El Estado y los medios de comunicación turcos guardan un silencio notable ante los violentos enfrentamientos entre grupos de mercenarios en la provincia siria de Idlib, por los que Ankara asumió el papel de garante en las reuniones de Astana y Sochi. Turquía ha guardado silencio sobre los enfrentamientos entre el Hayat Tahrir Al Sham (HTS), liderado por Jabhat Al Nusra, y los grupos Nour Al Din Al-Zenki.
El HTS realizó acciones el 1 de enero contra las brigadas de Nour Al Din Al Zenki, un componente del “Frente de Liberación Nacional”, en el noreste de Idlib, y se hizo cargo de toda la región. El grupo mercenario Nour Al Din Al Zenki abandonó todos los puntos de observación, incluido Darat Izza, el primero que construyó el Estado turco en Idlib, y huyó a Afrin después de sufrir grandes pérdidas.
El “Frente de Liberación Nacional”, que incluye a los grupos de mercenarios de Turquía reunidos en Idlib, emitió una declaración después del ataque de HTS y anunció que están “declarando una movilización y apoyarán al grupo Nour Al Din Al Zenki”, pero esto no ha ido más allá de las palabras.
Mientras tanto, aviones rusos llevaron a cabo ataques aéreos en Kafr Naha, al oeste de Alepo, en Urm, en el 111 regimiento de Atarib, Darat Izza y Jarmiya Al Real contra el HTS el viernes por la tarde. Estas áreas son parte de las zonas de “no ataques” determinadas en el acuerdo de Astaná firmado por Rusia, Turquía e Irán. Esta es la primera vez que se golpea una zona sin ataques después del acuerdo. También se dice que el ataque aéreo está dentro del conocimiento de Turquía.
Los enfrentamientos en Idlib comenzaron después de que un comité integrado por el ministro turco de Asuntos Exteriores, el ministro de Defensa, el subsecretario del MIT y el portavoz de Erdogan, visitaron Moscú para hablar sobre la posibilidad de invadir la ciudad de Manbij, en el norte de Siria.
Después de la reunión, el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, dijo: “Hemos llegado a un acuerdo sobre cómo los representantes militares rusos y turcos coordinarán los pasos para acabar con la amenaza terrorista en Siria bajo las nuevas condiciones”.
Fuentes confiables en Idlib hablaron con ANF sobre los enfrentamientos en la ciudad y los trucos que despliega Turquía. Según dos fuentes separadas, Turquía ha instalado un nuevo plan de juego en Idlib y es por eso que permanecen en silencio ante los enfrentamientos.
Las fuentes confirmaron que hubo una reunión con todos los grupos antes de la reunión entre los presidentes turco Recep Tayyip Erdogan y ruso Vladimir Putin celebrada en Sochi el 17 de octubre pasado. En esa reunión fue discutido un plan para una zona desmilitarizada de 15 kilómetros de profundidad a lo largo de la frontera Idlib entre ellos y el régimen. Las armas pesadas debían retirarse de esta zona desmilitarizada antes del 15 de octubre.
La primera fuente, que se mantendrá en el anonimato para garantizar su seguridad, explicó que con ese plan, el Estado turco prometió a los grupos en cuestión que responderían directamente al régimen y a los ataques rusos, y les pidió que retiraran las armas del área de 15 kilómetros.
La fuente dijo que una parte de las armas pesadas de HTS fueron llevadas a Afrin y que las armas pesadas del Partido Islámico de Turkistán habían sido trasladadas a Jisr Al Shughour. “Algunos pequeños grupos de mercenarios vendieron sus armas pesadas al HTS. Como Howitzers, Katyushas, tanques y morteros. El MIT lo sabía y lo dejó pasar. Porque Turquía sabía que si el HTS era débil y derrotado, su mano se debilitaría también en Idlib. No estaban seguros de cuánto tiempo podrían aguantar otros grupos. Necesitaban mantener el HTS fuerte como una herramienta de presión”, aseguró la fuente.
Otra fuente dijo que Turquía, de hecho, quiere incluir el HTS en el “Frente de Liberación Nacional”. Agregó que los grupos Nour Al Din Al Zenki y Suqour Al Sham se reunieron con Rusia y el régimen dos veces, por lo que Turquía quiere eliminar a estos grupos a través del HTS. La fuente indicó que estos dos grupos han sido apodados los “buenos chicos de Damasco” y dijo que podría haber dos posibilidades para que Turquía presione el botón de su eliminación.
La primera posibilidad es que, si Turquía y Rusia estuvieran de acuerdo, se necesitaría una provocación para que el régimen y Rusia intervinieran en Idlib. Usaron tanto a HTS como a Nour Al Din Al Zenki para este fin. O bien, el HTS resuelve el plan y toma acción primero. Si HTS se hice cargo de todo Idlib, Rusia podría usar la excusa de luchar más fácilmente contra el terrorismo. En ese caso, Rusia podría dar luz verde a la operación de Manbij u otras operaciones de Turquía.
La segunda posibilidad es que Turquía realmente está construyendo su juego sobre el HTS y no quiere que se debiliten. Un HTS más fuerte en Idlib también significaría que Ankara tiene una mano fuerte contra Rusia en la mesa. La radicalización del HTS también provocaría un proceso en los grupos mercenarios con los que Turquía se reunió en Afrin, Al Bab, Jarablus y Azaz, que en comparación a HTS parecen mejores. Con la eliminación de Nour Al Din Al Zenki y Siqur Al Sham, que se reunieron con Rusia y el régimen, enviarían un mensaje a Moscú y a Damasco de que estos grupos están bajo su control.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
