Desde la Administración Autónoma Democrática de Afrin indicaron que evacuaron a los civiles de la ciudad kurda para, de esa manera, evitar una masacre, mientras el ejército turco toma el control de varias zonas de la localidad.
En una conferencia de prensa celebrada ayer en la región de Shehba, los funcionarios de la administración y portavoces de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG/YPJ) explicaron la actual situación.
El copresidente ejecutivo del consejo de la administración, Osman Şêx İsa, leyó una declaración, en la que califica de “heroica” la resistencia de Afrin “contra el ejército turco y sus colaboradores, remanentes de ISIS y Jabhat Al-Nusra, reunidos bajo el nombre de Ejército Libre Sirio”.
“Los ataques contra Afrin comenzaron el 20 de enero con una alianza con Rusia y el silencio de los poderes regionales. Rusia abrió el espacio aéreo para que el Estado turco cometiera una masacre contra nuestro pueblo con todas sus armas, y sacrificó a la gente por sus intereses”, denunció la administración autónoma.
Al mismo tiempo, se afirmó que “estos ataques se llevaron a cabo con el silencio de los poderes internacionales, la coalición anti-ISIS y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.
El gobierno autónomo también alertó que el ejército turco es responsable de “la masacre y la migración forzada que se están imponiendo en Afrin”. “Cientos de civiles sufrieron todo tipo de ataques. Este hecho muestra que los poderes mencionados no cumplieron con sus responsabilidades para con nuestro pueblo y con los combatientes contra ISIS, y dejaron a Erdogan que propague el terror en todo el mundo”, agregaron en la declaración.
A su vez advirtieron que “el Estado turco pro-ISIS está usando grupos yihadistas para cambiar la demografía en Afrin y establece a estas fuerzas reaccionarias y sus familias en el lugar de los habitantes”. Además, apuntaron que el Estado turco “ha masacrado a cientos de civiles que intentan huir de estos ataques. Se están aplicando políticas genocidas contra un pueblo”.
“Durante 58 días de ataques, nuestra gente y nuestros combatientes organizaron una gran resistencia contra el segundo ejército más grande de la OTAN. El mundo entero debería saber que nuestra gente y combatientes resistieron esta fuerza salvaje con gran voluntad. Sin embargo, el ejército turco invasor ha atacado continuamente a civiles y durante los últimos dos días muchos niños y mujeres fueron masacrados, y los edificios, casas, panaderías, escuelas, hospitales de Afrin fueron demolidos y atacados de manera planificada. Para evitar un gran desastre humanitario, hemos decidido evacuar a los civiles de la ciudad”, explicaron desde la administración autónoma.
En medio de la situación crítica, el autogobierno de Afrin expresó: “Nuestra lucha contra la invasión estatal turca y las fuerzas oscuras, utilizando el nombre de Ejército Libre Sirio continúa. Sin embargo, la guerra ha pasado a otra etapa, con nuevas tácticas para evitar la masacre de civiles y asestar un golpe a las pandillas. Nuestras fuerzas se despliegan por todas partes en Afrin e infligen un golpe al ejército turco invasor y sus pandillas en su propia base”.
“Una declaración de victoria de Erdogan y sus socios no tiene ningún valor a los ojos de Turquía ni de la opinión pública mundial. Nuestras fuerzas harán de todas partes una pesadilla para ellos. La resistencia de Afrin continuará hasta que cada centímetro se libere y la gente de Afrin vuelva a sus hogares”, manifestaron en la declaración.
La administración remarcó que “además de la gente de Afrin, los pueblos de todo el norte de Siria y Kurdistán defienden a Afrin. Las fuerzas democráticas de todo el mundo no han dejado solo a Afrin. En nombre de nuestra gente, saludamos a todos los que han abrazado la resistencia de Afrin. Les pedimos que continúen apoyando a nuestra gente contra las políticas genocidas y presionen para que nuestra gente regrese a casa y para que las fuerzas de invasión turca se vayan de Afrin”.
Por otro lado, demandaron al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas “que no permanezca en silencio y que presione al Estado turco para que termine con el genocidio físico, cultural y político contra nuestra sociedad. La ONU debería terminar con su hipocresía y tomar las decisiones necesarias con respecto al derramamiento de sangre en Afrin y Ghouta Oriental”.
Por último, en la declaración se recordó que desde el comienzo de los ataques “500 civiles, incluidos niños, mujeres y ancianos, han sido asesinados por el fascismo Estatal turco y más de 1030 resultaron heridos. Aparte de eso, 820 luchadores de las SDF (Fuerzas Democráticas de Siria) han caído mártires”.
FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina
