El Consejo Democrático Sirio (CDS), uno de los órganos de gobierno del norte de Siria, anunció el domingo su disposición a la apertura de un proceso de conversaciones sin condiciones con el gobierno del presidente Bashar Al Assad.
En un comunicado publicado en su página web, el organismo resaltó que “no dudará a la hora de aceptar un diálogo sin condiciones” y subrayó que “la solución militar ha sido explotada en detalle y ha producido graves consecuencias” en el país y la región.
De esta manera, manifestó que “el diálogo es la única vía para resolver la crisis siria” y lamentó que “el régimen sirio ignore las demandas legítimas de los componentes en el norte de Siria –en referencia a las zonas de mayoría kurda que controla- y una solución democrática”.
Pese a ello, el CDS aplaudió “los comunicados a favor de una cumbre siria que allane el camino para poder pasar página”, al tiempo que apostó por “iniciar el proceso para construir y lograr estabilidad, lejos del lenguaje de la amenaza y la intimidación”.
El organismo destacó además que “es necesario centrarse en una solución política directa entre los sirios para que el pueblo pueda decidir su destino, lejos de intervenciones externas destinadas a dividir Siria y aprovecharse de sus crisis”.
“Los sirios se han dado cuenta de que la confrontación militar no logró ninguna solución y que las negociaciones a través de mediadores tampoco, así como que las fuerzas que intervienen de un lado u otro están haciéndolo por su propio interés”, argumentó.
Por otra parte, el CDS resaltó que “desde el inicio de la crisis siria, los componentes del norte -en referencia a las zonas de mayoría kurda- eligieron un camino diferente al resto de las regiones sirias”.
“Buscaron organizar sus áreas y alejarlas del espectro de la guerra y la destrucción. Formaron la autoadministración y lograron seguridad y estabilidad, desarrollar su economía y sus comunidades (…) y el establecimiento de un sistema democrático plural y descentralizado”, remarcó.
Las zonas de mayoría kurda cuentan con una administración autónoma y han evitado los enfrentamientos directos con las fuerzas gubernamentales, centrándose en expulsar de las mismas al grupo yihadista Estado Islámico.
En mayo, el presidente sirio advirtió de que podría recurrir al uso de la fuerza en caso de que no pudiera recuperar el control de estas áreas a través de un proceso de negociaciones.
Por el momento el gobierno no ha reaccionado al comunicado del CDS, que no ha sido invitado hasta la fecha a las negociaciones entre Gobierno y oposición mediadas por Naciones Unidas.
Por otra parte, se conoció que las Fuerzas Democráticas de Sirias (SDF) han reanudado la Operación Tormenta de Cizire hace una semana. Antes de llegar a la ciudad de Dashisha, las SDF han liberado a docenas de aldeas.
La ciudad de Dashisha al sureste de Hesekê (Hasakah) es la última fortaleza del Estados Islámico en la región. Los informes sugieren que muchos altos funcionarios del grupo terroristas están desplegados en esa localidad y que los ataques llevados a cabo por la organización en la región están planificados desde la ciudad.
Las SDF han liberado las aldeas de Al Tirafawi y Abdualal, al este de Shaddadi el lunes, y actualmente avanzan hacia la ciudad de Dashisha con armamento pesado.
FUENTE: Europa Press / ANF / Edición: Kurdistán América Latina