Cientos de personas se movilizaron en la aldea de Til Qerah, en el norte de Siria, para conmemorar un año que de que comenzaron los ataques turcos contra Afrin, que luego de dos meses desembocaron en la ocupación de esa región kurda.
Las familias de los mártires de Afrin y Shehba encabezaron la marcha, en la cual condenaron la política invasora del Estado turco y de sus aliados mercenarios del Ejército Libre Sirio (ELS).
La manifestación comenzó en la plaza de la aldea y continúo hasta la sede del Consejo de las Familias de los Mártires. Una vez ahí, tras un minuto de silencio, habló Sheraz Hemos, coportavoz del Consejo del cantón de Afrin. “La resistencia de nuestros héroes de Afrin continúa todavía hoy. El Estado turco no cumplirá sus anhelos”, aseveró.
En tanto, Merwan Mihemed, representante del Consejo de Familias de los Mártires, recordó cómo los pobladores de Afrin vieron “como destruían los lugares sagrados para erradicar la historia de la región”. “Ahora están llevando a cabo una política de cambio demográfico. Nunca hemos experimentado lo que vivimos durante los 58 días del ataque en Afrin. Nadie debería olvidar lo que ocurrió”, aseveró.
Por otra parte, la Unión Yazidí de Afrin, la Casa Yazidí del cantón Cizire y la Comunidad Yazidí Siria Alemana solicitaron a la comunidad internacional que tome una postura firme contra las amenazas de ocupación por parte de Turquía.
En el campamento de refugiados Serdem, en Shehba, las tres organizaciones brindaron una conferencia de prensa en la que se expresó que “Turquía dijo inmediatamente después del anuncio de Estados Unidos (de que se retirarían de Siria) que ocuparían las tierras de los kurdos. Esta es una afirmación que muestra la mentalidad real de Turquía. Turquía no considera al Daesh como una organización terrorista. Sin embargo, lucha contra las fuerzas democráticas reunidas bajo las FDS (Fuerzas Democráticas de Siria) y contra los kurdos, árabes, siríacos y turcomanos”.
Además, se alertó que desde la ocupación turca en Afrin y otras zonas del norte de Siria, las aldeas yazidís “se convirtieron en el centro de los grupos terroristas”, que “están obligando a nuestra gente a ir a las mezquitas que abrieron en los pueblos. Ellos imponen el Islam a las mujeres y las niñas. Cambiaron el nombre de nuestros pueblos”.
Las organizaciones yazidís también pidieron el cierre del espacio aéreo sirio y que el régimen de Damasco proteja las fronteras.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
