La especialista en Medio Oriente, Hamida Yaghit, afirmó que el Estado turco está reuniendo más tropas en la provincia siria de Idlib y preparándose para una nueva confrontación militar en esa zona.
Para lograr sus objetivos en Medio Oriente, Turquía impone todas sus políticas sucias. Para Yaghit, la actitud bélica turca se intensificará luego de realizarse la reunión tripartita de los países garantes de la Cumbre Astana.
La especialista se remitió el acuerdo con Moscú sobre la tregua en Idlib, declarado el 5 de marzo, y dijo que el Estado turco no cumplió con los términos del armisticio, y que tampoco pudo controlar a los grupos mercenarios extremistas en Idlib.
“Los grupos yihadistas no acordaron con Turquía el acuerdo de armisticio en Idlib, y esos grupos decidieron evitar la realización de patrullas conjuntas ruso-turcas, ya que llevaron a cabo ataques allí –apuntó Yaghit-. Estos grupos atacaron al ejército turco, a las patrullas, algo que puso a Turquía frente a una nueva crisis, ya que, por un lado, no puede controlar a los yihadistas, y por otro lado no puede cumplir con las promesas que hizo. Mientras tanto, los ataques de los grupos yihadistas contra las fuerzas del gobierno sirio continúan”.
Yeghit señaló que Rusia tenía un desafío con Turquía no solo en Idlib, sino también en Libia. “Las fuerzas del Gobierno de Acuerdo Nacional (GAN) en Libia (con sede en Trípoli) tomaron el control de la base de Al Watiyyah, en el este del país, con el apoyo directo de Turquía. Más tarde, Rusia realizó ataques aéreos en Idlib, una provincia que ha sido testigo de incursiones u operaciones similares desde la tregua del 5 de mayo. Estas incursiones fueron una respuesta a la carta turca en Libia”.
La especialista manifestó que “por primera vez, después del acuerdo de armisticio, aviones de combate rusos atacaron los sitios de los grupos mercenarios en las áreas de Sahl Al Ghab, mientras atacaban áreas en el campo de Latakia, y al mismo tiempo el ejército sirio comenzó a dirigir más refuerzos a la región. Todos estos movimientos indican que Idlib será testigo de una batalla cerrada”.
Yaghit señaló que la crisis en Libia es inseparable de la crisis en Idlib, y que existe una competencia entre Rusia y Turquía. Señaló también que la posición de Rusia sobre Libia es clara y conocida: “Rusia busca limitar el progreso de las fuerzas gubernamentales de Al Wefaq hacia el este del país, donde Turquía apoya a Al Wefaq, pero Irán, que se encuentra entre los garantes de Astana, ha anunciado su apoyo a Turquía. Rusia quiere recopilar las situaciones de Libia e Idlib en la misma mesa, y también quiere que Irán permanezca como mediador”.
Yaghit afirmó que la crisis en Libia se está volviendo más complicada, ya que Estados Unidos está trabajando para interferir a través de Turquía. A esto agregó que “la etapa de la ocupación en Siria se repite en Libia. Rusia quiere mantener a Turquía de su lado y no permitir que Estados Unidos interfiera en Libia a través de Turquía y creen allí fuerzas de oposición” para de esa forma “restringir a Turquía, porque no se adhirió a los términos del armisticio en Idlib”.
“Rusia está retrasando y prolongando el acuerdo y ofreciendo concesiones en Idlib. Solo Rusia sigue siendo una fuerza influyente en Libia que puede adelantar las líneas rojas”, aseveró.
Yaghit además indicó que el Estado turco trata con Hayet Tahrir Al Sham, que se considera una organización terrorista en Idlib, porque Ankara “está al lado de los grupos yihadistas en Idlib”. “Turquía no se ha alejado de Hayet Tahrir Al Sham, que en consecuencia lleva a problemas y crisis continuas. Parece que Rusia no hará más concesiones a Turquía a este respecto”, finalizó la especialista.
FUENTE: Jihan Belkin / ANHA / Edición: Kurdistán América Latina