistema hegemónico se fortalece. No hay otra relación aparte de las relaciones tácticas, políticas y militares. El sistema económico basado en los monopolios, que es la base del imperialismo, tampoco es válido en Rojava.
A los monopolios no se les da espacio. En esencia, en Rojava se está construyendo un sistema democrático basado en la libertad y la igualdad en el sentido político y económico. Podemos ver esto fácilmente en la constitución federal. ¿Qué es lo que está organizado socialmente? La sociedad democrática y la política democrática. En el sentido económico, por otro lado, quieren crear una sociedad comunitaria. Las leyes anticoloniales y antimonopolio están hechas para esto. Así que aquí no se construye ninguna alianza táctica y estratégica con Rusia, los Estados Unidos u otras fuerzas capitalistas-imperialistas, sino que, por el contrario, se les impone otro mundo. Están tratando de mostrarles que otro mundo es posible. El sistema capitalista no lo acepta y quiere integrar esta alternativa liberal en el Estado nacional antes de que nazca. Quiere liderar la alternativa en el camino del nacionalismo y el Estado nacional.
-Hay enormes fuerzas militares y políticas detrás de Rusia y los Estados Unidos. En comparación con sus fuerzas, esto es una gran superioridad y está surgiendo un equilibrio asimétrico de poder. ¿Cuáles son sus ventajas sobre estos dos frentes? ¿Tienen ventajas ideológicas, políticas y sociales?
-Por supuesto que tenemos ventajas. Los acontecimientos lo demuestran en muchos aspectos. El Medio Oriente es un lugar donde las civilizaciones han surgido históricamente. Cuando hablo de civilización, me refiero a la fase que va desde el surgimiento de la sociedad basada en las clases y el Estado hasta el sistema capitalista del Estado capitalista. Dentro de esta fase, estamos hablando de una situación histórica en la que todos los valores han sido destruidos y se han degenerado, de una forma u otra, en nombre de la sociedad, la libertad, la humanidad, la igualdad. En este sentido, la sociedad se encuentra en un estado de gran desesperación y desesperanza.
El caos actual es el resultado de esto. Las sociedades buscan la libertad. Nuestra mayor superioridad es la búsqueda de la libertad por parte de la sociedad. En un sentido muy general, nuestra ideología socialista, que puede ser una respuesta a esta búsqueda de la libertad de la sociedad, nos da una superioridad contra el imperialismo y el colonialismo. Sin embargo, en el Medio Oriente, específicamente, hay cuestiones sociales muy intensas basadas en la etnia, la religión, la denominación, la clase y el género. El sistema de civilización y su último representante, el sistema capitalista, son los creadores de estos problemas.
Proponemos un modelo democrático para la solución de estos problemas, que está en consonancia con la historia y la cultura de los pueblos del Medio Oriente. Básicamente, combinamos la idea socialista con experiencias similares de la vida histórica y cultural de estos pueblos. Y esto es lo que hace que nuestras ideas sean tan atractivas. Además, nosotros como movimiento tenemos una historia de 40 años. Este es un pasado que está dedicado sólo a la libertad, la igualdad, la justicia y la fraternidad de los pueblos. Por esta razón, todos los círculos sociales confían en este movimiento comprometido, que es similar a las tradiciones proféticas que tienen su lugar en la memoria de los pueblos del Medio Oriente. Hoy en día expresamos esta tradición con el socialismo. Por lo tanto, es posible, con un correcto enfoque ideológico, político y organizativo, convertirse en una gran fuerza en el Medio Oriente. Hemos demostrado lo correcto de esto en el Medio Oriente. Antes de eso, muchos defensores de la libertad lo han demostrado a lo largo de la historia. Nos hemos levantado en el Kurdistán, en las cuatro partes del Kurdistán, pero más tarde hemos alcanzado un nivel aún más alto en Rojava. Este es un apoyo importante para nosotros. Si aquí hay un verdadero acercamiento, entonces se pueden lograr resultados.
Podemos hablar de la Federación Democrática del Norte de Siria, el cantón de Cizîrê o cualquier otro cantón, por ejemplo. Cuando decimos esto, no podemos entender suficientemente lo importante que es. Pero la Federación o los cantones no son una cosa ordinaria. ¿Qué significa eso? Significa crear una isla en medio del mar, ser una isla. Es imposible que alguien que no conoce al enemigo entienda eso, es imposible para cualquiera que no ame la libertad hasta la médula. Por lo tanto, no es más que demagogia pretender comprender la situación actual con enfoques ideológicos y evaluaciones políticas muy superficiales.
Podemos hablar de la Federación Democrática del Norte de Siria, el cantón de Cizîrê o cualquier otro cantón, por ejemplo. Cuando formulamos esto, no podemos entender suficientemente lo importante que es. Pero la Federación o los cantones no son una cosa ordinaria. ¿Qué significa eso? Significa crear una isla en medio del mar, ser una isla. Es imposible que alguien que no conoce al enemigo entienda eso. Es imposible para cualquiera que no ame la libertad hasta la médula. Por lo tanto, no es más que demagogia pretender comprender la situación actual con enfoques ideológicos y evaluaciones políticas muy superficiales.
Entonces, ¿qué es lo que se está levantando en Rojava? ¿Qué es lo que está surgiendo en Kobanê y Afrîn? ¿Qué significa la Federación del Norte de Siria en su conjunto? Si lo consideramos todo, significa que no es sólo una respuesta a la búsqueda de libertad de un pueblo, o que el proyecto se limita a un área. Por el contrario, se han creado áreas que hacen que con la libertad valga la pena vivir en ellas. Los espacios abiertos están emergiendo en forma de pequeñas islas. Estas islas se unen, tratan de formar federaciones para escapar de la marginación y adquieren un carácter universal al unirse a los movimientos revolucionarios internacionales.
Debemos reconocer que la situación desesperada de la crisis estructural del capitalismo y las contradicciones y el caos que experimentan las entidades hegemónicas dentro del sistema, ofrecen grandes ventajas a las fuerzas revolucionarias en lucha. Así, la búsqueda de libertad de las sociedades, el anhelo de la humanidad de recuperar su identidad humana y los resultados concretos de este anhelo en el Medio Oriente y en Rojava, ofrecen oportunidades más que suficientes para el desarrollo de la lucha por la libertad.
En Occidente, especialmente en América Latina, los regímenes de Irán y Siria no sólo son considerados como opositores de ISIS, sino también como antiimperialistas. Recientemente, Tayyip Erdoğan también ha empezado a usar un lenguaje antiamericano y antieuropeo. ¿Qué crees que subyace al antiamericanismo de estos estados? ¿Son sus actitudes realmente antiamericanas, o se trata de una lucha interna entre las fuerzas imperialistas y colonialistas?
En Occidente hay muchas fuerzas que podemos llamar antisistémicas. Esto se debe reconocer. También, históricamente, hay muchas corrientes y fuerzas que han realizado una verdadera lucha por la libertad. Todavía hoy son fuerzas antisistémicas muy intensas. América Latina es también un importante centro de estas luchas. Cuando observamos los acontecimientos posteriores al descubrimiento del continente americano, especialmente los movimientos guerrilleros que surgieron en la década de 1960 y la línea socialista, lo vemos como un lugar extremadamente importante de la lucha revolucionaria. Sin embargo, ambas áreas también son problemáticas al mismo tiempo. Por ejemplo, los movimientos antisistémicos son bastante dispersos, separados unos de otros y marginales. Existen tantos problemas en su propia transformación en una fuerza antisistémica y, en el sentido real, libre, como problemas en el reconocimiento de las fuerzas ideológicas, políticas y militares existentes, y en el desarrollo de su propia identidad a través de ellas. En este sentido es problemático.
