Partiendo de la solidaridad entre los pueblos y de aquellas organizaciones que no renuncian al internacionalismo proponemos la siguiente resolución.
El pueblo kurdo está encabezando la lucha en primera línea contra el Daesh tanto en Irak como en Siria, algo que hemos de reconocer desde la admiración. Daesh es un enemigo de la humanidad y todos aquellos que han negociado, o siguen negociando con Daesh son cómplices de los asesinatos que estos cometen.
En Turquía los kurdos y todas aquellas organizaciones que se enfrentan contra las políticas genocidas del estado turco y de su presidente Tayyip Erdoğan, viven y sufren la represión del estado.
El pueblo kurdo es violentado por defender su derecho a existir, por ejercer su derecho a hablar en su propia lengua, por revelarse contra un régimen que está realizando miles de detenciones indiscriminadas entre todas aquellas personas que critican, protestan o se enfrentan a un estado cuyas políticas son las de la conculcación de los derechos humanos, las de silenciar a los medios de expresión y periodistas que levantan la voz contra la barbarie.
La batalla abierta por el gobierno turco del AKP contra el pueblo kurdo, se encuentra en un punto álgido, son cientos las mujeres, ancianos, jóvenes, niños muertos, asesinados producto de los estados de sitios vigentes en pueblos y en barrios de muchas ciudades del Kurdistán turco.
Tampoco podemos olvidar la represión que sufren los kurdos en Irán, son cientos las personas que han sido ahorcadas por el estado teocrático de Irán por luchar por su derecho a tener una identidad propia.
De igual forma hemos de ser solidarios con la población kurda en Siria, el pueblo kurdo no puede olvidar las políticas ejercidas durante décadas por parte del gobierno baazista, las políticas de arabización en Siria conllevaron que miles de kurdos fueran despojados de su identidad nacional, lo que les hizo extranjeros en su propio país. Esta política profundizó la división y desarrolló el odio y la desconfianza, por parte de otros pueblos también hacia el estado; asirios, siríacos, armenios, turcomanos también sufrieron la negación de su identidad, su lengua y su cultura.
Hoy el movimiento revolucionario popular en Siria y otras áreas de Oriente Medio ha forjado una gran esperanza para los pueblos. Con el fin de alcanzar los objetivos democráticos de la revolución, este movimiento popular tiene la responsabilidad histórica de acabar con el caos y la crisis para conformar las bases de una coexistencia pacífica de las naciones a través de la democracia.
Con el fin de encontrar una solución global, es necesario apoyar el principio del federalismo democrático como una solución para Siria y el derecho a la Autonomía Democrática en Rojava.
Sobre esta base, pedimos que se apoye desde la solidaridad internacionalista los derechos y las características de las comunidades que darán forma al modelo de administración en Siria (El Federalismo Democrático Sirio).
Viva la lucha del pueblo kurdo.
Viva la solidaridad entre los pueblos.
Viva el internacionalismo.
KOMELEYA HEVALBENDÎYA KURDISTANÊ / ASOCIACION DE AMISTAD CON EL KURDISTAN