Bashar Al Assad ataca al pueblo kurdo del norte de Siria

El presidente Bashar Al Assad calificó a los kurdos de Siria como “traidores” durante una conferencia de prensa después de una reunión con el viceprimer ministro ruso Dmitry Olgeovich Rogozin.

“Cualquiera que colabore con un poder extranjero para luchar contra el ejército sirio es traidor. Es así de simple”, aseveró Assad.

Según las declaraciones difundidas por la presidencia de Siria, el mandatario argumentó que “cuando se habla de aquellos a los que se les llama ‘los kurdos’, no son solamente kurdos. Todos los que trabajan por cuenta de un país extranjero, en particular bajo mando estadounidense, son traidores”.

Más tarde, la cuenta oficial de Twitter de la presidencia siria aclaró que se trataba de “la posición del gobierno sirio sobre los kurdos en el este de Siria”.

Assad, un firme nacionalista árabe, ha sido durante mucho tiempo crítico con los avances políticos realizados por los kurdos en el norte y el este de Siria. El 1 de septiembre pasado, Assad indicó que “existe la identidad nacional de Siria, pero su esencia es el arabismo”, y apenas un mes antes, el viceministro de Relaciones Exteriores, Faisal Mekdad, calificó a la Federación Democrática del Norte de Siria de “broma”.

Estimados en un 15% de la población, oprimidos durante décadas por el régimen de Asad, los kurdos adoptaron, al comienzo de la guerra desencadenada en 2011, una posición de “neutralidad” respecto al poder y los grupos irregulares armados, al mismo tiempo que comenzaban a combatir al Estado Islámico y otras bandas terroristas.

En 2016, proclamaron una “región federal” y organizaron elecciones locales. Introdujeron la lengua kurda, durante mucho tiempo desterrada de las escuelas, y crearon sus propias fuerzas de seguridad, en particular las Unidades de Protección del Pueblo kurdo (YPG) y las Unidades de Protección de las Mujeres (YPJ).

Que la presidencia siria eligiera mencionar a los kurdos en el este de Siria, a diferencia del norte, también puede ser indicativo de relaciones futuras en la provincia oriental de Deir ez-Zor, donde las Fuerzas Democráticas de Siria (FDS, con el respaldo de la coalición internacional) y el ejército sirio (con el apoyo de Rusia) han coordinado campañas separadas para librar a la provincia del Estado Islámico.

Mientras que Rusia y Estados Unidos dibujaron una línea para evitar enfrentamientos entre las dos fuerzas, durante el transcurso de la operación el acuerdo se rompió. A fines de septiembre, la fuerza aérea rusa bombardeó a las FDS en el campo de Deir Ez-Zor. El ataque costó la vida de dos combatientes de las FDS e incluso obligó al Subsecretario de Estado interino de los Estados Unidos a condenar públicamente a Rusia.

Las fuerzas kurdas que defienden el territorio en el norte y este de Siria también han sido blanco de la oposición en Siria, especialmente de las fuerzas turcas apoyadas por el Ejército Libre Sirio (ELS). Solo el 12 de noviembre, el cofundador del ELS, el coronel Riad al-Assad, concluyó una conferencia en Estambul que trajo a 250 figuras tribales de toda Siria para hacer un voto contra las fuerzas kurdas en el este de Siria. En declaraciones al diario Zaman al-Wasl, el coronel Riad al-Assad prometió organizar a las fuerzas del ELS para luchar contra Assad, el Estado islámico y las fuerzas kurdas en el este de Siria.

En la conferencia de prensa, Assad también mencionó su apoyo a las conversaciones de paz de Sochi, organizadas por Rusia, mientras que expresó sus críticas a las conversaciones de paz en Ginebra. “La gran diferencia entre las conversaciones de paz de Sochi y Ginebra está en el tipo de personas que asisten. En Ginebra, a las personas con las que luchamos se les da una plataforma; son individuos que no representan a la nación siria”.

En marcado contraste, Estados Unidos dice que apoya plenamente las negociaciones de Ginebra mediadas por la ONU. Al PYD kurdo, un partido político clave de la Federación Democrática del Norte de Siria, no se le ha ofrecido un asiento en las conversaciones de paz de Ginebra, aunque, para consternación de Turquía, se le puede ofrecer una mesa en las conversaciones de paz de Sochi.

FUENTE: The Region/Edición y traducción: Kurdistán América Latina