Abdullah Öcalan: “Todo depende de la lucha”

El líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan pudo ser visitado por su hermano Mehmet Öcalan el 3 de marzo pasado. Sus compañeros, presos junto a él en la isla prisión de Imrali (Turquía), Ömer Hayri Konar y Veysi Aktaş también recibieron visitas de sus familiares. El cuarto preso alojado, Hamili Yıldırım, no recibió una visita porque el familiar autorizado estaba enfermo.

Luego del encuentro con el fundador del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), Mehmet Öcalan habló con la agencia de noticias Mezopotamya sobre la reunión.

“Durante aproximadamente ocho meses no pudimos tener una reunión. Cada dos semanas, enviamos solicitudes de visitas a la Oficina del Fiscal Jefe, en Bursa, a través de nuestros abogados. Sin embargo, no recibimos una respuesta, o se dan varias razones (negando el pedido). Después del incendio en la isla, nuestra solicitud fue aceptada”, contó Mehmet.

Y prosiguió: “El lunes (2 de marzo) nos informaron a través de los abogados que nos llevarían a la isla. Así es como llegamos. Los hermanos y hermanas de Ömer Hayri Konar y Veysi Aktaş, y yo, fuimos a la isla. Nos registraron en la estación de policía en Gemlik. No fue normal, pero digamos que lo fue. La requisa se llevó a cabo de una manera muy humillante. Como ser humano, no acepto eso. Es inmoral y no es bueno para Turquía o el Estado. Soy un hombre de 69 años. Lo mismo sucedió con los demás. Incluso si fuera joven, no debería ser así. Cuando entramos en la isla, llegó la segunda requisa. Creo que se llama segunda oficina de enlace. Por lo que puedo decir, está en manos de la gendarmería (policía militar). Allí se realizó una requisa muy desagradable. Esta no es una situación que una persona pueda aceptar. Uno no puede soportarlo. Pero lo hemos aceptado inevitablemente. En la segunda requisa, todos estaban allí: oficiales, soldados con lentes negros y todos armados. Se parecía a una atmósfera de estado de emergencia. Todos estaban allí. Tuvimos que soportar una requisa terrible. Este grupo vino con nosotros desde el momento en que dejamos el bote hasta el segundo punto de registro. En todas partes, estaba lleno de soldados y guardias. Aceptamos esta requisa obligatoriamente. De lo contrario, como saben, nadie aceptaría tales tratos. Fue inhumano”.

El hermano de dirigente kurdo encarcelado hace 21 años continuó: “Después de eso, entramos en la prisión. No hubo un registro intensivo dentro de la prisión. La requisa fue normal. Primero se llevaron a los otros dos familiares, me mantuvieron afuera al principio. Esperé unos diez minutos. Entonces me llamaron. En este punto de la requisa me pidieron varias veces que pasara el examen de rayos X. Esto fue acoso. Le dije: ‘Incluso si lo hago cien veces, sonará un pitido. Después nos llevaron para la visita. Fui el primero en ser llamado a la sala de visitas. Allí estaba la mesa vieja. Es una mesa grande. Me dijeron que me sentara. Pero no lo hice, sabía que el presidente (por Öcalan) vendría pronto. Esperé unos minutos. Entraban y salían, sabía que el presidente iba a venir. Entró y dijo, sin estrecharme la mano: ‘Me han informado. Probablemente tienes fiebre. Tienes un resfriado’. Es por eso que no nos dimos la mano. Se sentó en el lado sur de la mesa y yo me senté en el lado norte. El presidente le dijo al guardia: ‘Probablemente podamos hablar durante una hora y media, ¿verdad?’, pero no dijo nada. Finalmente comenzamos a hablar”.

Mehmet Öcalan explicó que el líder kurdo preguntó: “‘¿Por qué has venido, por qué motivo has venido?’ Dije: “Dijeron que hubo un incendio aquí. La gente y las instituciones han tomado medidas democráticas. Supongo que por eso nos dejaron venir. Él dijo: ‘Sí, pero no nos afectó’. Luego agregó: ‘Te voy a preguntar algunas cosas. Me dirás el resumen’. De todos modos, fue principalmente el presidente quien habló. Preguntó qué piensa la gente de afuera sobre la solución de la cuestión kurda y los problemas en Medio Oriente, y qué piensan sobre quién puede resolver estos problemas. Quería que respondiera sin comentarios”.

“Yo dije que del 80 al 90% de nuestra gente en Medio Oriente y la región dice que si se quiere resolver este problema, solo el Líder Öcalan puede resolverlo –relató el hermano del dirigente-. Él dijo sobre esto: ‘Sí, eso también lo sé. Ese es nuestro problema. Tenemos que ser fuertes para resolver el problema en Medio Oriente’. Luego entró en detalles. Entró en detalles sobre Rojava y las instituciones democráticas en Turquía. También dijo: ‘Creo que el congreso del HDP (Partido Democrático de los Pueblos) se llevó a cabo’. Le dije que sí, ‘que la participación fue muy grande. Mucha gente vino al congreso desde el extranjero también. El congreso fue muy bueno’. Entonces sobre esto el presidente dijo en particular: ‘Ahora te explico esto. Si no puedes ser una fuerza en la región, mira, en Turquía hay una mesa con dos patas. En tu asociación también hay movimientos de izquierda, hay muchos kurdos y también hay otros pueblos. Tienes que ser un pilar también. Tienes que ser una fuerza allí. Si la mesa tiene tres patas, no se caerá. Una mesa de dos patas siempre está condenada al colapso, no importa cuánto intente protegerla el sistema. Por lo tanto, nuestra formación, los kurdos, es la tercera pata creada para el crecimiento’”.

El hermano de Öcalan señaló: “Hacia la mitad de la conversación, comentó sobre las instituciones democráticas. El presidente dijo: ‘Las personas, las personalidades no deben servirse a sí mismas, deben servir a las instituciones y al pueblo’. Envió sus mejores saludos a la prensa. Dijo: ‘Fortalecer los medios de comunicación. Contribuir a ello. Les envío muchísimos saludos a mis compañeros en los medios. Deberían fortalecer tanto las revistas como las estaciones de televisión’”.

“Sobre la realización del congreso del HDP y la alta participación –describió Mehmet-, él envió saludos a los antiguos y nuevos co-presidentes y les deseó éxito: ‘Supongo que el partido (HDP) es la institución más fuerte entre las instituciones democráticas. El partido se fortalece a través del trabajo. Se vuelve más fuerte a medida que funciona. No se fortalece con lemas. Ves mi situación, ¿no? Llevo cincuenta años trabajando. Quien está en las instituciones (se refiere a organizaciones o partidos) por su familia, para sí mismo, para sus familiares, y utiliza los valores en tal sentido, cuando escucho eso, no lo perdono. Esta gente ha pagado un precio muy alto. Todos deberían luchar por este pueblo. No solo para los kurdos, hay muchos pueblos aquí. Si todos los pueblos se unen, pueden convertirte en una fuerza. Esa es la manera de encontrar una solución. A esta edad, estoy trabajando día y noche. Estoy buscando soluciones. No hago nada para mí. Pero hicimos una promesa a esta gente. Esta gente ha pagado un precio tan alto. Por 50 años hemos trabajado. Hay valores. Hemos pagado un precio muy alto. Si te vuelves fuerte y unido, puedes resolver el gran problema. Nadie vendrá y resolverá el problema por ti. Eres el principal poder de solución. El partido no es propiedad de personalidades. Ni siquiera de personas’. A través de esta evaluación, entendí que estaba observando al partido muy de cerca”.

El hermano de Öcalan expresó que el líder kurdo “también hizo comentarios sobre Siria. Hay tribus árabes en Rojava y sobre ella dijo: ‘Dales todos mis saludos y mi respeto. También saludo y respeto al personal de las instituciones allí. Los que trabajan en Rojava son muy valiosos. Los felicito por su trabajo. Están haciendo un trabajo sagrado. Les deseo éxito. Turquía a veces está del lado de Estados Unidos y otras de Rusia. Esa no es la solución. No puede ser una salida. La solución, la salida es esta: las entidades en Rojava deben ser una fuerza dentro de toda Siria en un sentido aún más amplio. Eso es necesario para la unidad de Siria. La formación en Rojava es para la unidad de Siria. Si las formaciones allí, los kurdos, árabes, armenios, cristianos, no representan una fuerza, no pueden garantizar la unidad de Siria mañana. La estrategia en Siria es muy correcta. Extiendo mi respeto y saludos a todos aquellos que trabajan duro allí, sin distinción’”.

“Con respecto a una solución –indicó Mehmet-, el presidente dijo: ‘Si te conviertes en una fuerza, puedes resolver todo’. Le dije: ‘La represión continúa en forma intensiva. Usted dice que se debe hacer algo afuera, pero en Turquía esta posibilidad ya no existe’. A esto el presidente dijo: ‘Todavía se puede hacer lo siguiente: fortalecer sus instituciones. Si trabajas bien, puedes lograr resultados. Funciona bien, ¿qué significa eso? Servicio no a individuos, sino a la sociedad, a las personas. Así es como funciona la lucha. Me conoces bien, Mehmet. Mira, sabes cómo luché. Incluso luché contra mi madre. Luché contra ella cuando tenía siete años. Lo sabes muy bien’. Le dije: ‘Sí, lo sé. Así es como lo hiciste’. El presidente dijo: ‘Todo va con la lucha, con la lucha correcta. Tienes que ser una fuerza para resolver estos problemas. Puedes resolver los problemas en Medio Oriente y, llamémoslo por su nombre, la cuestión kurda, de esta manera. Si no eres una fuerza, nadie resolverá el problema. Estamos hablando de una mesa: la mesa en Turquía es de dos patas. Tienes que convertirte en la tercera pata. ¿Cómo se hace eso? Con fuerza. Si haces eso, lo lograrán. Funcionará si trabajas. Sí, se necesita una mesa y eso sirve para entregarse a las personas y trabajar’”.

“El presidente nos conoce. No he dicho nada. Sí, tal vez su cuerpo, su existencia física está en la isla Imrali, pero en su mente él está con nosotros –manifestó su hermano-. Él sabe lo que hacemos y cómo trabajamos. Déjame darte solo un ejemplo. Me dijo: ‘Tú también puedes hacer algo en tus alrededores, en Urfa. Todos ustedes tienen una tarea. No es posible retirarse y sentarse. Usted también puede hacer trabajo y servicios allí. Lo harás y también lo harán tus compañeros. Están estos pueblos y nuestros compañeros. Están estos turcomanos. Dales todos mis saludos’”.

Por último, el hermano de Öcalan describió las últimas palabras del líder kurdo: “Saludo a todos los que luchan contra el aislamiento en Rojava, Bashur, Rojhilat y Europa. Donde hay kurdos que han luchado contra el aislamiento, los felicito por su lucha. Mi salud es muy buena. Yo sé cómo vivir. Me ves, ¿cómo estoy?”.

“Por lo que pude ver, estaba bien –aseguró su hermano-. Su salud y su moral también eran buenas. Él dijo: ‘Les deseo éxito’. Le pregunté si habría otra reunión. No respondió mi pregunta. Él dijo: ‘Todo depende de tu lucha. Si progresas, todo se resolverá. Pero si no lo haces, continuará. Tanto el aislamiento, como el derramamiento de sangre continuarán… así que dejen que todos hagan lo que puedan’”.

FUENTE: ANF / Edición: Kurdistán América Latina