La Organización de Derechos Humanos de Afrin – Siria (DHAS) emitió ayer un informe en el que reveló que 447 refugiados y refugiadas fueron asesinadas por soldados turcos en la frontera turco-siria.
En la declaración difundida, se señaló que “los guardias fronterizos turcos dispararon a los solicitantes de asilo sirios, incluidos los ciudadanos kurdos, y los golpearon cuando intentaron ingresar al territorio turco, causando la muerte y heridas a varios de ellos. Especialmente, después de que el Estado turco y sus facciones armadas sirias ocuparon el área de Afrin y como resultado de la presión a la que están expuestos los pobladores en Afrin por las facciones armadas de la ocupación turca, los casos de fuga de ciudadanos, especialmente los kurdos, de ellos, y su asilo a Turquía a través de las fronteras comunes, especialmente en Afrin, aumentaron”.
El informe continuó: “Según el testimonio de los familiares y residentes locales, que fueron documentados por organizaciones internacionales y locales de derechos humanos, incluida la violencia de los ‘Observadores de Derechos Humanos’ se usa contra solicitantes de asilo y contrabandistas sirios”.
“Si Turquía tiene derecho a asegurar sus fronteras con Siria, está obligado a respetar el principio de no devolución que prohíbe la expulsión de los solicitantes de asilo en la frontera cuando corren el riesgo de ser perseguidos y torturados, o cuando sus vidas y su libertad están en peligro –aseveró el documento-. Turquía también está obligada a respetar las normas internacionales relacionadas con el uso de la fuerza excesiva, el derecho a la vida y la libertad física, incluido el riesgo absoluto de someter a cualquier persona a un trato inhumano o degradante”.
La investigación agregó que “en un momento en que Turquía está chantajeando a la Unión Europea con refugiados en su territorio, a fin de obtener beneficios financieros y políticos para legitimar su estadía en Siria, y someterlos a la muerte y los golpes, Turquía está utilizando municiones reales y culatas de fusil para contrarrestar el flujo de refugiados, y entre las víctimas que los guardias fronterizos están matando se encuentran niños y mujeres”.
“Observatorios locales e internacionales de Derechos Humanos (Human Rights Watch, Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Centro de Violaciones en el Norte de Siria), señalaron en sus informes el alcance de las violaciones que tuvieron lugar y que todavía ocurren durante el asilo de los ciudadanos de Siria, con varios componentes y nacionalidades que intentan ingresar a las tierras turcas para escapar de la muerte que los ha estado persiguiendo en el conflicto y que ha estado ocurriendo en Siria durante nueve años. Además, los residentes de las aldeas y pueblos fronterizos sirios o los agricultores y propietarios de tierras cerca de la frontera también son blancos de la gendarmería turca con balas”, se manifestó en el documento.
Seguido a esto, el informe reveló que “el número de ciudadanos sirios que fueron baleados por guardias fronterizos turcos (gendarmería) llegó a 447, incluidos 83 niños menores de 18 años, y 56 mujeres. Además, 420 ciudadanos sirios resultaron heridos con disparos o asalto. Además, el estado turco ha construido un muro de separación a lo largo de su frontera de 911 km de largo con Siria para evitar la entrada de refugiados, lo que resulta en continuas muertes y lesiones de civiles”.
“Aunque Turquía es uno de los países garantes de la reducción de la escalada, y participa como una de las principales partes en el conflicto en Siria, y tiene la tarea de proteger a los refugiados y las personas desplazadas, actúa completamente lo contrario”, se remarcó.
Desde la Organización de Derechos Humanos en Afrin-Siria se efectuó una llamado “a todas las organizaciones internacionales de derechos humanos y civiles, lideradas por las Naciones Unidas, para presionar al gobierno turco para evitar el uso de fuerza excesiva contra los refugiados y personas desplazadas sirias y otros , como uno de los países del Consejo de la Unión Europea, y debe respetar todas las leyes y reglamentos internacionales que estipulan el respeto de los principios de derechos humanos y todos los acuerdos internacionales pertinentes”.
Este domingo, medios locales informaron que las fuerzas militares turcas y sus mercenarios aliados atacaron este domingo las aldeas de Kor Hasan y Silip, en Gire Spi, en el norte de Siria.
Los bombardeos apuntaron a asentamientos civiles y posiciones de las fuerzas del ejército sirio. Las fuerzas de ocupación también han bombardeado el pueblo de Tewila, en Til Temir.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina