Rusia, Irán y Turquía, los países garantes del alto el fuego en Siria, reafirmaron este miércoles (11 de diciembre) su compromiso con la soberanía e integridad territorial del país árabe, y rechazaron los intentos de crear autonomías “bajo el pretexto de la lucha contra el terrorismo”.
Así lo manifestaron los representantes de los tres países en una declaración conjunta adoptada al término de la XIV ronda de consultas del llamado Formato de Astaná (antiguo nombre de la capital kazaja) para la verificación del cumplimiento del alto el fuego en Siria, en la que participaron delegaciones del gobierno y de los opositores sirios.
Tras reiterar su compromiso con integridad territorial de Siria, los países garantes rechazaron, por esa misma razón, “todos los intentos de crear nuevas realidades ‘sobre el terreno’, incluidas las iniciativas ilegales de crear autonomías bajo el pretexto de luchar contra el terrorismo”.
Expresaron asimismo su decisión de hacer frente a “planes separatistas, que apuntan a socavar la soberanía y la integridad territorial de Siria y que amenazan a la seguridad nacional de países vecinos”.
La declaración conjunta no menciona en ningún momento a los kurdos.
Sí lo hizo el jefe de la delegación del gobierno sirio y representante permanente de su país en la ONU, Bachar Jafari, quien en declaraciones a la prensa subrayó que Damasco no reconoce la autonomía kurda en el noroeste del país.
“Siria rechaza todos los intentos de autonomía, porque es una muestra de separatismo. Pero nuestras puertas están abiertas y periódicamente dialogamos con los kurdos”, dijo el diplomático sirio.
Agregó que Damasco confía en que como resultado de ese diálogo se producirá la reunificación con los “hermanos kurdos”, que -añadió- “comprenderán su error y se alejarán de los estadounidenses”.
La situación en la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, fue uno de los temas centrales de las consultas en Nur-Sultán.
Rusia, Irán y Turquía acordaron adoptar “medidas concretas (…) para garantizar la protección de la población civil de conformidad con la normas del derecho humanitario internacional, y de los militares de los países garantes que se encuentran dentro y fuera de la zona de distensión de Idlib”.
Al mismo tiempo, expresaron su “gran preocupación” por la creciente presencia de grupos terroristas que amenazan a la población civil tanto dentro como fuera de esa zona, y subrayaron la necesidad de continuar las operaciones de liberación de prisioneros.
Los países garantes manifestaron su disposición a respaldar la labor del comité que elaborará la nueva Constitución siria mediante la interacción con sus miembros y con el enviado especial de la ONU para Siria, Geir Pedersen, quien también participó en las negociaciones.
“En este momento, mi prioridad es consensuar la agenda con los copresidentes (…) y facilitar la celebración de la próxima reunión del Comité Constitucional. Aún es prematuro aventurar cuándo concluirá su trabajo”, dijo Pedersen al contestar una pregunta sobre cuándo estará redactada la nueva Constitución.
La próxima ronda de consultas en la capital kazaja se celebrará en marzo del año próximo.
FUENTE: EFE / eldiario.es