Aunque están en contra del sistema hay un serio atraso y dogmatismo
Esta crítica puede ser generalizada para Occidente. Por ejemplo, si evaluamos los 150 años de historia del marxismo, vemos que terminó principalmente en el socialismo real. La necesidad del socialismo real puede ser discutida desde todos los puntos de vista. Por supuesto, el marxismo expresa una hostilidad hacia el sistema. Expresa un importante punto de inflexión contra la dominación y la hegemonía, y una experiencia de 100 a 150 años. Nadie puede negar esto. Sin embargo, al final debemos cuestionar un camino de liberación que se convirtió en el verdadero socialismo y asumió un papel en el que alimentó el orden existente con sangre fresca. Ahora bien, con la perspectiva socialista real no se puede lograr una línea liberal ni se puede evaluar y apoyar una línea de éxito. La situación es similar cuando miramos al anarquismo. Hay varias corrientes anarquistas, cuyas diferencias son de naturaleza cuantitativa. No hay diferencias fundamentales. Filosóficamente, su enfoque de la libertad e igualdad, y su oposición a la hegemonía, han construido un cuerpo de experiencia extremadamente rico. Sin embargo, como esta experiencia filosófica e ideológica se muestra más en el ámbito ideológico y menos en el de la organización, la lucha y la resistencia, no hay eco en la sociedad y no se reúne el poder para representar una línea real de libertad. Como esto no sucede, miran las luchas en otras partes del mundo con su propio enfoque, su propia lógica, sus plantillas. Esta ecuación, a pesar de su lenguaje radical, no los libera de la vida y la relación del sistema capitalista. Este es un problema serio del frente de la libertad. Este frente también puede incluir círculos feministas y ecológicos. Por lo tanto, se puede evaluar una variedad de corrientes en este contexto. Si se mira desde este punto de vista, a pesar de su oposición al sistema, hay un serio atraso y dogmatismo. Hay una seria cercanía al interior y te abstraes. Esta autoabsorción equivale en cualquier caso a la liquidación.
Lo mismo se aplica a América Latina. América Latina es una región que realmente ha pasado por muchas fases en su historia. Ha habido una lucha contra el colonialismo español y portugués, contra el imperialismo de los Estados Unidos, y más tarde una lucha por el socialismo. Especialmente, en la lucha por el socialismo, las guerrillas hicieron mucho a partir de los años 1960. Hay que reconocer esto. Sin embargo, ahora hay graves problemas para abordar esta cuestión. Con las herramientas básicas del capitalismo, no se puede construir el socialismo. Podemos ver claramente, por ejemplo, que los que se mueven en nombre del socialismo no han podido, sin duda alguna, superar el socialismo real. Nunca es posible adoptar una línea socialista adecuada mientras se adopten más enfoques de Estado-nación y de poder. De aquí viene el verdadero problema de la visión y la práctica de las fuerzas antisistémicas en Europa y América Latina.
Se aborda el tema como si la oposición al sistema fuera automáticamente anticapitalista. El anticapitalismo tiene su propio criterio. Así que hay países que representan el capitalismo y el imperialismo, y estos son enemigos. Esto lleva a la falacia de que romper con estos países es el enfoque básico y en sí mismo representa la libertad. Pero si miramos sus vidas, ellos mismos viven el capitalismo y el imperialismo. Viven en sus ciudades, bajo su poder, con su identidad y dentro de sus mercados. Así que viven el capitalismo de pies a cabeza todos los días y todavía piensan que su enfoque es liberal. Hay un error aquí. Sabemos que este es el verdadero problema del socialismo real. Creen que es posible crear el socialismo con los instrumentos básicos del capitalismo.
La mayoría de los movimientos críticos con el sistema cierran los ojos ante el hecho de que viven el capitalismo y el imperialismo en todos los aspectos, e incluso interiorizan su ideología y sus dogmas. Se engañan a sí mismos al estar en contra del imperialismo y el capitalismo sólo con retórica ideológica y dogmática. Por ejemplo, estos movimientos se hacen preguntas como “¿qué es el Medio Oriente? ¿Cuál es su situación histórica y sociológica? No investigue y siga emitiendo juicios. Esto es en realidad un gran peligro”.
Sin embargo, en primer lugar, deben pensar en el sistema imperialista global junto con sus subunidades, los estados nacionales. Es importante comprender que las contradicciones entre los estados no se derivan de fenómenos como la igualdad, la libertad y la justicia, sino que están relacionadas con la explotación y la hegemonía. Estas fuerzas no pueden posicionarse entre sí en un sentido ideológico. Ideológicamente, sólo las sociedades y los movimientos socialistas revolucionarios y los círculos sociales pueden oponerse a ellas.
El enfoque “¡Viva el imperialismo que no me toca!” no es correcto. Miremos a América Latina. No estoy discutiendo si América Latina es antiimperialista o no. No tenemos ninguna objeción a una línea que está liderando una lucha democrática contra el imperialismo. Pero hay una realidad que ha sido creada. Debemos verlo.
Debemos cuestionar cuán antiimperialista es el socialismo real en América Latina. Es antiamericano, claro. Pero el antiamericanismo no significa antiimperialismo. Los Estados Unidos son imperialistas y es posible adoptar una posición contra el imperialismo de Estados Unidos. Pero ser antiimperialista es otra cosa, ser antiimperialista significa asumir una posición contra el sistema mundial capitalista, el sistema mundial imperialista, la hegemonía global del imperialismo y contra los centros hegemónicos subordinados del imperialismo. Así que decir “Estoy en contra de los Estados Unidos” no expresa nada. Este es el punto en el que se encuentra América Latina. Se posiciona contra los Estados Unidos y ha logrado grandes éxitos en esta lucha, pero también mantiene relaciones con los centros hegemónicos relacionados con el imperialismo. Sin embargo, el capitalismo de Europa Occidental es también un imperialismo. Los revolucionarios latinoamericanos deben elevar el antiamericanismo a un nivel que incluya al imperialismo occidental en su conjunto. Se enfrentan a serios problemas debido a esto. Es ilógico decir que el imperialismo que no me toca puede prevalecer.
El antiamericanismo nunca ha ayudado a América Latina a ganar
El imperialismo es una corriente principal que se organiza en diferentes centros. No es posible derrotar a uno de estos centros sin estar en contra de todos ellos. En este sentido, el antiamericanismo nunca ha ayudado a América Latina a vencer, porque si no hay una transformación a un antiimperialismo consecuente, no se logra ninguna victoria. Por lo tanto, a pesar de su lucha contra los portugueses y los españoles, no pudieron liberarse de las relaciones de dependencia. Las guerras de guerrillas de los años 1960, que tuvieron lugar en nombre del socialismo real, no pudieron lograr el resultado deseado a pesar de la atmósfera que crearon a nivel mundial. Se debe cuestionar por qué no se logró. Sobre todo, se debe a los enfoques inadecuados.
Si lo concretamos, será más fácil de entender. Es importante ver a dónde los ha llevado el antiamericanismo. Hablamos de los centros hegemónicos subordinados del sistema imperialista mundial. El lugar de la dominación del Estado-nación y la hegemonía es al mismo tiempo una subunidad hegemónica del imperialismo. El colonialismo es una subunidad hegemónica de él. No se pueden pensar independientemente y separados del imperialismo. Cada centro, que se organiza como un Estado-nación dentro del sistema capitalista global, es también una subunidad imperialista. De nuevo, cada fuerza colonialista es una subunidad de la hegemonía imperialista. A través de ellos, el imperialismo se convierte en un sistema mundial. Si observamos el enfoque antiimperialista en América Latina, vemos que aceptan las fuerzas dentro del sistema mundial que están en contradicción y conflicto con los Estados Unidos en lugar de ser antiimperialistas, y quieren ganar impulso a través de las relaciones con ellas.
Al negar a los kurdos, han construido un Estado-nación
Veamos ejemplos concretos: la situación en el Kurdistán cuatripartito. El Kurdistán está dividido en cuatro partes según el orden establecido después de la Primera Guerra Mundial. Después de la Primera Guerra Mundial, se estableció un sistema mundial en el Medio Oriente en el que las fuerzas imperialistas dividieron el Kurdistán entre cuatro fuerzas colonialistas. No es el resultado de las acciones independientes de la República turca, Irán o los estados árabes; el sistema capitalista dividió al Kurdistán entre estos estados. Estos cuatro estados coloniales se formaron como estados nacionales por la financiación de los imperialistas. A través de la negación de los kurdos, estos estados coloniales se transformaron en estados-nación. Pero, de vez en cuando, han ido apareciendo contradicciones en esta fase de formación.
