En el marco del octavo aniversario de la Revolución de Rojava, la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK, por sus siglas originales) difundió una declaración en la que resaltó la fortaleza del proceso social de cambio que se desarrolla en el norte y el este de Siria.
Luego de recordar “a todos los mártires caídos en la lucha para llevar a cabo y proteger esta revolución con gratitud y respeto”, la KCK señaló que la Revolución de Rojava, “que comenzó en Kobane el 19 de julio de 2012 y se extendió a todas las ciudades de Rojava, ha ocupado su lugar en la historia de las más grandes revoluciones de Medio Oriente”.
“La Revolución de Rojava está basada en el gran trabajo de 20 años de Abdullah Öcalan en Medio Oriente y en Siria, y en el paradigma de la sociedad democrática y ecologista basada en la liberación de la mujer –aseveraron desde la KCK-. Una vez tuvo lugar la Revolución de Rojava, todos los poderes reaccionarios, especialmente el Estado turco, mostraron su hostilidad hacia la misma. El despotismo y la política reaccionaria de Oriente Medio visualizó su propia muerte con la Revolución de Rojava. Mercenarios como Al Nusra atacaron Serekaniye, usando el apoyo proporcionado por el Estado turco. Después de que estos mercenarios fuesen derrotados, ISIS atacó la Revolución de Rojava, Shengal y el Kurdistán del Sur (norte de Irak) en 2014”.
En la declaración, se puntualizó que la Revolución de Rojava “no es solo la base de la revolución democrática en Siria, es también el fundamento de la revolución democrática en Medio Oriente. El sistema democrático basado en la liberación de la mujer en Rojava es un oasis de libertad y democracia en Medio Oriente. La Revolución de Rojava es, ante todo, la Revolución de las Mujeres. Es la primera en todo el mundo de estas características”.
“La Revolución Rojava –continuó el texto de la KCK- ha sido precursora de las revoluciones democráticas del siglo XXI gracias a su línea basada en la liberación de la mujer y el sistema del ‘confederalismo democrático’, basado a su vez en la sociedad democrática organizada. La Revolución de Rojava ocupa un lugar importante en la historia de la humanidad, porque es el primer ejemplo de una vida democrática, igualitaria y socialista no basada en el gobierno y el Estado que se ha llevado a la práctica”.
En el comunicado, se manifestó que el proceso revolucionario en Rojava “se ha extendido por toda Siria con la comprensión de la nación democrática, y se ha convertido en la base principal de la democratización del país. Este carácter democrático, sin embargo, se encuentra bajo ataque del Estado turco, el poder más fascista y reaccionario de Medio Oriente. A este respecto, la Revolución de Rojava se ha convertido en una guerra entre los pueblos del mundo y las fuerzas democráticas, y el Estado turco”.
“La Revolución de Rojava se ha ganado el apoyo de los pueblos, lo que ha supuesto una novedad, ya que ninguna revolución en la historia se había beneficiado de tal apoyo –agregaron-. Actualmente, la mayor fuerza de la Revolución de la Rojava es la profundidad y el alcance de su carácter democrático y el apoyo de los pueblos del mundo y las fuerzas de la democracia. Al tener esa fuerza, la Revolución Rojava y la Revolución del Norte y el Este de Siria sabrán resistir por grandes que sean los ataques que reciba; seguirá siendo la esperanza de los pueblos de Medio Oriente y de todo mundo”.
Según la KCK, los pueblos en las cuatro partes de Kurdistán y los kurdos exiliados en todo el mundo “están con la Revolución de Rojava”, por la resistencia “es enorme”. “Sobre estas bases, la resistencia de la Revolución de Rojava y del Norte y el Este de Siria repelará todo tipo de ataques reaccionarios y hará de Siria un país ejemplar y democrático para todo Medio Oriente”, finalizaron en la declaración.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina