El entramado en la “normalización” en Afrin

Después de la declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía de que “la vida ha vuelto a la normalidad en Afrin”, Turquía ha comenzado a retirar los excedentes de soldados y equipos de la ciudad. ¿Qué significa esta “normalización”?

Turquía ha comenzado a retirar algunos batallones y tanques de la gendarmería del centro de Afrin y distritos como Jindires y Rajo. Las fuentes dicen que algunos se retiraron a la parte posterior de Atme y los alrededores de Azaz y Manbij anoche y esta mañana (por ayer).

Los informes también indican que el Estado turco está dejando sus fuerzas en colinas estratégicas, apuntando a permanecer en Afrin y controlar la ciudad a través de la administración que fundaron y que es leal a ellos.

Un comité ruso fue a Afrin del lado de Turquía el 4 de julio y sostuvo varias reuniones.

Afrin no está normalizado, es un hervidero

El portavoz turca del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hami Aksoy, participó en un programa de televisión el 1 de julio y afirmó que la vida había vuelto a la normalidad en Afrin, pero Turquía se mantendría por un tiempo más. Pero después de la invasión, nada ha sido normal.

Los invasores torturan, saquean, roban, violan, demuelen casas todos los días y continúan los enfrentamientos entre grupos mercenarios.

Las fuerzas YPG/YPJ y SDF no dejan que los invasores respiren con las acciones que llevan a cabo, como parte de la segunda fase de la resistencia. La creciente presión ha causado enfrentamientos entre grupos terroristas y levantamientos entre los clanes que cooperaron con el Estado turco durante el proceso de invasión.

Cuando el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores emitió la declaración, hubo un aire de terror intensificado en Afrin después de las tres explosiones consecutivas el 27 de junio y se llevaron a cabo redadas en muchas casas. Contrariamente a lo que dijo Aksoy, después de la invasión, Afrin no ha logrado la estabilidad en absoluto y está hirviendo bajo la superficie a pesar de todos los intentos del fascismo turco para someterla.

Minimizan las acciones de las YPG/YPJ

Una razón por la que el Estado turco comenzó a retirar algunos soldados, armas pesadas y equipo militar de Afrin es que la región ya no es segura para el Estado turco.

Oficialmente, 6.400 soldados turcos y 25.000 miembros de grupos mercenarios, de 47 agrupaciones, incluidos ISIS y Al Nusra, que figuran en listas de terroristas internacionales, participaron en la operación de invasión del Estado turco contra Afrin lanzada el 18 de enero. Se supone que los números reales son mucho más altos.

El Estado turco traslada el exceso de soldados y equipos de Afrin a otras regiones, y al mismo tiempo intenta crear la idea de que “Afrin está logrando la paz paso a paso y no somos invasores”, además de minimizar los objetivos de las acciones de las YPG/YPJ.

El plan ruso-turco para cambiar la demografía continúa

Durante la operación de invasión contra Afrin, como con la entrada de los invasores en la ciudad el 18 de marzo, unas 100.000 personas han sido llevadas a Afrin desde Ghouta, Homs, Hama y Turquía.

Esta nueva población está orientada a cambiar la composición demográfica de Afrin, y al igual que en las negociaciones para Afrin a cambio de Ghouta, actuaron juntas en el plan para cambiar la demografía. Con el plan ruso se intentó engañar a la gente de Afrin en Shehba para que viviera bajo la invasión, pero no se les permite regresar a sus casas.

El comité ruso que ingresa a Afrin desde Turquía el 3 de julio y visita a las familias de Ghouta en Shiye y Jindirese junto con funcionarios turcos, muestra que el plan para cambiar la demografía continuará y crea sospechas de que algunas regiones podrían quedar bajo control de los rusos.

FUENTE: Beritan Sarya / Edición: Kurdistán América Latina