Con la visión de América Latina no se percibe esta realidad. No tratan al sistema imperialista como un todo. Si uno de los regímenes de Irán, Siria, Turquía o Irak entra en conflicto con los Estados Unidos, por alguna razón, entonces algunos piensan que estas fuerzas colonialistas son antiimperialistas. Por esta razón, no se ven los genocidios del Kurdistán de estos regímenes. Este punto de vista debe cambiar. El sistema estatal global en su conjunto es un sistema capitalista, imperialista y colonialista. Los conflictos dentro de este sistema no se pueden considerar de ninguna manera como antiimperialistas.
Por ejemplo, el actual gobierno de Turquía, a pesar de su carácter colonialista, fascista y fundamentalista, ha sido apoyado de vez en cuando como si fuera una fuerza antiimperialista debido a sus contradicciones con los Estados Unidos. Pero no se percibió la conexión de su carácter colonialista y el colonialismo contra los kurdos con el imperialismo. ¿Qué tan antiimperialista es esto realmente? Ya sea el nacionalismo, el fundamentalismo profundo o el estatismo en Turquía; todos ellos son un centro del sistema capitalista. Turquía es el aliado estratégico de los Estados Unidos y una de las mayores fuerzas militares. Entonces, ¿cuál es este enfoque de atribuirle una misión antiimperialista debido a las contradicciones con los Estados Unidos? Es un enfoque capitalista-liberal que se define a sí mismo dentro del sistema gobernante.
El enfoque de los partidos Baath es también el mismo. En un tiempo, los partidos Baath eran los favoritos de los movimientos revolucionarios de América Latina. Todo el mundo sabe que los partidos Baath son las formas más rotas e imperialistas del nacionalismo y el estatismo árabes. Es una catástrofe que se les considere antiimperialistas, porque tenían una estrecha relación con el bloque soviético y, de vez en cuando, contradicciones con los Estados Unidos y hostilidad hacia Israel. Los regímenes del Baath son conocidos por sus atrocidades contra las sociedades árabes y todos los pueblos de la región.
Lo mismo se aplica a Irán. Irán está gobernado por un régimen fundamentalista que se basa en una concepción del Islam. Su estructura actual no está separada del sistema capitalista, sino que mantiene estrechas relaciones con el imperialismo. Debido a los conflictos con los Estados Unidos, entender a Irán como antiimperialista y construir relaciones con él nos muestra la problemática situación del antiimperialismo en América Latina. Si miramos la fase reciente, esto se concreta aún más. Si observamos los enfoques de los gobiernos de izquierda en América Latina, lo anterior es fácil de entender. Mira a Cuba, Venezuela y otros países latinoamericanos, donde hay gobiernos de izquierda. Alaban las subunidades hegemónicas del imperialismo en el Medio Oriente y Asia, sólo porque tienen una actitud antiamericana. Esto es una grave falacia.
Me gustaría enfatizar de nuevo que el antiamericanismo no es lo mismo que el antiimperialismo. El antiamericanismo significa estar contra de un centro del imperialismo. Pero el antiamericanismo en sí mismo significa legitimar de manera encubierta a las otras fuerzas colonialistas e imperialistas. Por lo tanto, se necesita un paradigma muy profundo para ver el sistema capitalista global y su hegemonía imperialista. Al presentar este punto de vista paradigmático, debemos liberarnos de partir pragmáticamente de las situaciones actuales como nuestro propio punto de partida. Se necesita una visión global. Desde este punto de vista, es necesario seguir y analizar bien quién es realmente una ramificación de la hegemonía imperialista y quién está luchando contra ella. En este momento, tanto los movimientos antisistémicos como los círculos de América Latina, que representan una profunda tradición de libertad, tienen planteamientos erróneos. Estos enfoques erróneos deben ser superados.
El Secretario de Defensa de Estados Unidos se reunió con el primer ministro turco Binali Yıldırım en Londres, antes de la ofensiva en Raqqa. Después de esta reunión, hubo una declaración de los Estados Unidos diciendo que las YPG no eran una elección sino una necesidad. ¿Cree usted que se trata de palabras para disipar las dudas de la parte turca o de un resumen sorprendente de la política de las fuerzas imperialistas y colonialistas en general, y de la política estadounidense en particular? La frase que el Secretario de Defensa de los Estados Unidos pronunció antes de la ofensiva de Raqqa es muy importante. Esto es algo que estoy tratando de explicar. Lo expresó muy bien en una frase. No es una elección de los Estados Unidos, sino una necesidad. Porque no queda ninguna fuerza en Siria con la que los Estados Unidos no hayan tratado de formar una alianza. Hacer una lista de todos ellos haría estallar esta entrevista, así que no entraré en detalles.
-¿Con qué fuerzas ha tratado Estados Unidos de formar una alianza?
-Lo ha intentado con los saudíes, Turquía y todos los grupos de salafistas que están vinculados a estos dos países. Lo ha intentado con la FSA (Ejército Libre Sirio) y fuerzas similares. Así que no queda ninguna fuerza con la que no lo haya intentado. Pero con ninguno de ellos pudo lograr los resultados deseados. Invirtió mucho en las alianzas con Turquía, Arabia Saudí y Qatar, pero al final se enfrentó a ellos. Incluyendo el Frente de Al Nusra y el ISIS, no queda ninguna fuerza salafista o de oposición con la que los Estados Unidos no hayan establecido una relación. Todas fueron infructuosas. Mientras tanto, el movimiento kurdo no fue apoyado ni un poco y su existencia ni siquiera fue pronunciada.
La lucha por la libertad de los kurdos fue sacrificada a los saudíes y al colonialismo turco. También se tuvo en cuenta la situación del régimen y con la idea de una relación estatal a largo plazo, la lucha por la libertad también se sacrificó al régimen. Había la creencia de que las fuerzas salafistas podían ser tomadas bajo control y que se podía lograr un resultado. Pero el cálculo no funcionó. Las inversiones en las fuerzas salafistas se convirtieron en un bumerán y crearon un Medio Oriente aún más religioso y salafista. La política de los Estados Unidos fracasó al final. Incluso Turquía, como aliado estratégico de 40 a 50 años de edad, ha abandonado la línea de la OTAN y la occidental, y se ha pasado a una línea salafista y otomana a través del ISIS y el Frente de Al Nusra. Todo esto ha puesto una gran presión sobre los Estados Unidos.
Por otro lado, ha reforzado la línea nacionalista kurda. Ha dado un apoyo ilimitado al PDK (Partido Democrático de Kurdistán) en el Kurdistán del Sur (Bashur, norte de Irak), que representa un Estado federal. Pero los mismos problemas y resultados también se han producido en sus inversiones con el PDK. Por un lado, la línea del PDK ha negociado acuerdos con el ISIS bajo mano y, por otro lado, ha entrado en una alianza estratégica con Turquía. De esta manera, han hecho que las inversiones de los Estados Unidos en la región se queden en nada. Como resultado, los Estados Unidos no se pudieron establecer en el Kurdistán del Sur o en Rojava. Los muros sobre los que querían construir se habían derrumbado. Esto llevó a una situación caótica. Los Estados Unidos, en realidad, no tenían a nadie, pero sí fuerzas realmente fuertes en las que podían confiar. Irak cayó en manos de Irán; la línea del PDK en manos de Turquía; grupos como Al Nusra, el ISIS, Ahrar Al Sham, han caído en manos de los saudíes y los turcos. Además, estos grupos habían cometido graves delitos contra los derechos humanos, por lo que la cooperación con ellos difícilmente podía justificarse. En cualquier caso, el régimen de Siria no tenía un futuro prometedor. Por lo tanto, los Estados Unidos se apoyaron en una gran variedad de actores y terminaron fracasando. No había ninguna fuerza seria en el Medio Oriente en la que pudieran confiar.
La resistencia kurda, especialmente la de Cizîrê y Kobanê, ha creado una nueva situación. Por lo tanto, los Estados Unidos se han visto obligados a establecer relaciones con fuerzas que no querían apoyar y para cuya represión incluso apoyan concretamente a Turquía y a Arabia Saudí. Nadie quiere verlo. ¿Hubo alguna llamada de las YPG y del PYD a los Estados Unidos, como “nos matan, vengan y ayúdennos, nos rendiremos a ustedes por esto”? No. Aunque no hubo tal discurso, los Estados Unidos tuvieron que intervenir y establecer una relación táctica con estas fuerzas.
Los Estados Unidos no tenían otra opción en esa situación. Además, los Estados Unidos querían reclamar una parte de la exitosa lucha contra el ISIS. Mientras que esta relación le dio a los Estados Unidos mucho prestigio, las YPG obtuvieron los recursos materiales que necesitaban para su lucha por la libertad. Los Estados Unidos han ganado prestigio en el público internacional y americano en la lucha contra el ISIS en Kobanê. Con las relaciones tácticas, se han abierto espacios para ellos mismos. La parte oriental del Éufrates es ahora una zona que se ha ganado más a través de una lucha por la libertad. Los Estados Unidos, por otra parte, han creado legitimidad para su propia presencia a través de las relaciones tácticas y el apoyo, y han encontrado una manera de restablecerse en el Medio Oriente. Pero una cosa debe ser entendida correctamente.
La presencia de los Estados Unidos en Siria no sólo está limitada por la situación en este país. No se trata de explotar el norte de Siria y lograr grandes resultados materiales. Después de todo, es difícil lograr muchos beneficios materiales en una Siria destruida. Lo esencial para los Estados Unidos es ser una hegemonía mundial en el Medio Oriente y controlar los acontecimientos, pero sólo pueden hacerlo si están presentes en el área. En este sentido, esta relación es extremadamente importante para los Estados Unidos, y está claro que no digerirán fácilmente la hegemonía de una línea socialista en el norte de Siria. Por lo tanto, aparte de las relaciones, también hay una lucha muy seria entre las dos partes.
Un nuevo mundo y un nuevo Medio Oriente están surgiendo
Los Estados Unidos están llevando a cabo una política con el objetivo de hacer predominar la línea nacionalista dentro de los kurdos. Están alimentando la podrida y continuamente derrotada línea nacionalista y estatista del PDK para destruir la línea libre en Rojava. Turquía se utiliza como elemento de opresión contra los kurdos en Rojava. Al apoyar a Turquía contra el PKK, en realidad están tratando de debilitar el efecto de la línea de Abdullah Öcalan en Rojava. En resumen, el mensaje se transmite: “Mientras no te distancies de la línea del PKK, no habrá paz para ti”. Esta es una política de alejar la revolución de la Rojava de la línea socialista y de integrarla en el sistema mundial liberal. Esta relación continuará hasta cierto punto. Pero los nuevos acontecimientos políticos siempre pueden crear nuevas situaciones. Esta no es una situación muy deseable para los Estados Unidos. Lo mismo se aplica a las fuerzas del norte de Siria. Hay una necesidad en ambos lados. Los Estados Unidos se ven obligados a hacerlo por las políticas de sus aliados en el Medio Oriente.
Pero el problema no sólo está relacionado con las políticas; ni los Estados Unidos ni sus aliados son capaces de lograr nada en el Medio Oriente con su antiguo enfoque y objetivos políticos. Está surgiendo un nuevo mundo y un nuevo Medio Oriente. Seguir insistiendo en lo antiguo no significa nada más que tratar de nadar contra la corriente. Pero incluso si los Estados Unidos son aún más flexibles, no podrán hacer un cambio de política más radical. Por eso, está tratando de marcar el rumbo a sus aliados como Turquía y Arabia Saudí. Pero las cosas no se están desarrollando de acuerdo a sus intereses. Por mucho que los Estados Unidos vean la situación como táctica, deben darse cuenta de que sin sus aliados kurdos estarían solos. Dado que no tienen otra fuerza que los aliados para asegurar su presencia en la región, es extremadamente improbable que entren en conflicto con sus aliados tácticos en un futuro próximo.
Tanto la política de las potencias regionales como el enfoque de Turquía prácticamente obligan a los Estados Unidos a hacerlo. Por lo tanto, la situación actual no es una cuestión de elección para las YPG o los Estados Unidos, sino una cuestión de necesidad. Pero, por supuesto, también debe evaluarse cómo se ha producido esta necesidad.
Son los centros locales, la política de los colaboradores e incluso la política de los propios Estados Unidos lo que ha colapsado las políticas fallidas del imperialismo estadounidense en el Medio Oriente. Sus políticas les han llevado a un círculo vicioso y condenado a la liquidación en la región. Conscientes de esto, tendrán que retirarse como en Vietnam o se verán forzados a entrar en una relación inesperada. Para una hegemonía mundial, una retirada equivaldría a una rendición, y como no es una opción, tendrán que entrar en una relación inesperada. Pero una situación similar se aplica al PYD. Si la lucha por la libertad de los kurdos a nivel mundial hubiera sido entendida correctamente por las fuerzas antisistémicas y antiimperialistas, hoy en día la línea de la libertad sería mucho más genuina, visible y diez veces más dominante.
Pero debido a que todo el mundo aborda el asunto de manera tímida y escéptica, aislándose y no tomando ninguna iniciativa, porque nadie entiende que aquí la existencia es al mismo tiempo un enfoque ideológico, liberal, estos problemas han surgido. Para mantenerse en pie en el infierno del Medio Oriente, era necesario, por tanto, establecer alianzas tácticas. ¿A qué situación se parece esto? Se asemeja a los acuerdos con los capitalistas que Lenin hizo para mantener viva la Revolución de Octubre. Es similar a la situación cuando Stalin luchó contra el fascismo sin querer en el mismo frente que los imperialistas.
-Dijeron que Estados Unidos se enfrenta a un colapso en el Medio Oriente. ¿Se puede decir que los Estados Unidos están usando los resultados de la resistencia de Kobanê para afirmarse políticamente desde lo nuevo y para imponerse? ¿La resistencia le ha dado a los Estados Unidos, que se están derrumbando, una nueva oportunidad de intervenir en el área?
-Los Estados Unidos han llegado a este punto debido a su política fallida. Pero tampoco se debe pasar por alto la sentencia de muerte para los que luchan por la libertad. ¿Quién dictó la sentencia de muerte? Todos, excepto los kurdos que resisten. ¿Cómo deberían haberse mantenido en pie las fuerzas de la libertad, con sus limitadas posibilidades? Esto también se debe considerar. Podríamos decidir entre pasar a la historia como heroicos perdedores con una resistencia integral, o ganar en esta situación a través de la política y la estrategia. Por eso di el ejemplo de Stalin.
ISIS no es una fuerza salafista cualquiera
El ISIS ha llevado a cabo un ataque estratégico contra los kurdos. Se debe cuestionar esta grave situación. Pensemos en lo siguiente: ¿por qué el ISIS, en una posición tan fuerte que nadie podía detenerla en el Medio Oriente -donde ocupó casi el 60 por ciento de Irak en una noche y pudo haber derrocado los regímenes sirio e iraquí- no completó esta ofensiva? ¿Por qué inició un ataque estratégico contra el Kurdistán, especialmente contra Cizîrê y Kobanê? Si el ISIS se hubiera vuelto contra los estados sirio e iraquí, ambos estados habrían caído en sus manos en una noche. Hay ejemplos de esto. Estamos hablando de un ISIS que hizo de Raqqa su capital en una noche, derrocando a Mosul, aplastando ejércitos de cientos de miles y alcanzando una gran repercusión.
Cabe señalar que estas novedades no se limitan a la influencia del ISIS. Los estados del Golfo y Jordania estaban incluso dispuestos a huir y capitular cuando escucharon el nombre del ISIS. Sin embargo, el ISIS paró sus ataques contra estos regímenes y se volvió contra los kurdos y Rojava. Y esta es la prueba de que el ISIS no es una fuerza salafista cualquiera. Ha surgido y actúa en consecuencia con las relaciones de las fuerzas hegemónicas mundiales y regionales, y sus relaciones estratégicas y tácticas.
Cuando faltaba poco para la victoria final del ISIS, se volvió contra los kurdos. Todas las fuerzas reaccionarias regionales y globales se lanzaron sobre los kurdos. Destacan dos centros en este ataque tan brutal: Şhengal y Kobanê. Estos puntos significan la liquidación de los kurdos y de la línea política libre. La reacción regional ha declarado una fetwa contra nuestro movimiento de libertad y contra los kurdos.
Porque en el Medio Oriente, los kurdos se identifican con la democracia y la libertad. El PKK se ha identificado con ambos. La liquidación del PKK significa tanto la destrucción de la línea de libertad socialista como la destrucción de los kurdos. Por lo tanto, fue precisamente en este momento en el Medio Oriente que la fuerza ideológica más atrasada fue tomada como base y atacó a los kurdos. Los éxitos en ambos lugares son un éxito para nuestro movimiento de libertad y los kurdos.
Si los kurdos quieren sobrevivir, se ven obligados a resistir. Si también quieren que la línea socialista tenga éxito, se ven obligados a luchar. Por lo tanto, el PKK y las YPG han hecho todo lo posible, era una lucha por la existencia y la libertad. Ganarían y se impondrían, o perderían y se hundirían. La lucha y los éxitos en ambos lugares -Şhengal y Kobanê- han hecho de la identidad kurda una identidad básica en el mundo.
¿Existe una fuerza en el Medio Oriente y a nivel mundial que haya sido consistente y exitosa en la lucha contra el ISIS? ¿Se puede decir que Irak, Irán, Siria o los Estados Unidos habrían ganado? Por supuesto que no. Todos ellos no tienen ninguna característica especial propia, excepto beneficiarse de los éxitos de otras luchas y resistencias.
Sólo hay una línea que ha luchado y ganado radicalmente al ISIS y es la línea del PKK y su liderazgo, y versiones de la línea del PKK en el Medio Oriente. ¿Qué es eso en Kobanê? Es la expresión de la línea de liderazgo en las YPG. Los kurdos realmente han derrotado al ISIS en Kobanê. En Kobanê, el ISIS ha tenido una ruptura. Allí, el ISIS había movilizado toda su fuerza, y o bien hubiera derribado a Kobanê y así extinguido a los kurdos y la libertad, o su derrota hubiera sido su fin. ¿Qué pasó al final? Los vencedores de Kobanê se convirtieron en una gran fuerza en el Medio Oriente. Los derrotados fueron liquidados.
Después de la victoria en Kobanê, nadie pudo detener la retirada del ISIS. Hubo una serie de victorias un mes después de la caída de Kobanê, en Til Ebyad, diez días después en las montañas de Abduleziz, luego en Hesekê y Eynıl İsa, y finalmente en Raqqa y Deir Ezzor hasta la frontera de Jordania. Lo mismo también en el Irak. No debemos dejarnos engañar por el poder de publicidad y propaganda de las infladas fuerzas imperialistas globales. Cuando el ISIS avanzó en Irak, como un Estado con tan ricos recursos, Irak no pudo resistir al ISIS durante una hora. El ISIS cruzó la frontera de Siria y se llevó a Mosul.
Desde Mosul, el ISIS llegó a la frontera de Irán en dos días, a las puertas de Bagdad. Del otro lado, estaba en la frontera con Jordania. En total le llevó de tres a cinco días. Ninguna fuerza podía detenerlo. Ni la coalición internacional liderada por los Estados Unidos, ni las fuerzas hegemónicas regionales, ni Irán pudieron detenerlo. Aunque Irán se alió con las fuerzas de Hezbollah y desplegó sus unidades Al Quds, no pudo detener al ISIS.
El ISIS se detuvo en Şhengal y se derrumbó en Kobanê
El ISIS fue detenido en Şhengal y se derrumbó en Kobanê. Şhengal sufrió una gran masacre. Desde el momento en que el ISIS inició la masacre de los yezidíes, el nacionalismo kurdo desarmó al pueblo y huyó; las unidades Pehşmerga del PDK se retiraron, dejaron a la población indefensa y permitieron el genocidio de los yezidíes a partir del 3 de agosto de 2014. Gran parte de la sociedad kurda ve la retirada como una traición del PDK. Se entregó el pueblo a las masacres. Hasta que las guerrillas del PKK llegaron de las montañas y las fuerzas de las YPG de Rojava, decenas de miles de personas fueron asesinadas. Pero cuando estas dos fuerzas llegaron, las masacres se detuvieron. Como resultado, el ISIS fue retrocediendo. Si hubiéramos perdido en estas zonas, los kurdos no existirían hoy en día. Y esto sería, en última instancia, resultado de la situación en la que quedaron los kurdos por la política del sistema mundial después de la Primera Guerra Mundial.
Además, habría sido un punto en el que habría ganado el Estado-nación, los enfoques nacionalistas y religiosos de la región, y el carácter asesino. Pero esto no sucedió. Los kurdos se unieron por su identidad étnica y cultural, y lucharon en estos dos lugares. La línea socialista y liberal de 40 años del movimiento del PKK también debía ser eliminada. Básicamente, el kurdo se ha fusionado con la línea de la democracia, la libertad y el socialismo. Esta es la línea que lleva a los kurdos a la victoria. A través de la lucha de los kurdos y las demás fuerzas revolucionarias de Rojava, la identidad e ideología socialista, que debía ser pisoteada tras el colapso del socialismo real, ha adquirido un nuevo valor y reputación.
Si Kobanê hubiera caído o la masacre de Şhengal se hubiera completado, la línea de la libertad ya no tendría ningún valor. Por lo tanto, la línea de la libertad ha librado una lucha por la existencia. O bien se las arreglaba para ser una luz que prometiera libertad al mundo, o se hundiría y desaparecería de la escena. Fue una situación difícil y de mucho sacrificio. Se llegó a la victoria en ambos lugares, lo que allanó el camino a la libertad. Se abrió el camino para la identidad étnica y cultural de los kurdos. Si hoy en día en muchos lugares la gente trata de hacer política sobre los kurdos, es por esto. No puede haber una estrategia kurda que niegue estos dos lugares. La falta de carácter que lleva a la derrota es evidente en aquellos que la rechazan y defienden al kurdo. Pero aquellos que entienden la profundidad y la dignidad de estas dos victorias pueden mantenerse firmes en ello.
¿Hay una conexión entre las relaciones que está desarrollando con los Estados Unidos, Rusia y otras fuerzas regionales, y el cambio de paradigma del PKK? Como el PKK, ¿habrían entrado en tales relaciones si su paradigma no hubiera cambiado? Esto es interpretado por muchos círculos de tal manera que el PKK se habría separado de la lucha socialista.
¿El PKK se ha alejado del socialismo con el cambio de paradigma?
El movimiento del PKK ha sido un movimiento socialista desde sus inicios. Pero si nos fijamos en la época y las condiciones históricas en las que se formó el PKK, éste tuvo muchas influencias del socialismo real de esa época. Paralelamente, tenía influencias de los movimientos de liberación nacional, especialmente las guerras de guerrillas de Vietnam y América Latina, los movimientos de liberación nacional de África y la revolución china. En este sentido, surgió como un movimiento socialista y de liberación nacional. Pero si miramos las condiciones globales y la hegemonía ideológica, vemos que es más bien un movimiento que se formó bajo la influencia del socialismo real. Desde su fundación y durante mucho tiempo, el PKK ha estado liderando una lucha de liberación nacional sobre la base de estas cualidades.
Pero el colapso del bloque oriental y la integración sucesiva de los movimientos de liberación nacional en forma de estados-nación en el sistema capitalista mundial, han abierto el camino para cuestionar las propias ideas. Se cuestionaron tanto el socialismo real como la liberación nacional. El declive del socialismo real y la integración de los movimientos de liberación nacional en el sistema mundial capitalista, han llevado al colapso de una multitud de corrientes liberales. Ha surgido una situación de derrota. El movimiento del PKK también ha experimentado el dolor de esa fase, pero también se ha enfrentado a una represión y a ataques que ningún otro movimiento socialista y de liberación nacional ha experimentado. El primer paso de la intervención del sistema imperialista en el Medio Oriente fue una operación específica contra el PKK. Una conspiración contra nuestro liderazgo, que llamamos una conspiración internacional, que tenía como objetivo dejar al PKK sin cabeza y sin ideología, tomando a nuestro liderazgo como rehén.
Esta fue, por supuesto, una situación importante para el PKK. Si el PKK no ha sido aplastado por esta ofensiva del imperialismo, es debido a una peculiaridad que el PKK tiene a diferencia de otros movimientos de liberación nacional y socialistas reales. Aunque el PKK también tuvo intensas influencias socialistas reales en su fundación, sus propias peculiaridades siempre pesaron mucho. Esto no sólo fue ideológico, sino también organizativo. El pensamiento de las comunidades religiosas históricas del Medio Oriente y su comprensión de la organización aseguraron que el PKK se mantuviera en pie, a pesar del colapso del socialismo real y la subsiguiente toma de rehenes de los líderes. Esta es la base que la dirección del PKK ha establecido personalmente. El secuestro de nuestro liderazgo ha creado una nueva situación. En todo caso, se buscaron seriamente salidas ideológicas y políticas incluso antes del secuestro. El énfasis en la liberación de la mujer y el cese del fuego como búsqueda de una solución democrática subrayan esta búsqueda. El secuestro fue, en todos los aspectos, una ocasión para nuevos comienzos. Lo que llamamos un cambio de paradigma ha surgido en este punto.
Es un problema grave que en lugar de cuestionar un socialismo real colapsado y hacer un nuevo avance en nombre de los pueblos y círculos sociales oprimidos, se cuestione a los que buscan una salida al colapso. Con esto, no queremos decir que se cuestione o se entienda este avance, sino que el socialismo real colapsado se sigue tomando como base, se sigue considerando socialismo. Sobre la base del socialismo real, no se pueden evaluar adecuadamente nuevas salidas para el socialismo, ni se puede construir el socialismo real. El cambio de paradigma del PKK no significa en su núcleo un alejamiento del socialismo. Me gustaría enfatizar eso. Más bien, el cambio de paradigma es una crítica a las opiniones ideológicas, filosóficas y políticas del socialismo real. Sobre esta base, el PKK pretende reconstruir y completar el socialismo sobre una base más libre, más justa y más democrática. Por lo tanto, el PKK no se ha alejado en absoluto del socialismo.
Por el contrario, se está construyendo una nueva comprensión del socialismo sobre la base de una crítica integral del socialismo real y de los anteriores movimientos antisistémicos. Los términos utilizados en este entendimiento son términos que se desarrollaron sobre la base de una crítica del socialismo real. Estos deben ser vistos como conceptos liberales, iguales y democráticos del nuevo socialismo. La actual guerra en el Medio Oriente y las relaciones basadas en ella, no pueden explicarse sólo por una situación ideológica. Es más una necesidad derivada de la situación política. El PKK, con la vieja línea socialista real, habría dirigido la lucha de esta manera. Lo hizo de todas formas. Pero con la fuerza y la confianza que se desarrolló con el cambio de paradigma, fue capaz de lograr una posición aún más ventajosa para hacer frente a la crisis en el Medio Oriente. Sin este cambio de paradigma, podría haber sido capaz de resistir y luchar, pero no habría tenido la oportunidad de lograr tantos éxitos. Con la confianza obtenida del cambio de paradigma, ha ganado la ventaja de lograr resultados aún más serios.
-En la terminología que usan, además de socialismo, aparecen más términos como democracia, nación democrática, liberación de la mujer, medio ambiente y ecología. ¿Añade nuevos significados a estos que van más allá de los significados tradicionales? ¿Utiliza estos términos en lugar del término socialismo? ¿O los ve como conceptos relacionados con el contenido del concepto de socialismo?
-Términos como democracia, nación democrática, liberación de la mujer o ecología no contradicen el socialismo. Así que el socialismo como concepto general permanece. Deben entenderse como conceptos que llenan de contenido al socialismo. Voy a responder a algunas de las preguntas de forma individual: hay una distorsión en el concepto de democracia desde un punto de vista liberal, capitalista y socialista real. El concepto de democracia está distorsionado. ¿Qué tratan de expresar los que están en el poder con el concepto de democracia? Es una forma de gobernar el Estado. Es un gran error y una equivocación ver la democracia de esa manera. Nunca es posible unir el Estado y la democracia. La democracia puede concebirse más bien como un modelo de autogobierno de las sociedades preestatales.
¿Cómo se gestionaban las sociedades antes de la aparición de la civilización, cuando no tenían necesidad del Estado? Las sociedades tenían sus propios autogobiernos. Pero estos autogobiernos no se basaban en ninguna explotación, represión u ocupación. Era más bien una forma democrática de gobernar. El campo de la democracia debe explicarse más en términos de tal liderazgo. La comprensión liberal de la historia ha negado la época en que la sociedad se administraba democráticamente. La democracia se presentó a las sociedades como un invento de la civilización. Las estructuras de clase, urbanas y estatales de la civilización han utilizado literalmente el concepto de democracia como camuflaje para cubrir su explotación y dominación de la sociedad. Así que es una distorsión.
En cualquier caso, no se puede esperar que el Estado o la forma en que se gobierna cualquier clase, sea democrática. Esto es un engaño. Así que si tomamos el socialismo como una base en el sentido más verdadero, entonces concebimos una comprensión de liderazgo del socialismo. Hay términos que se atribuyen a la forma en que se conduce el socialismo real. Los marxistas usan el concepto de la dictadura del proletariado. También utilizan el Estado como concepto principal de la literatura socialista. Prevén una forma de Estado basada en la dominación de una clase.
Concebían la democracia como una forma de administración estatal. Así, distorsionan el concepto de democracia, que como forma de autogestión ha dejado su huella en la historia de la humanidad durante un largo período de tiempo, de tal manera que la declaran como un sistema administrativo del Estado. Esta es una situación muy problemática. Si declaramos que somos socialistas y expresamos el socialismo con igualdad y libertad, entonces debemos, en primer lugar, expresar y concebir el concepto rector del socialismo como una expresión de libertad. No es muy difícil sacar esto de la historia social y utilizarlo.
Esto puede hacerse desde la vida igualitaria y libre de las sociedades, que aún continúan a pesar de las condiciones capitalistas e imperialistas. Muchos de los significados atribuidos hoy en día al concepto contemporáneo de democracia son en realidad características de la vida comunitaria de la sociedad natural, y por lo tanto tienen miles de años de antigüedad. Por lo tanto, el concepto de democracia puede ser utilizado como un concepto contemporáneo de la gestión equitativa y libre de la sociedad natural. En este sentido, usamos el término con frecuencia. Si lo expreso más claramente, usamos el concepto de democracia como una forma de guiar nuestro entendimiento socialista. No es un concepto de democracia que esté orientado hacia el Estado.
Utilizamos un concepto de democracia en el sentido de autogobierno social. Por eso, no hay que tomarlo con la idea de que es algo distinto del socialismo o de un alejamiento de él, sino todo lo contrario: se le da un sentido y un sistema al socialismo. Esto también se aplica a los demás conceptos. Hasta que no criticamos el socialismo real, no podríamos haber puesto al socialismo en una situación que valiera la pena vivir en el sentido más verdadero.
Por ejemplo, la ecología también es importante. Ya sea en el enfoque del sistema mundial capitalista o en uno socialista: la relación entre la naturaleza y la sociedad es realmente problemática. A través del industrialismo y su ley de la ganancia, el capitalismo ha hecho que el mundo no sea amigable con la vida. Mientras que el planeta se está volviendo cada vez más hostil a la vida, la existencia de la humanidad también está amenazada. Utilizar el concepto de socialismo utópico con libertad e igualdad abstracta en una situación tan amenazante no expresa mucho en un mundo colapsado. Así que el socialismo también debe tener un enfoque para salvar al mundo y a la humanidad. Así que necesita un enfoque ideológico para prevenir el daño ecológico en el mundo causado por el capitalismo. No existe tal cosa en el socialismo real. En cuanto al capitalismo, el discurso general es que la naturaleza y el medio ambiente son explotados.
Pero el socialismo real, con sus enfoques industrial y de Estado-nación, no puede liberarse de ser parte de esta destrucción ecológica. Además, el concepto de ecología tampoco se basa en un fundamento ideológico al no expresar adecuadamente su conexión con la sociedad en términos ideológicos. Esta es también una situación muy seria. Los enfoques ideológicos del socialismo real son problemáticos. Una industria ilimitada, identificar el desarrollo con la industria y ver al hombre como el gobernante de la naturaleza, son graves problemas ideológicos. Un socialismo sin ecología es impensable. Dejemos el socialismo sin ecología, ni siquiera una vida sin ecología es concebible. Si se establece la conexión del socialismo con la vida, su conexión con la ecología se entenderá aún mejor.
Si ahora miramos todo esto juntos, los enfoques poco entusiastas e inadecuados del socialismo real a los problemas de la construcción del socialismo, salen a la luz. Las brechas filosóficas, ideológicas y políticas que jugaron un papel en la liquidación del socialismo real se hacen evidentes. Con su cambio de paradigma, el PKK está abordando estos problemas, creando respuestas y reconstruyendo el socialismo con una ciencia social más desarrollada y verdadera.
