¿Qué sucede en Afrin desde la ocupación de Turquía?

El Ejército de Turquía y el Ejército Libre de Siria (ELS) secuestran sistemáticamente a los civiles del cantón kurdo de Afrin para luego pedir rescate a sus familiares. Así lo documentó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres. Más de 1.000 pobladores de Afrin han sido secuestrados, bajo la acusación ​​de supuestamente estar relacionados con el las fuerzas de autodefensa o las autoridades políticas kurdas. El informe del OSDH confirma también que muchos detenidos por las tropas de ocupación han sido torturados y que solo la mitad fueron liberados.

La agencia de noticias ANF informó que los mercenarios respaldados por Turquía confían en los partidarios del ENKS (Consejo Nacional de Kurdos Sirios), que informan sobre las personas en buenas situaciones financieras, así los secuestran y obtienen grandes rescates. “Las pandillas están recurriendo a nuevos métodos para robar, saquear y exigir rescate. Están enviando las imágenes y videos de las personas secuestradas a sus familiares en Europa y amenazándolos, diciendo que van a matar a sus familiares si no envían el dinero”, señaló una fuente de Afrin a ANF.

Estos secuestros se han utilizado como una de las principales herramientas de ocupación turca desde febrero y marzo, cuando se descubrió que las fuerzas respaldadas por Ankara habían secuestrado a civiles kurdos, los habían vestido con uniformes militares y los habían acusado de ser combatientes.

Mientras que algunos cautivos han sido liberados, se desconoce el paradero de muchos. Los grupos terrorista en Afrin, que están vinculados con ISIS y Al Qaeda, han aplicados torturas, violado a mujeres y asesinado civiles.

El 9 de julio, miembros del grupo Al Hamzat, una milicia respaldada por Turquía, torturaron hasta la muerte a una mujer de 70 años, Sultana Xelil Neso, y secuestraron a su marido, Hamdi Ebdo. Más tarde el hombre fue encontrado muerto.

La agrupación Faylaq Al Sham secuestró un a Egit Hesen, de 25 años de edad,el 10 de julio pasado. Según su familia, Hesen había sido retenido varias veces antes.

En Shiye, Jahbat Al Shamiya, otro de los grupos terroristas, Secuestró a 30 personas de la localidad de Çeqela el día 22 de julio. Familiares de uno de los cautivos declararon que el grupo exigió un rescate de 3000 dóalres por cada persona que habían secuestrado, incluidas mujeres y niños. Una víctima que había sido liberada dijo que junto a otros retenidos habían sido torturados.

El 24 de julio, Åžahin Bexdadî, de 62 años de edad, fue secuestrado y torturado. En el pueblo de Jinderes, 13 civiles también fueron secuestrados dos días después. 24 horas más tarde, otros 30 pobladores fueron retenidos por los terroristas.

El Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional considera la desaparición forzada de personas, que define como “el arresto, la detención o el secuestro de personas por un Estado o una organización política, Sin la autorización, apoyo o aquiescencia de éste, seguido del rechazo a reconocer la privación de libertad o dar información sobre la suerte o el paradero de esas personas, con la intención de eliminarlas de la protección de la ley por un período prolongado”, es un crimen de lesa humanidad. La toma de rehenes se considera un crimen de guerra según los Convenios de Ginebra.

FUENTE: The Región / Traducción y edición: Kurdistán América Latina