La huelga de hambre iniciada en Amed (Kurdistán turco) bajo la demanda de que se concrete una urgente reunión con el líder kurdo Abdullah Öcalan, entró en su quinto día.
La medida de fuerza la encabezan 50 representantes políticos del Kurdistán y está respaldada por
el Partido de las Regiones de (DBP), el Congreso Democrático de los Pueblos ( HDK), el Congreso de la Sociedad Democrática (DTK), el Movimiento de Mujeres Libres (KJA) y el Partido Democráticos de los Pueblos (HDP), entre otras organizaciones.
En estos días, cientos de personas visitaron a los huelguistas, entre ellas las Madres por la Paz de Kurdistán y dirigientes de los partidos políticos kurdos en Turquía.
Selahattin Demirtas, co-presidente del HDP, estuvo días atrás con los huelguistas y declaró que los participantes en la medida de fuerza estarán hasta las últimas consecuencias, como una muestra de una resistencia histórica.
Demirtas manifestó que “esta acción no terminará hasta que recibamos noticias de Öcalan. El gobierno distorsionó las exigencias del momento. Esta huelga de hambre, por supuesto, se convertirá en un movimiento popular si no se reciben las noticias de una persona que fue apoyada por una junta de firmas por 10 millones de personas. Este no es un problema para seguir arrastrando”.
La huelga de hambre en demanda de una reunión con Öcalan también se lleva a cabo en la ciudad de Estrasburgo, Francia, donde se encuentran las sedes del Consejo de Europa (CE) y el Comité Europeo para la Prevención de la Tortura (CEPT).
Öcalan se encuentra encarcelado desde hace 17 años en isla-prisión de Imrali y desde hace más de un año no se saben noticias sobre su estado de salud.
Diferentes organizaciones políticas y sociales de Kurdistán están presionando al gobierno de Turquía para que permita que el líder kurdo reciba visitas, además de alertar sobre su seguridad después del intento de golpe de Estado del pasado 15 de julio.
FUENTE: ANF/ Traducción: Kurdistán América Latina
