La Universidad Rojava fue creada por la administración Autónoma de la Región del Cizire, en el norte de Siria, el 5 de julio de 2016 en la ciudad de Qamishlo. El curso académico 2019-2020 d comenzará el 1 de noviembre.
Para este ciclo, se han inaugurado la facultad de Arquitectura e Ingeniería Ecológica y Técnica de la Construcción, el departamento de Traducción e Interpretación del Inglés, y la Escuela de Mecatrónica, con lo que el número de facultades asciende a ocho.
La educación en la universidad se basa en materiales didácticos elaborados de acuerdo con el modelo de la Administración Autónoma Democrática, por lo cual el sistema funciona de manera diferente al de otras universidades del mundo.
En lugar de basarse en exámenes, en la universidad se aplica un sistema de evaluación permanente, y la educación se imparte en kurdo y en árabe. Otra característica es que la casa de estudio se gestiona según el modelo de administración autónoma, lo que significa que los estudiantes y los profesores participan en todo el proceso de organización, administración y toma de decisiones.
El campus central de la Universidad de la Rojava está en Qamishlo. Otros campus se encuentran en las ciudades de Rimêlan y Hesekê. Por el momento, funcionan las facultades de Agricultura, Artes, Literatura Kurda, Jineoloji, Ingeniería del Petróleo y Petroquímica, Ciencias de la Educación y la reciente de Arquitectura y Ecología.
La facultad de Ciencias de la Educación también cuenta con siete departamentos: historia, geografía, ciencias académicas, matemáticas, física, química y ciencias. El año pasado se inauguró la facultad de Administración y Finanzas.
La universidad anunció que la inscripción continuará hasta el 5 de octubre. Cada departamento de la universidad asigna el 10 por ciento de las plazas a las familias de los mártires que lucharon contra el Estado Islámico (ISIS).
Raman Hesen, director de la Facultad de Ciencias de la Educación, señaló que, en comparación con el año pasado, se ha producido un aumento de las inscripciones.
En las universidades de Kobanê y Rojava, que en total cuentan con 22 departamentos, iniciaron días atrás las inscripciones para el año académico 2019-2020.
A pesar de las actuales condiciones de guerra y de las amenazas que pesaban sobre la región en años anteriores, la educación en el norte y este de Siria no se interrumpió y se lograron éxitos significativos en el ámbito de la escolarización.
Después de la revolución del 19 de julio de 2012, la educación primaria y secundaria se comenzó a impartir sin interrupción en tres idiomas. En 2015 se inauguró la Universidad Afrin, en 2016 la de Rojava y en 2017 la de Kobanê.
Dado que Afrin está bajo ocupación turca, la mayoría de los estudiantes que estudiaban se vieron obligados a huir, pero continúan su educación en los centros de Kobanê y Rojava.
Sakine Elî, copresidente del Departamento de Ciencias de la Universidad de Kobanê, confirmó que este año hay muchas solicitudes de matrícula en las regiones árabes. Elî añadió que el 70 por ciento de los criterios para la inscripción de los estudiantes depende de los resultados de la escuela, el 30 por ciento de la entrevista y cada estudiante tienen derecho a hacer tres elecciones.
Masîdar Masîro, miembro de la Junta de Coordinación de la Universidad de Kobanê, dijo que este año se han abierto nuevos departamentos y que el número de profesores ha aumentado. Masîro agregó que el objetivo principal es elevar el nivel de educación.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
