La Confederación de Sindicatos Revolucionarios de Trabajadores de Turquía (DISK) criticó al gobierno nacional ante la falta de respuestas en medio de la crisis desatada por la pandemia del coronavirus.
La titular de la DISK, Arzu Çerkezoğlu, indicó que la única manera de quedarse en casa como prevención es dejar de trabajar, excepto en los trabajos absolutamente necesarios y vitales. Ante esta situación, Çerkezoglu señaló que Turquía puede enfrentarse al mayor desastre de desempleo de su historia.
La representante de la DISK explicó que el gobierno turco debería prohibir los despidos y “conceder una baja remunerada, excepto para la producción de bienes y servicios obligatorios”. A su vez, el Ejecutivo tendría que asegurar el salario de todos los trabajadores y las trabajadoras. Al mismo tiempo, “se deben facilitar las condiciones para beneficiarse del subsidio del seguro de desempleo” y las “deudas de facturas y créditos deben ser pospuestas”.
Çerkezoğlu detalló también que el Estado turco debe implementar que las pensiones más baja tienen que ser aumentada al nivel del salario mínimo.
Para la titular de la DISK, la administración de Recep Tayyip Erdogan “retrasa la adopción de medidas efectivas contra la pandemia, por lo que el peligro crece día a día”.
“La forma más efectiva de combatir la epidemia es quedarse en casa y así evitar que el virus se extienda –señaló la dirigente-. Esto ya lo sabe todo el mundo. Quedarse en casa es la única solución. Por lo tanto, quedarse en casa es lo que hay que hacer. Sin embargo, millones de trabajadores siguen obligados a ir a trabajar. Millones de trabajadores utilizan los transportes públicos. Trabajan codo con codo con otros trabajadores en sus lugares de trabajo, comen en comedores. Luego se van a casa con sus familias”.
Çerkezoğlu enfatizó que todos los empleados de los servicios de salud pública deben recibir equipo de protección completo y calificado, y tienen que ser sometidos a pruebas y exámenes de salud regulares.
Por su parte, el gobierno anunció ayer las nuevas cifras de coronavirus en el país. El ministro de Salud, Fahrettin Koca, reveló que el lunes se realizaron 21.400 pruebas, de las cuales 3.148 fueron positivas. También confirmó que ayer fallecieron 75 personas, elevando el número total de fallecidos por coronavirus a 649.
Según las últimas cifras, hasta ahora se han realizado pruebas en 202.845 personas en toda Turquía y 30.217 de ellas dieron positivo. De esa cifra, 1.415 están en cuidados intensivos y 966 están con respirador artificial. 1.326 de los infectados se han recuperado.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina