Los ataques aéreos turcos apuntaron a áreas civiles en el bombardeo del sábado por la noche en Qandil. Dos personas resultaron heridas, las casas, los árboles, los viñedos y los huertos de la población local sufrieron daños como consecuencia del bombardeo
Aviones de guerra turcos llevaron a cabo un ataque en la aldea de Surede, en la región de Qandil, en el sur de Kurdistán, en el norte de Irak, alrededor de las 21:30 anoche.
El ataque aéreo se dirigió a asentamientos y subestructuras civiles, dañando muchas casas y automóviles, rompiendo ventanas, derribando muros, viñedos y huertos. Un aldeano llamado Hemin Mamkak y otro aldeano, aún no identificado, sufrieron lesiones.
Reunidos en la escena del bombardeo después del ataque, los residentes de la aldea protestaron contra el estado turco.
Hemin Mamkak, quien resultó herido en el ataque, preguntó; “¿Soy un luchador del PKK?”
Mamkak dijo lo siguiente; “Yo y un pariente mío nos lastimamos con las bombas disparadas por el estado turco, que rompió las ventanas de nuestra casa. El estado turco quiere intimidarnos y expulsarnos de nuestras aldeas, pero nunca tendrán éxito”.
La residente de la aldea, Lejna Barana, destacó que el estado turco está bombardeando áreas civiles con la acusación de “estamos atacando campamentos del PKK”.
Al condenar al estado turco, Barana notó que los civiles heridos están siendo tratados ahora.
Otro residente de la aldea, Hesen Mihemed, recordó que el estado turco ha estado bombardeando Qandil durante años. Dijo que Turquía pretende intimidar a la población local bombardeando áreas civiles, pero enfatizó que no tienen miedo, sin importar lo que haga el estado turco.
Mihemed criticó a los gobiernos de la región del Kurdistán y Bagdad por permitir que se produjeran estos ataques y no hacer nada para detenerlos.
Después del ataque, los residentes de la aldea comenzaron a reparar sus casas y áreas de vida que fueron dañadas por el bombardeo.