Aldar Xelil, integrante del Consejo Ejecutivo del Movimiento para la Sociedad Democrática (TEV-DEM, por sus siglas en inglés), afirmó que existen posibilidades en avanzar hacia la aplicación de una “zona de amortiguamiento” en el norte y el este de Siria.
El representante del TEV-DEM, uno de los principales órganos de autogobierno de la región, fue entrevistado por el periódico turco Al Ahoun, en el cual dijo que si se aplica esta zona se extenderá por cinco kilómetros a través de la frontera, no incluiría áreas y ciudades estables, y no estará bajo el control de las fuerzas turcas.
Xelil señaló que la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) aprobaría una zona de amortiguamiento protegida por las fuerzas de la Coalición Internacional, que entonces sí podría incluir a las tropas turcas y que estaría activa principalmente en áreas desérticas.
El representante del TEV-DEM explicó que esta propuesta está condicionada a que los civiles kurdos obligados a abandonar por la fuerza sus hogares en el cantón kurdo de Afrin, debido a la invasión militar de Turquía, deben regresar y sus propiedades confiscadas tienen que ser devueltas.
La “política sucia” de Turquía en el sur de Kurdistán
Por su parte, Hiwa Salim, máxima autoridad del Partido de las Luchas de Kurdistán (PLK), denunció que “el Estado de ocupación turco busca, a través de los ataques contra las áreas del sur del Kurdistán (norte de Irak), sembrar las semillas de la lucha interna entre las fuerzas kurdas”.
Desde el 27 de mayo, las fuerzas militares turcas efectúan bombardeos y ataques de artillería contra varias zonas del sur de Kurdistán. Frente a esta situación, los gobiernos de Bagdad y de la región semi-autónoma del sur de Kurdistán mantienen un silencio cómplice frente a los ataques.
Para Salim, los ataques turcos son parte de una “política sucia” que lleva adelante la administración de Recep Tayyip Erdogan. El dirigente recordó que con sus bombardeos, Turquía viola el derecho internacional, las disposiciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como también las leyes iraquíes. Pese a esto, Salim remarcó que la administración de Bagdad “aún no ha tomado ninguna decisión para defender su tierra y su gente”.
“Si no hay cooperación o complicidad directa entre Turquía y el Estado iraquí, la falta de cualquier posición contribuye al fortalecimiento de la ocupación”, alertó el representante del PLK. Salim destacó que “el silencio y la complicidad” del Partido Democrático de Kurdistán (PDK) –que gobierna el sur de Kurdistán-, “es el resultado de su satisfacción con la guerra y la ocupación”.
“El PDK aún no se da cuenta de que si el Estado turco ingresa en un lugar no saldrá fácilmente, por ejemplo, en Iskendron y Chipre. En la década de 1990, las fuerzas turcas entraron en el sur de Kurdistán y aún no se han ido. Esta ocupación representa un gran peligro para el futuro del sur de Kurdistán”, alertó.
Salim advirtió que el sur de Kurdistán “se convirtió en una guarida de la inteligencia turca” y la invasión de zonas de la región se da “con el pretexto de proyectos económicos”.
FUENTE: ANHA / Traducción y edición: Kurdistán América Latina