Atakan Atalar, estudiante de segundo año de la Universidad Özyeğin, fue privado de su derecho a la educación. La universidad negó haber prometido becas a estudiantes con medios financieros limitados.
El sueño de la infancia de Atakan Atalar era convertirse en piloto. Describiendo su pasión, el joven de 21 años dice: “Siempre construía aviones cuando otros niños hacían coches con lego”.
Atalar afirma estar triste por tener que retrasar sus sueños debido a un sistema basado en el dinero.
Después de graduarse de la escuela secundaria, Atalar, en la que obtuvo la nota más alta en la asignatura de ingeniería con una beca del 50 por ciento para los exámenes de acceso a la universidad, decidió inscribirse en la Universidad Özyeğin, ya que anunciaron que proporcionarían becas a los estudiantes que tuvieran un acuerdo financiero con Ay-Jet y que tuvieran pocos medios financieros.
Cuando fue a la escuela en 2016 Atalar se sintió alentado por una reunión que tuvo con un ejecutivo de la universidad que le prometió una beca.
Declarando que su madre también fue testigo de esta conversación, Atalar dice que cuando habló de la posibilidad de insuficiencia financiera de su madre, Özyeğin habló del sistema de crédito de la escuela y le aseguró: “Nunca abandonamos a nuestros estudiantes”.
Atalar, que podía permitirse dos años de departamento de preparación de inglés en la escuela y el primer año del Departamento Piloto, señaló que sólo después del segundo semestre de educación, la situación financiera de su familia se deterioró.
Atañar solicitó que se le concediera la beca para necesidades urgentes de la escuela con documentos que probaran los problemas financieros de su familia en ese momento, sin embargo su solicitud fue rechazada.
Atalar le preguntó a la rectora la razón por la que su solicitud había sido rechazada. La rectora, Esra Gençtürk, dijo que no había un sistema de crédito especial. Cuando Atalar le contó las garantías que le había dado el propio Hüsnü Özyeğin, la rectora dijo que era una “tontería”. Atalar pronto se dio cuenta de que no podía hacer nada cuando la rectora amenazó con llamar a seguridad.
¡No renunciaré a mis derechos!
Atakan Atalar no podrá pasar al segundo semestre. Terminó el primer semestre del segundo año con el estatus de estudiante honorario.
Atalar condenó el hecho de que el derecho a la educación está ligado a la situación financiera de uno.
Özyeğin declaró que no hará una declaración especial sobre la situación especial de Atakan Atalay.
En la sección “Visión y Misión” de la página web de la Universidad Özyeğin se afirma: “La Universidad creará oportunidades para estudiantes talentosos y exitosos que tienen recursos limitados con un sistema de becas eficaz”.
Claramente esto no es cierto, ya que a otro estudiante se le niega su derecho a la educación debido a su situación financiera.
ANF/ZEYNEP KURAY/ESTAMBUL