El portavoz de la Organización de Derechos Humanos de Afrin (ODHA), Ibrahim Şêxo, reveló que 78 ciudadanos y ciudadanas fueron secuestradas por mercenarios respaldados por Turquía en Afrin, el cantón kurdo del norte de Siria que Ankara mantiene ocupado de forma ilegal hace dos años.
Desde la ODHA informaron también que el 3 de agosto, un niño llamado Xelîl Nîhad, de 16 años de edad y natural de la aldea de Fêrkan, en el distrito de Şera en Afrin, fue alcanzado por un disparo de soldados turcos y su cuerpo entregado a su familia después de que le robaran los órganos en un hospital de Kilis, a donde fue llevado para recibir tratamiento.
Şêxo explicó que lo que le ocurrió a Xelîl Nîhad es un crimen de guerra, y que las organizaciones internacionales y de derechos del niño deberían hacer responsable al Estado turco por lo que sucede en Afrin.
El portavoz de la ODHA señaló que los soldados turcos asesinaros a 464 ciudadanos sirios en las líneas fronterizas desde el comienzo de la ocupación del cantón. “Las prácticas del Estado turco contra los civiles sirios, especialmente en Afrin, atentan contra el derecho internacional”, agregó.
Şêxo expresó que “el servicio de inteligencia de Turquía y sus mercenarios secuestraron a 78 ciudadanos, incluyendo a cuatro mujeres. Además, 12 personas, incluida una mujer, fueron torturadas. Se desconoce el destino de tres niños desaparecidos”.
Según a ODHA, los mercenarios del grupo Emşat se apoderaron de la cosecha de zumaque y nuez de las aldeas del distrito de Mabata. Şêxo expresó que “los invasores extranjeros que se establecieron en la región cortaron árboles para abrirse paso entre las aldeas de Hec Qasimo y Misteşûra, en Mabata”. Para esto, trasladaron desde Turquía 20 máquinas a la zona para excavar.
FUENTE: ANF / ANHA / Edición: Kurdistán América Latina