Las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS) mantienen prisionero a Anouar Haddouchi, un ciudadano belga miembro del Estado Islámico (ISIS), apodado el “Carnicero de Raqqa” y conocido mundialmente por financiar las masacres de Bruselas y París. El mercenario, de 35 años y que fue capturado por las FDS en la aldea de Baghouz, quiere ser juzgado en Bélgica.
Haddouchi, también conocido como Abou Souleyman al Belgiki o Abou Abderrahman, se encuentra detenidos hace siete meses en una prisión de alta seguridad de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES). El terrorista se unión a ISIS en Bélgica en 2014 con su esposa y sus dos hijos.
Durante su cautiverio, se supo que Haddouchi tiene una relación cercana con Mohamed Abrini, una figura clave en la organización de las masacres de Bruselas y París, quien actualmente está encarcelado en Bélgica.
El mismo Haddouchi transfirió 3.500 euros de su cuenta bancaria a la cuenta de Mohammed Abrini cuando estaba en Raqqa para financiar los dos atentados, según la información compartida por el ministerio belga de Finanzas. En 2016, esa cartera anunció que las cuentas de Haddouchi y su esposa Julie Maes habían sido congeladas.
Haddouchi creció en una familia musulmana y trabajó como taxista en Bruselas. En sus declaraciones luego de ser capturado, reconoció que fue influenciado por predicadores turcos y marroquíes en la mezquita a la que concurría en la capital belga.
En septiembre de 2014 comenzó, junto a su esposa e hijos, su viaje hacia Siria, pasando con anterioridad por Turquía.
“Fuimos de Bruselas a Estambul, luego de allí fuimos a Antep –relató el terrorista-. Con la ayuda de la gente que nos recibió en Antep, cruzamos hacia territorio sirio. No tuvimos problemas para cruzar la frontera. Aunque había soldados turcos a lo largo de la frontera, fuimos a Siria sin ningún problema. Los miembros de ISIS, que nos saludaron al otro lado de la frontera, primero nos llevaron a una ciudad y luego a Jarablus”.
Haddouchi afirmó que después de una corta estadía en Jarablus, fue llevado a Raqqa, donde ISIS estableció la capital de su califato, donde recibió entrenamiento militar en un campamento.
Hasta ahora, el mercenario no brindó detalles sobre dónde luchó o qué roles tuvo dentro del Estado Islámico, y cuando se le recuerda que se le conoce como el “Carnicero de Raqqa” solo sonríe.
En su relato, Haddouchi indicó que luego de que las FDS liberaran Raqqa, fue liberado y se trasladó a Meyadin y posteriormente a la región de Deir Ezzor. Aunque se abstuvo de contar sobre los crímenes que cometió en esas áreas, “el carnicero” fue capturado en Bahouz, el pequeño pueblo en donde las FDS derrotaron a ISIS en marzo pasado.
Haddouchi admitió que el Estado Islámico llevó a cabo muchas masacres contra civiles, pero las justificó diciendo que se realizaron respetando la ley Sharia (ley islámica).
Aunque estuvo al servicio de ISIS durante cinco años, el belga lamentó haber viajado a Siria par aunirse al grupo terrorista. “Sé muy bien que no decidiré dónde voy a ser juzgado. Soy ciudadano belga y quiero regresar allí con mi familia. Si debo ser juzgado, debería ser juzgado en Bélgica”, imploró el “Carnicero de Raqqa”.
FUENTE: Serkan Demirel / ANF / Edición: Kurdistán América Latina