Esto no es una separación del socialismo. Es una muy buena evaluación del socialismo real colapsado y derrotado, y se utiliza un enfoque paradigmático para expresar el socialismo. Por lo tanto, las fuerzas antiimperialistas, los movimientos socialistas, libertarios y antisistémicos de todo el mundo no tendrán ninguna oportunidad de desarrollarse si no se consideran sobre esta base. Así, los que también han caído con el derrocamiento del socialismo real han vinculado su destino a hechos falsos. Esto se debe ver correctamente. Pero debido a que un movimiento como el PKK, que también tuvo problemas con el socialismo real en el pasado, abordó y criticó todo esto de la manera correcta, fue capaz de mantenerse firme a pesar de que todo el mundo estaba en contra. Desarrolló su existencia y su fuerza no por separarse del socialismo, sino por la filosofía, la ideología y la vida misma del socialismo. Como resultado, se convirtió en una fuerza política e ideológica seria en el Medio Oriente.
-El imperialismo de nuestro tiempo quiere crear un nuevo sistema mundial que supere el actual sistema de Estado-nación, e incluso la identidad nacional. Puede que no se exprese con frecuencia, pero se trata de algo que supera la categoría de nación como un nuevo gobierno mundial o un nuevo Estado global. ¿Es el concepto de la nación democrática un nuevo enfoque del movimiento socialista para reunificar las sociedades del mundo contra los conceptos del imperialismo?
-La fórmula social en la que se basa el capitalismo es el Estado nacional. Cuando hablamos de Estado nacional, me viene a la mente una forma capitalista. Es decir, el establecimiento de un sistema de dominación sobre la categoría de la nación, que es una forma social. Esta forma se transforma completamente por el monopolio capitalista en un área de explotación y violencia. El problema básico es que la categoría muy flexible y porosa de la nación se transforma por la mano del Estado. Durante esta transformación, se intenta homogeneizar la sociedad. Esto significa que todas las diferentes cualidades sociales y culturales de la sociedad están literalmente expuestas al genocidio. Así, se crea un problema fundamental en el sentido de que la nación es capitalista y se convierte en un instrumento de gobierno estatal. Aquí yace el principal problema del socialismo real. Es el error más grande pensar que la libertad se puede ganar con las herramientas y argumentos centrales del capitalismo.
Además, un problema central del socialismo real es que no tiene un análisis profundo de fenómenos como el Estado y la nación, mientras que formula el paradigma socialista contra el capitalismo. La nación, en lugar de ser tratada como un fenómeno cultural, es tratada más bien como un fenómeno étnico incontestable. El Estado es considerado como el hogar indispensable para toda nación. No se ha explicado suficientemente la conexión del Estado y la construcción étnica de una nación con la explotación del sistema capitalista. Esto se hizo aún más claro con el colapso del socialismo real. Así que fue un gran error conectar la libertad con el Estado y llevar la forma social al modelo de Estado-nación. El verdadero modelo socialista intentó esto durante 70 u 80 años. Al final, no pudo salvarse de convertirse en parte del sistema mundial capitalista.
Si realmente miramos más de cerca, entonces es imposible poner el sistema del Estado nacional del lado de la libertad. El sistema estatal es un sistema político hostil a la libertad. Ninguna libertad puede salir del Estado. La nación, por otro lado, es una forma delimitada que lleva en sí misma identidades sociales, étnicas y religiosas muy diferentes. Debido a que el concepto de nación tiene tanto contenido, no puede tolerar la singularidad. Mientras que en el sistema de Estado-nación el Estado es un medio de explotación y dominación, la nación se convierte en un sistema monista basado en una estructura ideológica étnica y religiosa. Por lo tanto, se basa en la asimilación y la desaparición de las diferencias y riquezas sociales. Este modelo es necesario para la continuación de la explotación. El capitalismo se mantiene vivo con él.
Con el gobierno del Estado y la singularidad de la nación se establece un régimen asesino. Cuando el socialismo real apareció como una alternativa, no pudo superar el sistema del Estado-nación y su paradigma. Con sus conceptos, se acercó al capitalismo como si fuera una copia mejor. Así que estos conceptos son problemáticos. Ninguna identidad socialista puede desarrollarse sin reevaluar el concepto de Estado-nación y desarrollar una alternativa real al mismo. Cuando cuestionamos el concepto de Estado y declaramos que nosotros mismos no queremos un Estado, todos se sorprenden. Tanto los que se acercan al concepto de manera étnico-nacionalista como los socialistas. Los nacionalistas étnicos se enojan con nosotros porque estamos en contra del Estado que ellos creen que necesitan como medio para poner su propia identidad étnica en la cima del poder. Y los socialistas reales creen que pueden resolver el problema de la libertad y la igualdad con la ayuda del Estado. Nuestro rechazo al Estado se entiende como un rechazo al socialismo y a la nación.
Aunque el Estado es en realidad una institución que destruye ambas cosas. Ningún socialista puede expresarse políticamente a través del Estado. El Estado es básicamente un enemigo de la libertad y la igualdad. El Estado nunca puede reconciliarse con la libertad. Por lo tanto, el Estado como fenómeno debe ser dejado de lado. En nuestro paradigma, hemos dado al Estado una muy buena calificación y lo presentamos como una debilidad del socialismo real. Los fenómenos de nación y Estado deben ser separados. La nación puede ser aceptada como una forma social si está separada del Estado. No debe ser la base de la nación. Por lo tanto, la definición de la nación es importante y debe ser particularmente bien entendida.
El Medio Oriente puede ser construido con la nación democrática de la nueva
La nación es una forma social. Pero dentro de esta forma hablamos de una sociedad rica en cultura, fe e ideas. La sociedad es diversa y surge de una unidad de diversidad. La nación puede definirse como un denominador común, en el que las diferencias se unen relacionándose entre sí. Por lo tanto, la nación no puede definirse en principio rechazando las diferencias y basándose únicamente en una única identidad étnica, creencia o ideología. Esto significaría la destrucción de todas las diferencias. Esto no es libertad, es fascismo. Por eso, la sociedad debe ser definida y construida sin comprometer la estructura democrática en su esencia. La nación democrática es la forma en que la sociedad con su diversidad ha sido reconocida y, como resultado, ha sido construida democráticamente. La nación democrática es el verdadero origen del proceso de construcción de la nación.
Cualquier construcción social no democrática y proceso de formación de unidades sociales es problemática y no corresponde a la naturaleza liberal de la sociedad. Es por eso que la violencia y los conflictos surgen constantemente. Todas las entidades sociales que forman la nación pueden mantenerse unidas sin reglas, sólo con un sistema administrativo y una política democrática. La democracia es un sistema que crea increíbles oportunidades para que todos se expresen, organicen y gestionen.
Si consideramos los detalles del Medio Oriente, esto es aún más existencial para nosotros. En el Medio Oriente, ninguna sociedad es monista. Las sociedades del Medio Oriente siempre están entrelazadas y son plurales en sí mismas. No es posible diferenciar las sociedades en términos religiosos, confesionales, étnicos y culturales. Tal vez, las áreas culturalmente dominantes de las sociedades pueden definir una nación y hacer divisiones en consecuencia. Pero, incluso entonces, no se puede hablar de una sola nación. El concepto más apropiado para la nueva construcción social en las condiciones del Medio Oriente es el concepto de nación democrática. Este concepto enfatiza el carácter cultural y democrático de la construcción de la nación. Es, al mismo tiempo, una expresión de la coexistencia igualitaria y libre de las naciones culturales, basada en un fundamento democrático. La nación democrática rechaza el monopolio del capitalismo y el Estado-nación, que es como la carne alrededor del hueso. En cambio, se fija el objetivo de construir una vida socialista y comunal.
Podemos discutir este modelo de dos maneras. Si lo miramos sobre la base de un Estado-nación, hay guerras, masacres, caos, hegemonía y explotación en el Medio Oriente. Esto lo demuestra el régimen fascista de Turquía, los Emiratos Árabes del Golfo y los demás estados árabes. Es evidente que el Estado-nacional trae consigo una dominación, explotación y opresión ilimitadas. Porque el sistema fue diseñado en consecuencia. En tal sistema, y con sus medios, no se puede lograr ninguna libertad.
Si en un Estado-nación predomina un grupo religioso o una sociedad étnica, no reconoce el derecho a la vida de los demás. Los árabes no reconocen el derecho a la vida de los kurdos, al igual que los iraníes y los turcos no reconocen a los kurdos. Los chiítas no reconocen a los sunitas y los sunitas no reconocen a los chiítas. Lo mismo se aplica a los musulmanes contra los cristianos y a los cristianos contra los musulmanes. Las religiones monoteístas no reconocen el derecho a la vida de las otras religiones. Es un sistema que siempre está dirigido a aniquilar al otro. Actuar en un Medio Oriente así, incluso con los viejos argumentos estatales y nacionales, es literalmente disparar el caos como una nueva fuerza asesina. ¡Esto no puede ser socialismo! Esto no es socialismo. El socialismo significa reconocer bien los conceptos y fenómenos básicos desarrollados por el capitalismo y crear alternativas contra ellos.
Si nos apropiamos del socialismo, la libertad y la igualdad, y consideramos que no hay lugar para la hegemonía y la opresión bajo el socialismo, y pensamos que el Estado es un instrumento de dominación y explotación, entonces todos los conceptos y modelos también deben estar de acuerdo con este pensamiento. No se puede crear un socialismo en el que se excluya a los demás. La nación democrática debe ser pensada como un concepto basado en valores como la libertad y la igualdad, que forman la sociabilidad en primer lugar. Este concepto supera al Estado-nación. Es un concepto en el que todos pueden expresar su libertad, como es necesario para el socialismo.
-En su movimiento hay organizaciones como el PKK, KCK, PAJK, KJK, HPG; en diferentes partes de Kurdistán hay otras organizaciones como en Rojava PYD, TEV-DEM, KONGRA-STAR, YPG, YPJ y en el norte de Siria de nuevo el Consejo Democrático de Siria y las Fuerzas Democráticas de Siria. Estos tienen aún más suborganizaciones. ¿Son la forma en que el paradigma desarrollado por Öcalan y la ideología socialista se expresan en la práctica? ¿Cuál es el papel y la función de éstos y cómo se relacionan entre sí?
-Esto tendría que ser discutido en detalle, pero trataré de responder a la pregunta de una manera general y explicar las características principales. Estamos hablando de un paradigma que nuestro liderazgo ha desarrollado. Este paradigma no se limita a una sola sociedad o geografía. Es más bien un paradigma socialista universal. Actuamos desde el punto de vista del socialismo global. El paradigma debe entenderse en primer lugar de esta manera. El liderazgo ha creado el nuevo paradigma criticando el socialismo real. Así, ha creado un nuevo paradigma de socialismo. Este paradigma no se debe ver como el específico de una sola organización. Siempre es posible que una multitud de fuerzas asuman este paradigma y lo apliquen a su propia región o a sus propios problemas. Hay una cierta universalidad en la aplicación del paradigma.
Este paradigma tampoco es específico de los kurdos o del Medio Oriente. Debe ser tratado como un conjunto de ideas que es válido en todo el mundo y que puede ser aplicado en todas partes. Es por eso que muchas fuerzas se acercan al Medio Oriente de esta manera. Si miramos a Rojava, por ejemplo, están las fuerzas PYD, YPG/YPJ. Las fuerzas del PYD y de las YPG están más preocupadas por los problemas de los kurdos en Siria. Pero no sólo se limitan a los kurdos. En esencia, están tratando de resolver la cuestión kurda, pero tampoco descuidan el carácter universal de la cuestión.
Por esta razón, tanto la estructura ideológica como la práctica-organizativa se caracterizan por una cierta universalidad. En este punto, el paradigma se toma como orientación. Así que aquellos que aceptan el paradigma por sí mismos no son miembros del PKK. El PYD y las YPG no son miembros del PKK, pero son fuerzas kurdas que han adoptado el paradigma del liderazgo como base. Otras fuerzas en Kurdistán del Este, del Sur y del Norte se acercan al paradigma de la misma manera. Cada uno formula política, social, organizativa y prácticamente su propio problema de acuerdo con el paradigma y está luchando.
Digamos que hay fuerzas en Kurdistán del Norte que luchan contra el colonialismo en Turquía. En Rojava, está la fuerza de las YPG/YPJ. Hay diferentes fuerzas en Kurdistán del Este y del Sur. Debido a que siempre defienden el mismo enfoque paradigmático, existe naturalmente un sistema de relaciones. Aquí, esencialmente el paradigma tiene que ser visto. El paradigma da a cada círculo político, social, étnico y cultural, y a las mujeres, la oportunidad de desarrollar su propio autogobierno. Cada uno tiene pleno poder de decisión en su propia área, la autonomía. Además, todos estos círculos tienen problemas comunes y áreas de la vida que interesan a todos. Aquí también, todos tienen el derecho de expresar su voluntad. Esta es una situación legal. Pero más importante es la moral. Por moral quiero decir que ninguna persona o grupo debe estar por encima de la libertad y la voluntad de otro.
Esto se aplica a todos los temas, especialmente a la libertad y organización de las mujeres. Digamos que hay una dimensión de la libertad de las mujeres en este paradigma. En este paradigma, las mujeres han visto su propia libertad y han tomado su enfoque socialista con la identidad de la mujer en la mano y la han unido al socialismo a su manera. Como podemos ver, esto la ha convertido en una fuerza muy importante. En la guerra de guerrillas en Kurdistán del Norte, las mujeres se han transformado en una gran fuerza de libertad y organización. Las YPJ han influido en todo el mundo. Han desarrollado una fuerza ideológica, organizativa y militar en Rojava que podría detener una fuerza brutal como la del ISIS. Todas las entidades de la región pueden ser evaluadas en este contexto. De esta manera se pueden considerar diferentes movimientos, como los movimientos ecológicos.
Este paradigma desarrollado por Öcalan no es sólo para los kurdos o el Medio Oriente. Puede ser llamado el más mínimo denominador de los movimientos que representan este paradigma. El PKK y el PYD son movimientos que tienen un claro objetivo de revolución en el Kurdistán. Por lo tanto, el paradigma de liderazgo en el Kurdistán es una guía central para ellos. Pero es un gran error reducir este paradigma en sí mismo sólo a un paradigma para la liberación de la sociedad kurda. Por el contrario, este paradigma no considera ni da más valor a ninguna comunidad étnica que a otra.
Es un paradigma socialista que debe desarrollarse primero en el Medio Oriente y luego cada vez más, en todo el mundo sobre una base internacionalista. Naturalmente, los que abrazan el paradigma deben relacionarse entre sí, apoyarse mutuamente e incluso desarrollar un sistema común entre ellos. En esta crisis del capitalismo, no podemos aceptar que los movimientos liberales del mundo estén tan dispersos. Por lo tanto, es esencial formar una unidad con las fuerzas anticapitalistas y antiimperialistas. Esto debe ser aún más amplio. Contra el capitalismo global, debemos construir una democracia global. Las fuerzas liberales necesitan una unidad internacional democrática. El capitalismo está en profunda crisis y ya no puede sostenerse.
La hegemonía global del imperialismo se está rompiendo. Si aún hoy se mantiene en pie, es porque la izquierda socialista no puede expresarse suficientemente y no se organiza en una lucha común. Así como el sistema capitalista mundial está dirigido por un centro, las fuerzas liberales necesitan una unidad internacional democrática. Sin ellos no podremos superar el capitalismo y el imperialismo. Hay muchas experiencias sobre este tema a las que debemos referirnos. En particular, la primera, la segunda y la tercera internacionales, a pesar de sus deficiencias, son experiencias importantes. Esto es aún más cierto hoy en día.
Ningún paradigma que no sea universal puede tener un carácter socialista. Por eso pensamos que se necesita urgentemente una Internacional de liberación. Hay avances esperanzadores en esta dirección. La revolución en Rojava, en particular, ha traído muchos acontecimientos positivos, a pesar de algunos errores en este sentido. Rojava se convirtió en un centro de interés para los movimientos socialistas-revolucionarios de la región. También hay un gran interés a nivel internacional. Es de gran importancia que la gente venga de todo el mundo para luchar realmente por la libertad. Pero esto no es suficiente. Si observamos las consecuencias del paradigma, necesitamos crear una Internacional en la que todas las fuerzas del mundo puedan participar de manera organizada.
FUENTE: Roja Cijan / Revista Legerin